A menos de tres semanas de las elecciones presidenciales en EU, Donald Trump reiteró hoy su desafío. Dijo que aceptará el resultado electoral "si gana". El magnate ahondó en su denuncia de que se trata de unos comicios "amañados" y favorables a Clinton. En medio de sus polémicas declaraciones, una nueva denuncia de acoso sale a la luz en su contra: una instructora de yoga lo acusó de haberla manoseado hace 18 años.
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Por JOSH LEDERMAN y JULIE PACE
WASHINGTON (AP) — Donald Trump dejó abierta el jueves la posibilidad de rechazar el resultado de la elección presidencial, afirmando que lo aceptará sólo "si yo gano".
El candidato presidencial republicano dijo que se reserva el derecho de "rechazar el resultado o presentar una demanda" si pierde, un día después de haber provocado estupor en la nación al negarse, en el último debate entre los candidatos, a especificar si aceptaría el fin de la contienda. Aun así desestimó la posibilidad de que ello ocurra porque "no vamos a perder".
"Quisiera prometer y jurar a todos mis votantes y partidarios y a todo el pueblo estadounidense que yo aceptaré totalmente el resultado de esta gran e histórica elección presidencial", dijo Trump, y tras hacer una pausa de varios segundos añadió: "si yo gano".
La campaña de Trump se encontraba en apuros y bajo intensas críticas luego que el candidato rechazó el pilar fundamental de la democracia norteamericana: aceptar con dignidad cuando uno pierde una elección.
Trump ha denunciado repetidamente que se está fraguando un fraude electoral masivo aunque no hay evidencia de ello y más bien los hechos lo contradicen.
Preguntado en el debate de la víspera si aceptaría el resultado, Trump dijo: "Se los diré en ese momento. Los mantendré en suspenso".
La candidata demócrata Hillary Clinton calificó la respuesta de "aterradora".
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El jueves, Trump trató de atacar a Clinton, acusándola de "tramposa" y exigiendo que ella "debe renunciar a su candidatura". Esgrimió como argumento un correo electrónico hackeado indicando que la campaña de Clinton había recibido por adelantado una pregunta que se le iba a hacer durante un evento electoral en las primarias.
"¿Se imaginan lo que hubiera pasado si a mí me hubieran pasado las preguntas por adelantado? Me mandarían a la silla eléctrica, ¿no creen?", dijo Trump en un evento de campaña en Ohio.
Trump se refería a un mensaje enviado en marzo de una veterana colaboradora de Clinton, Donna Brazile, que llevaba como tema "De vez en cuando me dan las preguntas por adelantado". El mensaje contenía la redacción básica de una pregunta sobre la pena de muerte que se le iba a hacer a Clinton en el evento, una asamblea de ciudadanos organizada por CNN. Eventualmente se le hizo a Clinton una versión distinta de la pregunta.
Brazile, quien luego fue presidenta del Comité Nacional Demócrata, trabajaba para CNN en ese entonces. El mensaje era uno de miles que fueron publicados por Wikileaks cuando fue infiltrada la cuenta de correo electrónico del jefe de campaña de Clinton. El equipo de la candidata ha denunciado que el gobierno ruso estuvo detrás del hacking.
Brazile ha dicho reiteradamente que ella nunca recibió las preguntas por adelantado, pero no ha explicado cómo es que el contenido de ese mensaje parece contradecirle. Tanto Brazile como la campaña de Clinton se han negado a confirmar o negar la autenticidad de los correos difundidos, pero no han surgido evidencias de que hayan sido falsificados.
Clinton "usó estas preguntas, las estudió, elaboró las respuestas perfectas y nunca admitió haber hecho algo malo", dijo Trump. Añadió que Brazile debe renunciar como titular del Comité Nacional Demócrata.
"TRUMP ME MANOSEÓ", ACUSA INSTRUCTORA DE YOGA
La instructora de yoga Karena Virginia acusó hoy a Donald Trump, de haberla manoseado hace 18 años.
Virginia ofreció una conferencia de prensa en Nueva York junto a la abogada Gloria Allred, quien tan solo hace una semana representó a otra de las mujeres que habrían sido manoseadas por Trump.
La instructora de yoga, de quien no se quiso revelar detalles muy personales, rompió en llanto varias veces al recordar su encuentro con el magnate republicano en 1998, a la salida del Abierto de Tenis de Estados Unidos.
"Estaba esperando un auto para que me llevara a la casa cuando me percaté de que Donald Trump se me acercaba. Yo sabía quién era, pero no lo conocía" contó Virginia.
La mujer dijo que Trump se encontraba junto a otros hombres y que mientras se aproximaba hacia ella se refería en términos que la hacían sentir como un objeto, mas no como una mujer.
"Miren, vean a esta, no la hemos visto antes, mira esas piernas. Luego se acercó y con su brazo derecho cogió mi brazo derecho y deslizó su mano", denunció Virginia.
La instructora de yoga confesó que mantuvo esta experiencia en secreto ya que se sentía avergonzada de lo que le había sucedido y que, de hecho, el altercado con Trump le produjo secuelas emocionales y psicológicas.
"Dejé de usar vestidos cortos y tacones altos, me sentía culpable de hacerlo", contó entre lágrimas.
Virgina, sin embargo, decidió salir a la luz como una muestra de fortaleza y de apoyo hacia otras nueve mujeres que también han denunciado episodios de acoso sexual en contra del candidato republicano.
"Estoy aquí por mí, por mi hija y por las otras mujeres que merecen ser respetadas. Muchos me dijeron que no lo haga por miedo a exponerme a que me llamen mentirosa, pero me cansé", añadió sollozando.
Desde que las nueve mujeres salieron a la luz pública, Trump ha rechazado rotundamente todas estas acusaciones, calificando a todas las mujeres de "mentirosas" y anoche mismo afirmó que algunas de ellas sólo buscan "diez minutos de fama".
Junto a la instructora de yoga se mantuvo todo el tiempo Allred, quien aseguró que no conocía a Virginia hasta antes de que ella la contactara.
Allred, además, volvió a reiterar que apoya la candidatura de Hillary Clinton, pero que su tendencia política no se mezcla con su labor profesional.
"Yo apoyo a Hillary Clinton, pero también tengo mi propia firma legal y nadie me dice qué hacer con ella", dijo.
La abogada confirmó que por el momento Karena Virginia no planea convertir sus acusaciones en una demanda legal formal en contra de Donald Trump.