La Dra. Erika Villavicencio-Ayub, Investigadora y Académica de Salud Mental de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), habló con SinEmbargo sobre las causas y los comportamientos relacionados con el suicidio.
Ciudad de México, 27 de agosto.- En menos de dos meses, dos personas tomaron la decisión de terminar con su vida en el complejo comercial Reforma 222, ubicado en la alcaldía Cuauhtémoc de la Ciudad de México. Se trató de una mujer de 40 años identificada como Araceli que falleció el pasado 8 de junio luego de aventarse del octavo piso del Hotel Holiday Inn Express, y de Carlos Antonio Mendez, un hombre de la misma edad, del que se registró su deceso el 28 de julio del año en curso tras arrojarse del segundo piso de dicha plaza comercial.
Estos dos últimos casos visibilizaron, una vez más, el problema de salud pública por el que no sólo está atravesando México sino América, de acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que indican que a pesar de que la tasa mundial de mortalidad por suicidio ha disminuido, en el continente, antes mencionado, ha aumentado a partir del 2000.
En este sentido, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) dio a conocer en el estudio "Factores contextuales asociados con la mortalidad por suicidio a nivel de país en las Américas, 2000-2019" que el 79 por ciento de los suicidios en América ocurre entre hombres, sin embargo no descartó que este problema no haya aumentado en mujeres.
Además, precisó que la tasa de mortalidad por suicidio varió considerablemente entre regiones, por ejemplo, América del Norte, compuesta por Canadá, Estados Unidos y México; está a la cabeza con 14.1 suicidios por 100 mil habitantes; mientras que la región andina, integrada por Colombia, Perú, Ecuador y Bolivia; registró la tasa más baja con 3.9 suicidios por 100 mil habitantes.
En entrevista para SinEmbargo, la Dra. Erika Villavicencio-Ayub, Investigadora y Académica de Salud Mental de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), compartió que, en efecto, estos datos ofrecen un panorama más claro de qué es lo que está sucediendo con la sociedad.
"Si comparamos las cifras de América con las de otras regiones no son ni cercanas, afortunadamente, a lo que se maneja en Japón, a lo que se maneja en África, no obstante han habido medidas para concientizar, para tratar de sacar estrategias dirigidas a cada tragedia porque cualquier suicidio es una tragedia familiar, social, nacional", apuntó.
"Si bien estas cifras no son tan cercanas, uno de los datos que llama la atención es precisamente la tendencia al alza en América porque prácticamente en las demás regiones ha venido este incremento poco a poco, y esto es alarmante porque el crecimiento, si lo vemos como porcentaje, es un crecimiento que nos puede alterar el ciclo del comportamiento en general de la sociedad", agregó.
Los datos proporcionados por la OPS van acorde con el reciente análisis de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés) que indican que alrededor de 49 mil 500 personas se quitaron la vida durante el 2022 en Estados Unidos, la tasa más alta jamás registrada.
De acuerdo con la agencia de noticias estadounidense The Associated Press, pese a que la CDC no ha calculado la tasa de suicidios anual, los datos que se dieron a conocer el pasado 10 de agosto indican que los suicidios en EU "son más frecuentes que en cualquier otro momento desde los inicios de la Segunda Guerra Mundial".
En este sentido, la Dra. Villavicencio-Ayub indicó que a partir del confinamiento causado por la pandemia de la Covid-19 fue que se registraron más casos, sin embargo este no ha sido el único factor que ha provocado que las cifras aumenten.
"Un suicidio es multifactorial [...] Evidentemente la pandemia sanitaria que acabamos de vivir es una pandemia que se prolongó en el tiempo y que, como ya se había anticipado, esta pandemia sanitaria se iba traducir en otro tipo de pandemias como la pandemia en salud mental, estas afectaciones que se derivan como consecuencia de lo que vivimos, vivimos aislamiento, vivimos crisis económicas, vivimos pérdidas de empleo, vivimos procesos de duelo, de pérdidas de nuestras familias y que no fueron a veces cercanas a lo que uno estimaba", explicó.
"No solamente la pandemia juega un factor central, hay otros elementos que somos testigos que se están viviendo. El consumo de drogas ha ido en incremento y aquí, específicamente, sabemos que en la agenda política y en la agenda de salud pública hay un tema, que es el consumo y los altos índices de afectación en el Norte de América que es relacionado con el fentanilo [...] El consumo en general de drogas están afectando a los jóvenes y también está ahí una serie de secuelas, entre ellas la ideación suicida", detalló.
El tráfico de fentanilo, un opioide que cada día provoca la muerte de alrededor de 200 estadounidenses, ha generado una disputa entre el Gobierno de México y el sector político más conservador de Estados Unidos, quienes se señalan los unos a los otros tratando de encontrar a un culpable por la producción y distribución de este químico que ha desatado un problema de salud pública en la Unión Americana.
México y Estados Unidos califican al fentanilo como un peligro para la seguridad nacional y la salud de las naciones, entre otros. La emergencia es evidente: Estados Unidos vive una “pandemia de opioides”, que provoca la mayoría de las muertes por sobredosis en la nación norteamericana. Se trata de una de las principales amenazas en la historia de la región.
"Hay algunas situaciones que se están normalizando, o sea, que un joven falte a la escuela, que un joven presente depresión, que un joven en una fiesta consuma sustancias, entonces esta situación aunada a una serie de elementos que socialmente venimos enfrentando como la inseguridad, la tasa de feminicidios, tasa de desaparecidos, todos estos factores sociales ponen en un estado muy vulnerable a la población", indicó la académica de Salud Mental.
Y abundó que, al consumo de drogas hay otros factores que se suman a los antecedentes de la ideación suicida. "Los aspectos de divorcios de padres, historias familiares donde hay presencia de trastornos mentales, donde hay violencias en estos núcleos, hay algunos abusos sexuales, abuso físico, o sea, este contexto promueve la aparición de estas conductas [...] También hay un factor de la relación con la persona, hoy por hoy estamos más conectados con la tecnología, pero estamos más solos en el terreno emocional, en el terreno de la comunicación directa, y esto ha puesto muy vulnerables, sobre todo, a los jóvenes".
A nivel nacional, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) dio a conocer que durante el 2022 se contabilizaron 8 mil 237 suicidios con una tasa de 6.4 por cada 100 mil habitantes, en las Estadísticas de Defunciones Registradas (EDR) correspondientes al año pasado.
Asimismo el Instituto indicó que los estados con las mayores tasas fueron: Yucatán, con 15.4; Chihuahua, con 13.9 y Nayarit, con 11.2; mientras que los que presentaron las tasas más bajas fueron Baja California, con 2.3; Guerrero, con 2.5 y Ciudad de México, con 3.0.
Por su parte, el pasado mes de julio, el Sistema de Transporte Colectivo Metro (STC) informó que en lo que va del año, a través del programa "Salvemos vidas", logró la contención de 66 personas con pensamientos suicidas.
En este sentido, el STC explicó que de las 66 personas apoyadas por el programa "Salvemos Vidas" en lo que va de este año, el 53 por ciento aceptó ser referida a una unidad de salud mental para su atención, mientras que el 9.3 por ciento ya estaba inserta en algún servicio de este tipo.
¿CÓMO AYUDAR A PREVENIR LA TRAGEDIA?
La Dra. Erika Villavicencio-Ayub compartió que, aunque no se puede llegar a prevenir del todo la ocurrencia de estas conductas, hay síntomas y actitudes que pueden llegar a estar relacionadas con el suicidio.
"Hay que estar atentos a nuestros seres queridos para detectar cómo muestra sus sus emociones, si lo vemos con desesperanza, si lo vemos con una tristeza permanente, cómo ven sus patrones de autocuidado, ¿es una persona que se alimenta?, ¿es una persona que trata de mantener la higiene personal o por el contrario viene en decremento el cuidado?", detalló.
"Los comportamientos que pueden demostrar que hay un problema es si está inquieto, irritado, ansioso y puede empezar a bajar el rendimiento de su función ya sea laboral, escolar.Si una persona busca aislarse, puede ser un síntoma de alerta. Los pensamientos se traducen en algún tipo de conductas observables, a veces no dicen nada pero empiezan a hacer rayones, dibujos, y empiezan a hacer alusión a la muerte, y ya cuando son más explícitas, ninguna amenaza tiene que ser menospreciada, pero también hay quienes lo verbalizan", agregó.
En México se encuentra activa la Línea de la Vida (800 911 2000), un servicio en el que se ofrece, entre otras cosas, atención a las personas o familiares con algún problema relacionado a salud mental como ansiedad, depresión o riesgo suicida; y el programa DISÍ a la Vida (555 533 5533), del Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México, en el que se brinda Primeros Auxilios Psicológicos .
"Si se llega a detectar que un familiar, conocido, o alguien cercano tiene alguna de estas sintomatologías, lo ideal es no dejarlo solo y tratar de escuchar a esa persona sin juzgarlo, sin interrumpirlo, evitando que se haga daño. En ese momento, posiblemente los primeros auxilios, por llamarlos desde la forma técnica, pueden ser el que se sienta escuchado por alguien, que se sienta visto por alguien", concluyó Villavicencio-Ayub.
- Con información de Alfonso López Dávila