Disney no descarta un futuro spin-off o incluso una serie en Disney+, el servicio de streaming de la compañía. "Nos hemos reído de nosotros mismos y eso gusta. Veremos hacia dónde nos lleva", señalaron los realizadores.
Madrid, 8 de diciembre (EuropaPress).- Llega a los cines Ralph rompe Internet, secuela en la que el grandullón de los videojuegos y su inseparable amiga Vanellope descubren Internet y se embarcan en un apasionante viaje por el ciberespacio en busca de una pieza de repuesto que salve Sugar Rush, el videojuego de Vanellope.
Su aventura les llevará a recorrer la red de redes, un lugar representado aquí como una fascinante Metrópoli abarrotada de todo tipo de personajes. Y es que si en la primera película los videojuegos de cada uno de los personajes eran algo así como "sus pequeños pueblos", ahora dan el salto a lo desconocido, tal y como señalan los directores del filme Rich Moore y Phil Johnston en una entrevista a CulturaOcio.com.
Y allí, entre los millones y millones de personas que caminan por esa gran ciudad de Internet, yendo de un lado a otro por sus abarrotadas calles llenas de letreros luminosos e incontables edificios de Google, EBay o Youtube, Ralph y su pequeña amiga Vallenople conocerán la sapiencia de los buscadores, se cruzarán con el spam y sus tramposos métodos, visitaran los rincones oscuros de la deep web y también serán presos de la estrategia de los algoritmos mientras, como ya ocurría en la primera entrega, se suceden un aluvión de 'cibercameos’.
Pero, sin duda alguna, y con permiso de Shank, carismático personaje interpretado por Gal Gadot (Wonder Woman) que influirá decisivamente en Vallenople, el encuentro que más impactará al público es el que les reunirá con todas las princesas Disney.
Unos pasajes geniales que explotan, en clave de humor, todos los clichés y desventuras acumulados durante décadas y décadas de historias marcadas por los príncipes azules y finales con perdices. "Crear esas secuencias fue algo genial", recuerdan entusiasmados los directores que pudieron contar con once de las catorce actrices que fueron las voces originales de las princesas.
"Cuando decidimos hacer esta escena no éramos conscientes de lo mucho que íbamos a meternos dentro del mundo de estas princesas y conseguimos trabajar con once de las catorce, fue un sueño hecho realidad", insiste Moore.
"Esa escena se decidió hace tres años y, aunque este tipo de películas dan muchas vueltas, esa secuencia en concreto no ha cambiado prácticamente nada", señala el productor del filme, Clark Spencer, que, consciente de lo mucho que está gustando está "evolución" y vuelta de tuerca a las princesas Disney, no descarta un futuro spin-off o incluso una serie en Disney+, el inminente servicio de streaming de la compañía. "Nos hemos reído de nosotros mismos y eso gusta. Veremos hacia dónde nos lleva", apunta.