El padre Alejandro Solalinde dijo que si Garduño hubiera sido un poco más flexible hubieran podido trabajar mejor en la mejora de las estaciones migratorias. En ese sentido, recordó que él buscó que llegara al INM Hugo Eduardo Vadillo Zurita, titular del Órgano Interno de Control del Instituto de Migración.
Ciudad de México, 19 de diciembre (SinEmbargo).– El 15 de marzo de 2023, el Presidente Andrés Manuel López Obrador instruyó al padre Alejandro Solalinde hablar con Francisco Garduño sobre los cambios que eran necesarios en el Instituto Nacional de Migración, una herencia de Carlos Salinas de Gortari. Sin embargo, el extitular de esta dependencia hizo oídos sordos al llamado. Once días después, un incendió en una estación migratoria en Ciudad Juárez, Chihuahua, se cobraría la vida de 40 personas y dejaría a 27 heridos, una tragedia que evidenciaría el trato criminal que persiste en estos espacios.
“Se pudo haber evitado si él (Garduño) hubiera obedecido al Presidente, es responsabilidad de él, porque es responsable de haber convertido las estaciones migratorias en cárceles, de haber tratado a los migrantes como delincuentes y ese mañana de haberlos encarcelado y no haberles dado siqueira agua como ellos se quejaron, si los hubieran tratado bien ellos no hubieran protestado”, expresó Solalinde en entrevista con “Los Periodistas”, programa que se transmite en el canal de YouTube de SinEmbargo Al Aire.
El 27 de marzo de 2023, un incendio en la estación migratoria de Ciudad Juárez se cobró la vida de 40 hombres que murieron asfixiados por el fuego provocado por uno de los migrantes en señal de protesta ante las condiciones indignas en las que estaban recluidos, y casi una treintena más resultaron heridos. Las 15 mujeres que estaban detenidas en las mismas instalaciones pudieron salir sanas y salvas cuando el humo empezaba a llegar a sus dormitorios.
En ese sentido, Alejandro Solalinde expuso a “Los Periodistas” que fue incongruente que Garduño haya responsabilizado de todo a dos venezolanos que ocasionaron el fuego. “Claro, lo incendiaron porque no les dieron agua, porque no les daban comida, porque estaban encerrados, ¿pero saben qué fue lo que los alteró más? Que les dijeron que los iban a deportar y fue cuando ellos empezaron a hacer de todo?”.
El pasado 13 de diciembre, Francisco Garduño llamó "el pollero de Dios" al padre Solalinde al sostener que se encarga de promover caravanas hacia los Estados Unidos. "Me atrevo a decir que el propio padre Solalinde es el pollero de Dios, nada más con eso ¿Imagínense por qué? Porque promueven las caravanas, lamentan el trato que se les da, pero no hacen nada para tratar de resolver su problema", dijo.
El titular del INM, Guillermo Garduño, acusó al padre Solalinde de ser “el pollero de Dios" por, según él, promover las caravanas de migrantes.
“Lementan el trato que se les dan, pero no hacen nada por tratar de resolver el problema".
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— Ruido en la Red (@RuidoEnLaRed) December 13, 2024
—¿Esa expresión del pollero de dios nace del resentimiento de Garduño? —se le preguntó a Solalinde.
—Sin duda. Fue nuestra relación de los dos con el (ex)presidente, una relación cotidiana que le estuvo informado no sé qué cosas, inclusive yo creo que de mi persona, y llevó una relación con él, pero al final el (ex)presidente nunca dudó de mí. Él sabe que yo no soy dinerero, amo a los migrantes, quiero sinceramente al ser humano, mi vocación es otra cosa, por eso me he identificado mucho con él.
Solalinde dijo que si Garduño hubiera sido un poco más flexible hubieran podido trabajar mejor en la mejora de las estaciones migratorias. En ese sentido, recordó que él buscó que llegara al INM Hugo Eduardo Vadillo Zurita, titular del Órgano Interno de Control del Instituto de Migración.
Con respecto a qué le respondería a Garduño, el padre Solalinde dijo que “él fue la autoridad, no sólo podía, tenía la obligación de haberme denunciado, porque si él sabía que yo era pollero y que estaba lucrando con los migrantes y como él dice, que estuve yo promoviendo las caravanas, inmediatamente él tenía la obligación, no era opcional, era obligatorio, de haberme puesto una denuncia, y claro lo hubiera probado, y no lo hizo”.