Nadie negará que la caída del proyecto de gobierno del presidente Enrique Peña Nieto tuvo su primer gran fractura (la segunda y definitiva sería con los 43 de Ayotzinapa) el día en que se dio a conocer el escándalo de la Casa Blanca.
Suceso todavía inolvidable, el descubrimiento de los lazos del presidente Peña Nieto con el Grupo Higa, consorcio empresarial que recibió significativas canonjías del Ejecutivo federal (incluso desde su tiempo como Gobernador del Estado de México), puso en jaque la administración peñanietista.
El cónclave de este escándalo lo originó una investigación llevada a cabo por un grupo especial de reporteros de Aristegui Noticias, quienes se dedicó a documentar minuciosamente todo lo referente a la sospechosa adquisición de esta mansión.
Los resultados ya todos los conocen: pese a la contundente evidencia de un acto de corrupción de resonancia internacional, Virgilio Andrade, Secretario de la Función Pública, declaró que en la adquisición de esta residencia no hubo ni conflicto de interés ni, por supuesto, corrupción alguna.
La caída de Aristegui, debido a este bombazo, y la de los hacedores de esta investigación no pudo detener el desánimo social y, como consecuencia lógica, el advenimiento en octubre pasado de la publicación del libro La casa blanca de Peña Nieto (Grijalbo, 2015), de Daniel Lizárraga, Rafael Cabrera, Irving Huerta y Sebastián Barragán, con un prólogo (que no podía faltar) de Carmen Aristegui.
En La casa blanca de Peña Nieto se describen todos los pormenores que envolvieron este indignante caso y, además, otros eventos (como el de la casa misma de Luis Videgaray) que lo rodearon.
El objetivo parece ser uno solo: dejar constancia clara (y detallada) de la delirante corrupción que ha venido permeando al presidente Peña Nieto y a sus colaboradores más cercanos, pese a que existan periodistas (como el mismo Salvador García Soto, mencionado en la nota final de los autores) que hicieron hasta lo imposible por distraer a la sociedad sobre el verdadero fondo del asunto.
La casa blanca de Peña Nieto es un libro necesario para mantener vivo en la memoria un acontecimiento que fue parteaguas para la administración de un presidente (Peña Nieto) que, en campaña, juró que el PRI que él impulsaba era otro, un PRI nuevo y honesto, transparente y entregado al bienestar del lacerado pueblo mexicano.
