El titular de Segob detalló que los ríos Grijalva y Usumacinta enfrentan "niveles severos de contaminación", por lo que el cambio climático se tiene que enfrentar pensando que no es solamente es sobre la generación de energía sino el rescate al agua y su consumo humano, entre otros.
Ciudad de México, 22 de marzo (SinEmbargo).– El Secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, advirtió este miércoles ante la reunión extraordinaria de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), realizada en Oaxaca, que más de la mitad del país enfrenta un grave problema de sequía y los ríos más importantes del país se encuentran muy contaminados.
"Hoy tenemos un problema severo de sequías, si no planeamos no vamos a poder ganar esa batalla, más de la mitad del territorio nacional enfrenta un grave problema de sequía, con los ríos, la mayoría de los más caudalosos del continente americano, contaminados a niveles tales que hacen imposible que sean posible fuente de abastecimiento de agua", señaló en su intervención ante los gobernadores del país.
"Ahí está el ejemplo del río Nasas (el segundo o tercero más largo del país), que a su llega a Nayarit está prácticamente contaminado por el escurrimiento que viene desde Durango, todos los químicos que viene arrastrando", aseveró.
Los Grijalva y Usumacinta, por ejemplo enfrentan "niveles severos de contaminación". "Entonces tenemos que pensar que el cambio climático no es solamente la generación de energía. Va por ir a rescatar nuestros cuerpos de agua y segundo planear y construir obras de infraestructura, que nos permitan sí dotar de agua suficiente a nuestros distritos de riego o dedicadas a la agricultura pero sobre todo que haya agua suficiente para consumo humano", expresó.
Con John Kerry, el Enviado para el Cambio Climático de Estados Unidos, y el Embajador de aquel país, Ken Salazar, como invitados especiales, López Hernández detalló que esta es una problemática que permea a lo largo y ancho del país. "Todos los estados han sido sobreexplotados, saqueados, se han ido acabando con el pretexto del libre mercado o la modernidad. Se han acabado nuestros recursos naturales".
Pero, admitió, "el destino nos alcanzó". "Nunca creímos que el cambio climático existiera, parecía un mito genial. Coincido con lo dicho aquí cuando dicen que hay que tratarlo, entre otras cosas, como enfermedad en el cuerpo humano, hay que prevenir. Si no regresamos a orígenes y no invertimos en educación no vamos a poder prevenirlo ni sus consecuencias", aseguró.
Por último, reiteró que el Presidente Andrés Manuel López Obrador ha decidido apoyar "con todo" una política pública que ayude a México a combatir el cambio climático y sus efectos.
Y es que los signos de los que habla López Hernández abundan en el país. Apenas esta semana, el director de la Comisión Estatal de Aguas y Saneamiento (CEAS), Antonio Nerio Maltos, aseveró que una sequía severa y prolongada como la que está viviendo Coahuila tiene que enfrentarse con diferentes acciones, como la concientización de las personas para ahorrar el agua a través de una campaña y la búsqueda de más fuentes de abastecimiento.
“Sí, estamos buscando más fuentes de abastecimiento. Estamos realizando más perforaciones, y de hecho cada vez son más profundas y cada vez es más difícil encontrar suficiente agua y de buena calidad”, explicó.
Agregó que hay municipios en donde no llega suficiente agua a las colonias y sin embargo, tenemos superávit en las fuentes de abastecimiento. ¿Qué significa? Que se está desperdiciando, en redes clandestinas o tuberías obsoletas.
Hoy, durante su conferencia de prensa, el Presidente López Obrador señaló que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) bombardeará nubes durante lo que queda de marzo y hasta mayo, con el objetivo de combatir la actual sequía del Valle de México, donde inicio este mes una reducción del suministro de agua en algunas zonas de la capital del país que son alimentadas por el Sistema Cutzamala, pues proveerá sólo 8.2 metros cúbicos por segundo, es decir, un 24 por ciento menos en comparación con 2019, cuando el Cutzamala suministró a la capital mexicana 10.5 metros cúbicos.