El protagonista de la serie Club de Cuervos y de la película Nosotros los nobles (2013) compartió escenas en Murder Mystery con Jennifer Aniston, Adam Sandler, Gemma Arterton y Luke Evans.
Los Ángeles (EU), 18 junio (EFE).- Netflix aseguró este martes que casi 31 millones de cuentas de su plataforma vieron Murder Mystery en sus tres primeros días, un dato que convierte a esta película con Jennifer Aniston, Adam Sandler y Luis Gerardo Méndez en el mejor estreno de una cinta en este servicio de streaming.
El gigante digital, que en muy contadas veces hace públicos sus datos de audiencia, afirmó que 30 millones 869 mil 863 cuentas vieron Murder Mystery entre el viernes 14 de junio, fecha en que se estrenó la película, y el domingo 16.
Siempre según las cifras aportadas por Netflix, 13 millones 374 mil 914 de esas cuentas correspondieron a Estados Unidos y Canadá mientras que las 17.494.949 restantes se dieron en sus mercados en el resto del mundo.
La plataforma afirmó que con esos datos Murder Mystery consiguió el mejor fin de semana de estreno de una película de Netflix.
"¡Enormes noticias! Mi cabeza va a explotar. ¡Muchas gracias a todo el increíble equipo", dijo este martes en Twitter el actor mexicano Luis Gerardo Méndez al hacerse eco del mensaje de Netflix.
El protagonista de la serie Club de Cuervos y de la película Nosotros los nobles (2013) compartió escenas en Murder Mystery con Jennifer Aniston, Adam Sandler, Gemma Arterton y Luke Evans.
Parodia de las historias detectivescas de Agatha Christie y dirigida por Kyle Newacheck, Murder Mystery se centra en un torpe policía (Sandler) y su esposa (Aniston), una peluquera amante de las novelas de misterio, quienes se ven envueltos durante sus vacaciones europeas en el asesinato de un millonario.
Méndez, que interpreta a un piloto de carreras en esta cinta, aseguró en una entrevista con Efe publicada antes del estreno de Murder Mystery que con este proyecto lleno de estrellas de Hollywood se reafirmó en que la comedia puede cruzar fronteras y llegar a todos los públicos.
"No me puse nervioso hasta el primer día que me tocó actuar ya en el set y tenía que abrir la boca. Para mi suerte, mi primera escena fue delante de todos los actores de la película", bromeó.
"Estaba muy nervioso y solamente pensaba: 'No la cagues'. Pero en cuanto dije la línea, todos se empezaron a carcajear. Y fue muy bonito porque me di cuenta de que, de alguna manera, después de 17 años de trabajar en esto sí estaba listo y de que, al final, la comedia, si la haces con verdad y rigor, funciona sin importar si eres japonés, australiano, inglés o mexicano: es universal", dijo.