MinuteEarth publicó un video en Youtube que explica el origen y la forma en la que médicos y científicos lograron determinar que cada función y capacidad del ser humano corresponde a una actividad cerebral en específico. De ese modo y hasta el día de hoy, se estableció como una verdad científica la existencia de un "mapa mental".
Ciudad de México, 23 de septiembre (SinEmbargo).- El video de MinuteEarth explica que en 1861 el médico francés Paul Broca (1824-1880) estudió el caso de un paciente, quien a pesar de ser capaz de entender sin problema alguno lo que las personas le decían, sin embargo no le era posible expresar otra palabra que no fuera “Tan”.
Cuando el paciente murió, se menciona en la grabación, el cirujano realizó una necropsia para estudiar el cerebro del occiso. Durante su análisis descubrió que el paciente tenía una lesión cerebral en el lóbulo frontal izquierdo, lo que lo llevó a deducir que esta parte del cerebro es la encargada de procesar el lenguaje.
Aunque originalmente la idea de que diferentes partes del cerebro controlan diferentes funciones y capacidades del cuerpo fue descartada, paulatinamente se fue adoptando como una realidad científica. Así nació la idea de un “mapa cerebral localizado” para seres humanos.
De las diferentes observaciones, a lo largo del tiempo se pudo determinar que las nuevas memorias se generan en el hipocampo; o que el miedo nace en la amígdala; así como que el reconocimiento facial depende del área fusiforme facial.
Empero, menciona el video, “hay una gran diferencia entre correlacionar una específica parte del cerebro con una específica función mental, y probar que realmente esa parte del cerebro es la causa de una u otra función”. Ahí es donde entre la resonancia magnética, que en conjunto con el método de observación de pacientes, ayuda a determinar qué partes del cerebro se activan cuando alguien realiza una cierta actividad, casi como si se prendieran focos en distintas partes de los sesos.
Conforme la ciencia y la medicina avanzaron, médicos y científicos descubrieron que para una sola acción (como parpadear) existe varias funciones cerebrales que actúan en conjunto, por lo cual necesitan estar conectadas. Pues, cuando una de esas conexiones se rompe, es cuando surgen problemas como el de aquél paciente del siglo IXX.
Sin embargo, señala el material, quizá nunca pueda ser develado por qué el paciente de Broca sólo podía decir “Tan”. Así de enigmático es el órgano en el que habitamos.
