La Corte de Apelaciones del Cuarto Circuito en Estados Unidos determinó hoy que el decreto propuesto por el titular del ejecutivo, Donald Trump, en enero pasado que prohibía el ingreso de personas de Chad, Irán, Libia, Siria, Somalia y Yemen al país está "contaminado inconstitucionalmente de animosidad contra el Islam".
Virginia, Estados Unidos, 15 de febrero (AP).- La prohibición de ingreso a Estados Unidos de viajeros de seis países musulmanes decretada por el presidente Donald Trump es anticonstitucional porque muestra una clara antipatía contra el Islam, sentenció hoy una corte federal de apelaciones de ese país.
La Corte de Apelaciones del Cuarto Circuito dijo que estudió las declaraciones de Trump y funcionarios de su gobierno, así como el decreto mismo y llegó a la conclusión de que la prohibición está "contaminada inconstitucionalmente de animosidad contra el Islam".
Tras una votación que resultó nueve contra cuatro la corte ratificó la sentencia de un juez federal en Maryland, quien bloqueó la solicitud del decreto que prohíbe la entrada de personas provenientes de Chad, Irán, Libia, Siria, Somalia y Yemen que tienen relaciones éticas con personas en Estados Unidos.
El fallo del Cuarto Circuito sostuvo que el decreto tendría un "efecto perjudicial mucho más amplio" que el prohibir el ingreso a ciertos extranjeros, pues "niega a decenas de millas de estadounidenses la posibilidad de tener una familia completa e intacta", dijo.
"A nivel fundamental, proclama burla a la consagración de nuestra nación a la libertad y tolerancia religiosas", escribió el juez Roger Gregory en el dictamen mayoritario.
Es la segunda vez que este tribunal rechaza una prohibición de ingreso. En mayo, la corte rechazó una versión anterior y, citando las palabras de Trump, dijo que "está impregnada de intolerancia religiosa, animosidad y discriminación".
Trump anunció la prohibición inicial en enero del año pasado, poco después de que asumiera la presidencia, y el decreto provocó caos y protestas en los aeropuertos de todo el país. Un juez federal en Seattle la bloqueó y desde entonces las cortes debaten una nueva versión.