Ciudad de México, 2 de febrero (SinEmbargo).– Luz María Dávila, madre de dos jóvenes que fueron acribillados en Villas de Salvárcar, en Ciudad Juárez, Chihuahua, asegura que, cuatro años después de increpar al ex mandatario Felipe Calderón Hinojosa, hasta ahora, no ha perdonado al ex Presidente porque traicionó sus reclamos de justicia para sus dos únicos hijos.
En entrevista para el Diario de Juárez, Dávila asegura que está dispuesta a encarar también al titular del Ejecutivo, Enrique Peña Nieto, así como al Gobernador, César Duarte Jáquez con tal de conseguir justicia para sus dos hijos y del los otros 13 jóvenes que fueron acribillados por un comando armado que irrumpió en una casa cuando estaban en una fiesta.
El reportero Raúl Gómez Franco la cuestionó sobre el reclamo que le haría hoy en día a Calderón en caso de tenerlo enfrente de nuevo.
"Ay, pos que dejó muchas desgracias. Le diría que por culpa de él que movió muchas cosas en cuestión de narcotráfico se armó todo esto. Y desgraciadamente ahí perdimos mucho. Perdí a mis hijos y se perdieron muchos inocentes, pero pos ya qué se le puede hacer, el señor ya salió, ya se fue, muy cómodamente anda por allá, y uno cómo se quedó. Claro que no soy la única afectada, somos muchos en Juárez. Muchos lesionados, muchos muertos, muchas personas heridas, mucho de todo".
En febrero de 2010, durante una visita a Ciudad Juárez, el entonces Presidente se encontraba en un acto público ante los medios, sentado en una mesa, ante él se paró una mujer que lloraba y quien lo espetó: "Menos discursos y más acciones. Yo no puedo darle la mano y decirle 'bienvenido' porque usted no es bienvenido. Quiero que se haga justicia no sólo para mis dos niños, sino para todos los niños”.
Se trataba de Luz María Dávila, quien continuó increpando a Felipe Calderón: “Le apuesto que si a usted le hubieran matado a un hijo, usted debajo de las piedras hubiera buscado a los asesinos. Como yo no tengo los recursos, yo nos los puedo buscar”.
La madre de los jóvenes dijo ahora que no se podía quedar como si nada.
"Yo sentía que tenía que hacer algo, para que él se diera cuenta de todo lo que estaba pasando aquí en Juárez, no nomás lo de mis hijos. Fue una cosa, yo a veces veo el video y digo: ¡Ah chirriones! ¿Yo hice todo eso? Haga de cuenta que cuando le estaba diciendo eso a Calderón, yo a los lados veía puro oscuro. Nomás lo veía a él. Ni pensé lo que estaba diciendo, lo solté nomás".
También se le preguntó sobre una posible indemnización por parte del Estado mexicano a lo que Luz María respondió que "las autoridades de aquí se están haciendo locas para no dar nada."
Aseguró que no perdonaría ni a los asesinos de sus hijos como tampoco ha perdonado a Felipe Calderón.
"No. Si no he perdonado a Calderón, ni lo perdonaré nunca porque nos traicionó. Sé que eso no está bien, pero no los perdonaría. ¿Cómo voy a perdonar a los asesinos de mis hijos, a los únicos que yo tenía? Ni a Calderón. La última vez que vino al Memorial ahí estaba dando la mano y yo me volteé. Él cree que con venir con su risita ya se arregló todo. No. Lo perdone o no lo perdone yo sé que no le va a importar. Pero primero eran mis hijos".
Luz María dijo finalmente al Diario de Juárez que desearía encontrarse con el Presidente Peña Nieto para continúar exigiendo justicia para las víctimas de Villas de Salvárcar y “para que conozca realmente lo que está sucediendo en Juárez, que no está tan bien como se cuenta”, así como con el Gobernador César Duarte, a quien ya le hicieron llegar el mensaje a través del fiscal González Nicolás.
