Este tipo de robos no es aislado, pues en febrero de este año otro hecho similar se suscitó en el Centro de Enseñanza, Investigación y Extensión en Producción Ovina (CEIEPO), ubicado en Huitizilac, Morelos. En aquella ocasión, también despojaron de sus pertenencias a estudiantes y se llevaron varios animales.
Ciudad de México, 28 de junio (SinEmbargo).- La noche de este jueves, cuatro sujetos armados ingresaron a las instalaciones del Centro de Enseñanza, Investigación y Extensión en Producción Porcina (CEIEPP) de la UNAM, ubicado en Jilotepec, Estado de México. Así lo dio a conocer la Facultad de Medicina Veterinaria.
A través de un comunicado, la institución académica informó que, alrededor de las 23 horas de este jueves, un grupo de cuatro individuos ingresó al Centro, amagó al vigilante y a nueve alumnos, entre ellos, al menos nueve mujeres que se encontraban realizando su servicio social en el lugar. Todos ellos estuvieron aislados y sometidos al cabo de cuatro horas.
De acuerdo con el comunicado, los presuntos delincuentes despojaron de sus pertenencias a los estudiantes y además, hurtaron varios animales de dicho centro de enseñanza.
Una vez que los individuos huyeron, personal del CEIEPP dieron aviso a las autoridades del Centro y de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootencia, de la UNAM.
"La Dirección de la Facultad lamenta profundamente estos actos indignantes que atentan contra la seguridad, el bienestar y la armonía de nuestra sociedad. y se solidariza con los estudiantes afectados a quienes mantendrá todo el apoyo moral, psicológico y legal, durante el tiempo que sea necesario", escribió la UNAM en el comunicado.
Cabe destacar que en el mes de febrero, un acto similar se suscitó en el Centro de Enseñanza, Investigación y Extensión en Producción Ovina (CEIEPO), ubicado en Huitizilac, Morelos, toda vez que también entraron sujetos armados y asaltaron a alumnos, robaron objetos del Centro, además de borregos.
Asimismo, a finales del 2018, otras dos ocasiones, en ese mismo complejo, también fueron hurtados animales, sólo que aquellas veces no había alumnos, únicamente el vigilante, quien no se percató de los robos.
