Es posible que las temperaturas sigan subiendo el fin de semana y que el aire siga contaminado. También cabe la posibilidad que caigan torrenciales aguaceros, pero esa presenta otra amenaza porque los rayos pueden provocar incendios, dijeron funcionarios.
LOS ÁNGELES (AP).— Tres incendios cerca de Los Ángeles estaban avanzando el viernes, alimentados por la seca vegetación en medio de advertencias de que las altas temperaturas y la falta de humedad podrían desatar más llamaradas.
Un enorme incendio forestal provocó evacuaciones al norte de Los Ángeles y emanaba densas nubes de humo al dirigirse hacia el desierto y el acueducto en el Valle Antelope. Los bomberos lograron frenarlo allí pero tuvieron que evacuar más viviendas en el sector oeste del valle.
El incendio estaba contenido en apenas un 12 por ciento y después de amenazar a más de cinco mil 400 viviendas, incineró unos 70 kilómetros cuadrados (27 millas cuadradas) de maleza. Los bomberos indicaron que 21 estructuras quedaron destrozadas, entre ellas por lo menos cinco viviendas. Ese incendio estaba en el Parque Nacional Ángeles, cerca del Lago Hughes.
Los bomberos se esforzaban en medio de terreno escarpado y temperaturas inhóspitas que llegaron a 28 grados centígrados (100 grados Fahrenheit). El pronóstico es de más clima seco y caliente y fuertes vientos que podrían avivar las llamas.
“Es el calor, el clima, lo que alimenta a este incendio”, comentó Nathan Judy, del servicio forestal local, al canal KABC-TV.
Es posible que las temperaturas sigan subiendo el fin de semana y que el aire siga contaminado. También cabe la posibilidad que caigan torrenciales aguaceros, pero esa presenta otra amenaza porque los rayos pueden provocar incendios, dijeron funcionarios.
Las evaluaciones preliminares indican que por lo menos cinco estructuras se incendiaron, pero las autoridades creen que otras resultaron dañadas.