Los reportes de la Oficina Nacional de Estadísticas reportó que en el gigante asiático hubo 850 mil personas menos al terminar el 2022 a comparación del mismo tiempo pero del año previo.
Madrid/Beijing, 17 Ene. (EUROPA PRESS/AP).- La población de China ha caído por primera vez en seis décadas durante el año 2022, por lo que la tasa de natalidad ha bajado a un mínimo histórico, remarcando la profundización de la crisis demográfica que registra el país.
La Oficina Nacional de Estadísticas reportó que el país tuvo 850 mil personas menos a finales de 2022 en relación con el año previo. El conteo incluye únicamente a la población del territorio continental y excluye a Hong Kong, Macao, y Taiwán, así como a los residentes extranjeros.
En 2022 nacieron aproximadamente 9.56 millones de bebés, el nivel más bajo desde 1950, cuando comenzaron los registros, con 6.77 nacimientos por cada mil personas, a pesar de las políticas de natalidad del Gobierno chino, según informa el periódico South Chin Morning Post.
Sigue habiendo más hombres que mujeres, 722.06 millones por 689.69 millones, indicó la agencia, un resultado de la ahora anulada política de un solo hijo por familia y una preferencia tradicional por los hijos varones que mantengan el apellido.
Por otro lado, según los datos oficiales, han muerto 10.41 millones de personas, marcando un ligero aumento respecto a los casi 10 millones de muertes notificadas los años anteriores.
No obstante, durante este año la cifra de fallecimientos relacionadas con la COVID-19 podría aumentar considerablemente estos registros, ya que el Ejecutivo chino retiró las medidas anticovid en el mes de diciembre por las protestas sociales.
Desde entonces, el país ha registrado un brote que ha provocado un aumento de casos que preocupa a la comunidad internacional por la falta de transparencia en la magnitud de la situación.
Se cree que la última vez que China registró un declive de población fue durante el Gran Salto Adelante hacia finales de la década de 1950, el desastroso impulso de Mao Zedong a la agricultura colectiva y la industrialización que dejó como resultado una extensa hambruna que cobró la vida de decenas de millones de personas.