Salvador Olmos, catedrático de la División de Ciencias Sociales, es investigado por presuntamente atacar sexualmente a una estudiante asiática.
Por Tere Segura
Ciudad de México, 29 de junio (SinEmbargo/ZonaFranca).- Una estudiante de origen asiático que llegó de intercambio a la Universidad de Guanajuato, fue víctima de acoso sexual por parte de un catedrático de la División de Ciencias Sociales y Humanidades, y a pesar de que el hecho se registró hace más de 15 días la información de la institución es escasa.
De acuerdo con información del programa institucional de Igualdad de Género (Ugénero), en lo que va del año se han registrado 60 casos de acoso sexual en los diferentes campus de la Universidad, lo que refiere que en promedio se llegan a registrar 10 quejas al mes de alumnas que son víctimas de acoso
Otro caso que evidencia la problemática se registró en la División de Ciencias Económico Administrativo (Dcea) en donde una estudiante recibió mensajes de texto con propuestas indecorosas y de acoso de parte de un catedrático, caso del que la UG poco sabe.
LA JOVEN EXTRANJERA SUFRIÓ INTENTO DE VIOLACIÓN
La joven oriental que tomaba clases en la División de Ciencias Sociales denunció que un catedrático de Español, Salvador Olmos, la intentó atacar sexualmente en el cuarto que él mismo le rentaba.
Fuentes allegadas a la Universidad de Guanajuato confirmaron a Zona Franca que el presunto agresor entró a la habitación de la estudiante y se abalanzó sobre ella con intenciones de violarla, y aseguraron que el hecho ya es investigado por el Consejo de Honor y Justicia de la División.
Al respecto el coordinador del programa Ugénero, Abraham Nemesio Serrato Guzmán, confirmó el caso de acoso sexual que sufrió la estudiante de intercambio en el espacio que le rentaba el profesor, sin embargo, y después de un silencio, negó que hubiera habido alguna agresión física, “que yo sepa no, al parecer fue verbal.
Dijo que la coordinación de Ugénero se enteró del caso por los docentes de la División, e inmediatamente se buscó para ofrecerle orientación y acompañamiento si la conducta es tipificada como delito, sin embargo ella estaba a un par de días de regresar a su lugar de origen y no podía retrasar su viaje, por lo que solo pidió que se sentara el precedente.
“Se levantó una acta de hechos y se envió a Comisión de Honor y Justicia, y ahí se terminará si es competente o no, y en su caso la sanción que pueda generar contra la persona”.
El encargado de Ugénero dijo desconocer qué programa académico cursaba la joven víctima y tampoco dio mayores detalles del asunto, con el argumento de que se trata de un tema delicado y para resguardar la presunción de inocencia del inculpado, cuyo nombre no quiso confirmar.
“Por la confidencialidad y delicadeza del caso no podemos revelar esos detalles, es información sensible, hay información que es publica y otra que no, y no podemos dar detalles para no exponer a la persona, aun cuando ella ya no está aquí. (…) Se trata de guardar la confidencialidad de la agredida y presunto agresor, hasta que no se haga el periodo de revisión del caso, es vulnerar sus derechos”.
Serrato Guzmán tampoco dio a conocer la fecha en que ocurrieron los hechos, porque en ese momento no se encontraba Erika Hernández Castro, responsable de la ventanilla Ugénero y donde se encuentra el expediente.
“Nosotros nos enteremos entre la última semana de mayo y la primera de junio de este semestre, que es cuando los alumnos presentan exámenes y los estudiantes de intercambio se estuvieron yendo. La agresión se dio semanas anteriores, de acuerdo a lo que refirió –la víctima- y de primera instancia se acercó con los profesores de su unidad académica y posteriormente se contactaron con nosotros”.
El acta de hechos que se levantó y que fue firmado por la víctima, fue turnado a la Comisión de Honor y Justicia de la División de Ciencias Sociales para su investigación, pero en caso de declararse incompetente, el caso pasará a la Comisión de Honor y Justicia del campus Guanajuato, proceso que dijo es externo al programa Ugénero.
ACOSO ELECTRÓNICO EN DCEA
El coordinador del programa Ugénero, reveló que existe otro caso de acoso sexual vía electrónico por parte de un catedrático en DCEA que se dio al finalizar el semestre, pero tampoco tienen información suficiente.
Indicó que la coordinación se enteró a través de redes sociales, y aunque se buscó a la estudiante víctima para brindarle los servicios y el apoyo institucional para salvaguardar su integridad, ella no quiso proceder porque ya se encontraba de vacaciones y estaba ocupada en su trabajo, según lo dicho por Abraham Nemesio.
“Le brindamos todas las opciones, le enviamos un correo electrónico con los servicios y en el momento que decida hacer uso de ellos se dará apoyo. En este caso no se levantó acta de hechos porque tenemos que tener la autorización de la persona para dar visto, en este caso esperaríamos a que ella pueda firmar el acta de hechos”, explicó.
En redes sociales se dio a conocer que un grupo de estudiantes de DCEA denunciaron que una de sus compañeras recibió mensajes de texto acosadores, por un catedrático del departamento de Estudios Organizacionales de apellido Lira.
“No hemos tenido acceso al material, tendríamos que hablar con la estudiante y ella estar dispuesta, porque cuando nos comunicamos con ella, vía telefónica, por correo y whatssap, ha estado ocupada”.
VAN 60 CASOS EN ESTE 2017
De acuerdo a información proporcionada por la coordinación del programa Ugénero, en lo que va de este año se han presentado 60 casos de acoso sexual en la Universidad de Guanajuato.
El último informe con corte al 31 de mayo registró 58 casos, que se suman a estos dos últimos.
Abraham Nemesio Serrato Guzmán tampoco quiso detallar cuántos resultaron positivos porque la encargada de la ventanilla no se encontraba, solo dijo que algunos han sido comprobados y con sanciones, y que incluso han llegado hasta la denuncia penal.
A principios del año pasado quedó en evidencia la falta de protocolos de la Universidad de Guanajuato para atender temas de género, con el caso de ataque sexual contra una subordinada por parte del catedrático de la división de Derecho y cercano colaborador del rector general, Julio César Kala.
En aquel entonces, la víctima tuvo que recurrir a la Procuraduría de Derechos Humanos por no encontrar apoyo de la institución.
A raíz del hecho las autoridades universitarias se vieron obligadas a reforzar las políticas de género fue en mayo cuando entró en vigor el Protocolo de Atención Inicial a casos de violencia de género en la UG que incluye medidas de protección, pautas de actuación, plan de atención inicial, plan de seguridad individualizado, seguimiento, y canalización a instancias sancionadoras, entre otros.
