Adán Augusto López Hernández es un político que en los últimos años ha ganado notoriedad dentro de Morena y el movimiento de la llamada Cuarta Transformación. El tabasqueño dejó su cargo como Gobernador para sumarse al Gabinete del expresidente Andrés Manuel López Obrador como Secretario de Gobernación. Ahora, se desempeña como el coordinador de la bancada oficialista en el Senado de la República, en donde ha sido señalado por negociar con personajes de oposición para que su partido alcance la mayoría calificada.
Ciudad de México, 30 de noviembre (SinEmbargo).- En su salto a la política nacional Adán Augusto López Hernández ha construido una imagen de negociador, una característica que en su paso como Coordinador de los Senadores de Morena ha empleado para sumar los votos de personajes impresentables como el Senador Miguel Ángel Yunes Márquez, investigado y exonerado por corrupción.
Pero antes de llegar a la capital, como Gobernador de Tabasco, López Hernández sumó una serie de cuestionamientos por iniciativas polémicas como la “Ley Garrote” y, más recientemente, por sumar a su círculo cercano a funcionarios con ligas con el crimen organizado, como aseguró el actual Gobernador Javier May, al señalar que Hernán Bermúdez Requena, quien fue secretario de Seguridad Pública con Adán Augusto y luego con Carlos Merino, es el verdadero líder de “La Barredora”, la agrupación que se disputa el control criminal de la entidad con el Cártel Jalisco Nueva Generación.
En los últimos seis años en Tabasco la violencia tuvo una tendencia a la baja desde 2018 hasta 2022. Sin embargo, a partir de 2023, los indicadores comenzaron a subir. Hoy en día, el número de víctimas de homicidio doloso registradas tan solo en el primer semestre de 2024, ya supera en un 72 por ciento al total de víctimas reportadas en todo 2023.
"Todos saben, aquí era vox pópuli quién comandaba 'La Barredora' ¿O no sabemos?", cuestionó May el pasado 13 de noviembre en una conferencia de prensa. "Hernán Bermúdez", respondió uno de los reporteros. "Sí, ¿no?'', aceptó el Gobernador de Morena.
El propio Adán Augusto fue cuestionado sobre la acusación de su correligionario, pero negó posicionarse. Lo cierto es que se trata de un señalamiento de tiempo atrás. Documentos contenidos en los correos electrónicos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) que fueron filtrados por el grupo de hackers Guacamaya daban cuenta de cómo Hernán Bermúdez era investigado desde 2022 por sus vínculos con un grupo criminal dedicado al tráfico de migrantes y al robo de hidrocarburos.
En octubre de 2022, cuando se publicó esta filtración, el entonces Presidente López Obrador y el mismo Adán Augusto negaron la acusación. AMLO la atribuyó a la “prensa conservadora” y López Hernández cuestionó su autenticidad al tiempo que negó haber sido informado de los supuestos vínculos de su Secretario de Seguridad con el crimen.
AMLO y los López Hernández
No hay manera de entender la carrera política del Senador Adán Augusto López Hernández con Morena y el obradorismo sin la relación de su padre, el abogado y notario Payambé López Falconi (1932-2020) con el expresidente Andrés Manuel López Obrador.
Una de las anécdotas que se contaban en el hogar de los López Hernández era cuando Payambé López compró un par de zapatos a López Obrador en el trajín de su lucha en Tabasco, un relato compartido a manera de demostrar la cercanía del expresidente con este hogar.
El propio Andrés Manuel ha reconocido la contribución del padre de Adán Augusto al movimiento al haber dado fe del fraude que denunció en las elecciones de 1988 en Tabasco cuando él era el candidato a la gubernatura por el Frente Democrático Nacional.
“Allá cuando empezamos en Tabasco ningún notario quería (dar fe de las denuncias de fraude), y Payambé sí, el papá de Adán. O sea, por eso le tenemos mucho respeto al finado Payambé. En aquellos tiempos, cuando se empezó a luchar, ¿no?, por la democracia, que estaba más difícil”, compartió el hoy expresidente el pasado 1 de febrero de 2023 en su conferencia mañanera.
Esa misma relación, se sabe, fue la que acercó a López Obrador con los López Hernández, aunque es cierto que el último en sumarse a su movimiento fue Adán Augusto que hasta 2005 lo ayudó como coordinador territorial en su primera campaña presidencial. Antes de eso, el tercero de los cuatro hijos de Payambé López Falconi y la maestra, Aurora Hernández Sánchez, hizo carrera en el PRI.
El paso del PRI al obradorismo
Adán Augusto López Hernández es originario de Paraíso, Tabasco. Al igual que López Obrador, inició su carrera política en el PRI, partido en el que militó y hasta fue designado Gobernador interino tras la anulación de las elecciones de 2000, cuando Roberto Madrazo era Gobernador y Manuel Andrade el candidato priista.
Un bloque integrado por diputados locales de PRD, PAN, PT y del PRI eligieron a López Hernández, la madrugada del 2 de enero de 2001, pero no rindió protesta y el interino fue Enrique Priego, mientras se celebraron elecciones extraordinarias, en 2001, que volvió a ganar el priista Andrade, ahora militante del PRD.
López Hernández era Secretario General del PRI estatal y coordinador de campaña de Andrade, mientras su hermana Rosalinda era Diputada federal del PRD y su otra hermana, Alicia, era coordinadora de Finanzas de la campaña del candidato perredista, César Raúl Ojeda Zubieta.
El periodista Jorge Zepeda Patterson desentraña en La sucesión 2024, en el perfil que dedica a López Hernández, “la ambigua relación” del actual senador “con los años de inicio de la carrera política de Andrés Manuel en la oposición". En ese sentido, sostiene: “Hasta 2011, él siguió siendo priista, 13 años después de que el de Macuspana (AMLO) tomara el camino de la disidencia. Habría que dar cuenta del hecho de que este pecado original de Adán no le costó el acceso al paraíso tabasqueño del obradorismo”.
“No representa a la izquierda, es priista, sigue con la mentalidad priista”, planteó sobre Adan Augusto López Hernández un viejo conocido del obradorismo Rodolfo Lara Lagunas, quien fue maestro de Civismo de López Obrador cuando tenía 13 años y estudiaba la secundaria en la Escuela Federal No. 1 Jaime Torres Bodet de Macuspana.
La trayectoria política de López Hernández inició en Tabasco luego de estudiar un posgrado en la Universidad de París. Su primer cargo se remonta a los años 90, cuando fue Subsecretario de Protección Civil, Desarrollo y Prevención Social de Tabasco. En 1992 fue nombrado Presidente de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje en la entidad y de ese año a 1994, fue Subsecretario de Gobierno y Asuntos Jurídicos de Tabasco.
Luego de esos cargos de gobierno fue nombrado en 2001, Secretario General del PRI en Tabasco. Al año siguiente fue el Coordinador de campaña en el proceso interno del PRI para elegir candidato a Gobernador de Tabasco, siendo parte del equipo de Manuel Andrade Díaz en una elección que fue anulada por fraude electoral comprobado por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
En 2005, en la antesala de la elección presidencial, López Obrador le hizo la invitación a su paisano a sumarse a su movimiento. Así, fungió como Coordinador Regional de la campaña del candidato del PRD a la presidencia de la República en Tabasco. “Se trataba —escribe Zepeda Patterson—de un cuadro político de alto perfil local, bien visto por las corrientes obradoristas de Tabasco y con una relación con el líder que, si bien no era íntima, sí era familiar y relativamente antigua”.
“Eso le bastó para escalar posiciones hasta convertirse en uno de los cuadros estratégicos del obradorismo tabasqueño. Con los años la relación se haría más cercana; Adán ha mencionado que tomó la costumbre de facilitar un auto con chofer para trasladar a López Obrador del aeropuerto de Villahermosa al rancho de Palenque, en sus frecuentes visitas familiares y de descanso. En ocasiones lo acompañaba parte o la totalidad del trayecto”.
Ya bajo el amparo del obradorismo inició su carrera como legislador: de 2007 a 2009 fue Diputado Local de Tabasco por el PRD; de 2009 a 2012 fue Diputado federal y luego Senador de 2012 a 2018, luego de un intento infructuoso de obtener la candidatura del PRD a la Gubernatura de Tabasco que ganaría en la interna del partido Arturo Núñez. No obstante, en 2018 llegaría su turno y asumiría al frente de su estado, aunque solo sería por alrededor de dos años.
Un Gobernador con mano dura
En sus 32 meses de Gobierno, se aprobó en el Congreso de Tabasco la llamada “Ley Garrote”, promovida por López Hernández, con penas de hasta 20 años de prisión para quienes incurran en “delitos contra la libertad de tránsito; de oposición a que se ejecuten trabajos y obras públicas, e interrupción o dificultad del servicio público de comunicación” con el argumento de que se buscaba frenar las extorsiones en la entidad y erradicar la corrupción en todos los niveles.
Adán Augusto siempre ha negado que se trate de una norma represiva y argumentó que su objetivo fue limitar "la extorsión y chantaje" de grupos sindicales, pero quienes se oponen creen que va mucho más allá. El propio López Obrador respaldó la medida y dijo que en Tabasco había "extorsiones y corrupción y era necesario poner orden", aunque defendió que los ciudadanos tienen "el derecho a disentir".
No obstante, otros personajes de la izquierda cuestionaron la Ley.
“El delito de extorsión se puede perseguir sin que tenga vínculo con alguna acción colectiva. No es necesaria la ‘ley garrote’ de Tabasco para combatir la extorsión. ¿Para qué crear un problema donde no lo había? Es mejor aplicar la ley vigente sin excusas”, escribió por ejemplo Pablo Gómez Álvarez, uno de los líderes más longevos de la izquierda.
Ante los cuestionamientos y las duras críticas, incluso desde la izquierda, la “Ley Garrote” fue declarada inconstitucional por la Suprema Corte, aunque el estigma de su implementación aún persigue a López Hernández.
