En el marco de sus primeros 100 días de Gobierno, el Presidente Andrés Manuel López Obrador enlistó una serie de avances que ha logrado en estos primeros tres meses en materia económica, entre los que destacan las consultas ciudadanas sobre el NAIM y la termoeléctrica Huexca, el avance del peso frente al dólar, la baja inflación y el aumento en la confianza del consumidor.
Ciudad de México, 11 de marzo (SinEmbargo).– El Presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que en estos primeros 100 días de su Gobierno la economía de México está en marcha y no hay ni asomo de una recesión como pronostican algunos analistas "de mala fe".
"La economía está en marcha, aún crece poco, pero no hay ni asomo de recesión como pronostican los analistas de mala fe, se van a quedar con las ganas”, dijo el Presidente durante su informe al cumplir 100 días de Gobierno.
En el acto encabezado en Palacio Nacional y ante la presencia de políticos y empresarios como Carlos Slim, enlistó una serie de avances que ha logrado en estos primeros tres meses en materia económica, entre los que destacan las consultas ciudadanas sobre el NAIM y la termoeléctrica Huexca, el avance del peso frente al dólar, la baja inflación y el aumento en la confianza del consumidor.
Enfatizó que el plan de su Gobierno para lograr el crecimiento económico consiste en acabar con la corrupción, liberar fondos y destinarlos al desarrollo de los pueblos.
“También hemos confirmado en este periodo de 100 días que si se acaba con la corrupción y se gobierna con austeridad se puede tener crecimiento. Esto es lo que vamos a demostrar no sólo en México, también en el mundo, este el nuevo modelo económico. Vamos a convertir a México en una potencia económica con dimensión social”, detalló.
Puso como ejemplo el combate al robo de combustible, que permitirá ahorrar 50 mil millones de pesos, y destacó que ya no hay lujos en el Gobierno. “Están en venta autos, no se rentan oficinas de lujo y nadie tiene servicio medico, cajas de ahorro o seguros privados con cargo al erario, se acabaron los privilegios de la clase dorada de la burocracia”.
Sobre las adquisiciones, dijo que se tiene calculado ahorrar 200 mil millones de pesos, más 300 mil millones de pesos al evitar la corrupción, lo que permitirá disponer de una bolsa adicional de 700 mil millones de pesos durante el presente año, “por eso no tendremos necesidad de alterar los equilibrios macroeconómicos”.
“Nunca gastaríamos más de lo que ingresa a la Hacienda Pública, mantendremos un manejo responsable de las finanzas públicas; refrendamos el compromiso de no aumentar precios de gasolinas. La Magna, el diesel y la luz han subido, pero pronto se resolverá este asunto, habrán ajustes para cumplir nuestra palabra”, aseguró en su discurso en Palacio Nacional ante la presencia de empresarios y miembros de su Gabinete.
El Presidente también destacó algunos avances en materia económica durante los primeros 100 días de Gobierno: “En estos primeros 100 días el peso ha ganado 4 por ciento con relación al dólar, la inflación bajó de 5.9 al 4.9 por ciento, la confianza del consumidor ha alcanzado máximos históricos. En el primer bimestre de 2019, el Gobierno recaudó 8 mil millones de pesos más por encima de lo programado, destacando el ISR. Estoy seguro que la confianza de los contribuyentes en el manejo honrado de sus impuestos nos permitirá un incremento en los ingresos”.
López Obrador mencionó que este año se han creado 220 mil 628 nuevos empleos y está mejorando el consumo interno, pues las tiendas de autoservicio reportaron un incremento de 2.5 por ciento de aumento en sus ventas de enero.
Destacó el consenso que se logró entre empresarios y trabajadores para aumentar el salario mínimo, que para este 2019 es de 102.68 pesos diarios y de 176.72 en la frontera norte, un aumento que va del 16.20 hasta el 100 por ciento con respecto a los 88.36 que se habían establecido para este año. Esta cantidad cubrirá por primera vez la Línea de Bienestar establecida por el Coneval.
“Logramos un importante acuerdo con empresarios y trabajadores para aumentar el salario mínimo en un 16 por ciento, algo nunca visto en los 36 años del periodo neoliberal”, enfatizó.
El Presidente aseguró que está consciente del reto de lograr el crecimiento anual del 4 por ciento anual. “Tengo la convicción que el combate a la corrupción, que implica acabar con el influyentismo, permitirá que la inversión se aplique pronto y con eficiencia. La inversión pública se convertirá en semilla”.
El Jefe del Ejecutivo federal anunció que este lunes se publicarán las prebases para licitar la concesión de 50 mil kilómetros de líneas de fibra óptica de la Comisión Federal de Electricidad (CFE)para comunicar con Internet a los pueblos apartados del país. “La contraprestación que pediremos a la empresa que gane es de proporcionar Internet gratuito en plazas, escuelas y sitios públicos. Esta obra que implicará 30 mil millones de pesos será en beneficio del México del futuro”.
También adelantó que se licitarán algunos proyectos estratégicos:
– En abril se realizará la convocatoria para el Tren Maya, que beneficiará a los estados de Quintana Roo, Yucatán y Chiapas. En cuatro años se tendrá una capacidad para trasladar a 3 millones de visitantes al año.
– El Istmo de Tehuantepec.
Sobre la cancelación del Nuevo Aeropuerto internacional de México en Texcoco detalló que “fue la mejor decisión” y mencionó una de las razones de esta decisión: íbamos a padecer de hundimientos en Texcoco.
Hemos avanzado en la construcción del nuevo aeropuerto en Santa Lucía: se compraron bonos y regresamos el dinero a los inversionistas, sólo nos falta la liquidación a las constructoras. Vamos a resolver la saturación del AICM en tres años, con una solución de largo plazo y de mejor calidad, indicó el Presidente.
Informo también que ya inició el programa de la Zona Libre en la frontera con Estados Unidos, en donde se redujo el ISR al 20 por ciento, se aumentó al doble el salario mínimo y se redujeron los precios a los combustibles.
También habló acerca de su plan para rescatar a Pemex y CFE, el cual ha provocado la desconfianza de las agencias calificadoras internacionales.
“Nos hemos propuesto rescatar la industria petrolera y eléctrica de la Nación, que fueron saqueas en el periodo Neoliberal. La Reforma Energética fue un rotundo fracaso, a cuatro años de su aprobación se redujo la inversión pública y privada, se producen menos gasolinas, hay más importaciones, los ingresos públicos disminuyeron, los contratos que realizó el gobierno incrementó la deuda de Pemex y CFE”.
Estamos optimistas, dijo López Obrador, “porque ya se detuvo la corrupción tolerada de Pemex y CFE, gracias a ello, estamos invirtiendo más para la producción y refinación de petróleo, además de la producción de energía eléctrica”.