La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos presentó su indicador compuesto avanzado, que mide inflexiones en el ciclo económico. Los datos revelaron que hay señales de una desaceleración del ritmo de crecimiento económico en Estados Unidos. Analistas opinaron que el anuncio no es buena noticia para México, pues gran parte del comercio exterior lo realiza con ese país.
Ciudad de México, 12 de mayo (SinEmbargo).– El anuncio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) sobre una posible desaceleración del ritmo de crecimiento económico en Estados Unidos no son buenas noticias para México porque gran parte del comercio exterior se realiza con ese país, coincidieron analistas consultados por SinEmbargo.
“Esas no son buenas noticias para el país, siempre malas perspectivas para Estados Unidos son malas para México, yo creo que la OCDE está muy influida por el dato de la economía del primer trimestre”, explicó Jorge Gordillo Arias, director de Análisis Económico de CI Banco.
Para el economista principal de BBVA Bancomer, Javier Amador Díaz, el anuncio de la OCDE es relevante porque “implicaría un menor crecimiento para México”.
Ayer, la OCDE dijo que había señales de una desaceleración del ritmo de crecimiento económico en Estados Unidos, Reino Unido e Italia, sobre la base de sus indicadores compuestos avanzados.
En el caso de Estados Unidos y el Reino Unido, se trata de la continuación de un movimiento de desaceleración que ya se había constatado los meses precedentes, mientras que en el caso de Italia la OCDE considera que ahora también queda confirmada esa tendencia.
El indicador compuesto avanzado, que mide inflexiones en el ciclo económico, en el caso de Estados Unidos bajó este mes 8 centésimas a 98.8 puntos, de forma que lleva nueve meses seguidos por debajo del nivel 100 que marca la media de largo plazo.
Entre los países de la OCDE, los mayores incrementos mensuales del indicador se dieron en México (20 centésimas a 100.61 puntos) y en Chile (0.23 centésimas a 100.27 puntos).
Las exportaciones manufactureras desde México explican la mayor parte de la relación con la economía mundial y están altamente concentradas por destino, su comportamiento depende del desempeño general en Estados Unidos.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), las exportaciones totales mostraron una disminución anual de 7.5 por ciento, la cual fue resultado de reducciones de 5.4 por ciento en las exportaciones no petroleras y de 39.6 por ciento en las petroleras. Al interior de las exportaciones no petroleras, las dirigidas a Estados Unidos cayeron 4.2 por ciento a tasa anual, en tanto que las canalizadas al resto del mundo lo hicieron en 11.1 por ciento.
En marzo, el valor de las importaciones de mercancías sumó 31 mil 407 millones de dólares, monto que implicó una baja anual de 6.7 por ciento. Dicha cifra reflejó descensos anuales de 5.5 por ciento en las importaciones no petroleras y de 21.1 por ciento en las petroleras. Al considerar las importaciones por tipo de bien, se observaron retrocesos anuales de 7.3 por ciento en las de bienes de consumo, de 5.5 por ciento en las de bienes de uso intermedio y de 14.8 por ciento en las de bienes de capital.
Datos de la Secretaría de Economía (SE) indican que de los 24 mil 536 millones de dólares que obtuvo México por las exportaciones totales en el acumulado de enero de este año, 19 mil 762 millones de dólares fueron de Estados Unidos.
Para los especialistas, la industria mexicana seguirá débil la mayor parte del año con posibilidad de que afecte al mercado interno.
“La realidad es que la economía global vive mucha incertidumbre, no se notan los suficientes argumentos para pensar que se vaya a mejorar. La industria mexicana seguirá débil la mayor parte del año y a lo mejor termina afectando al mercado interno, posiblemente habrá una desaceleración en el crecimiento para la segunda mitad del año, por debajo de los 2.5 por ciento y no hacia los 3 como el dato del PIB del primer trimestre de México”, mencionó Jorge Gordillo.
Uno de los factores que están detrás del anuncio de la OCDE es que el consumidor de Estados Unidos dejó de comprar.
“Un mayor ahorro implica menor consumo y un menor consumo implica un menor crecimiento económico”, detalló Javier Amador Díaz.
Los especialistas coincidieron en que el Gobierno de México debe activar el mercado interno para amortiguar la posible desaceleración en la economía de Estados Unidos.
“Lo que se debería hacer México es activar el mercado interno, invertir en infraestructura, pero ahora con el choque petrolero han recortado planes de inversión pública”, opinó el ejecutivo de Bancomer.
Añadió que se podría aumentar el consumo a través de un ritmo de generación de empleo más alto y ganancias al salario mayor para que el mercado interno jugara un efecto de compensación frente al menor crecimiento previsible de la economía de Estados Unidos.
Un informe difundido ayer por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT) proyectó que el desempleo en América Latina y el Caribe aumentará este 2016 y se situará por encima del 7 por ciento debido al deterioro de la situación económica en la región.
Según el informe, el alza del desempleo el año pasado en América Latina y el Caribe estuvo acompañado de un deterioro de la calidad de los trabajos, con una expansión del empleo por cuenta propia en detrimento del asalariado.
En general, en los países de Centroamérica, México, República Dominicana y las naciones del Caribe la evolución del mercado laboral fue más favorable que en Suramérica, que se vio afectado por el impacto del contexto externo en su actividad económica y la inflación, precisó el documento.
En El Salvador, la tasa de desocupación de los hombres rurales es 3.6 puntos porcentuales mayor que la de las mujeres rurales, mientras que en Bolivia (Estado Plurinacional de), México y el Perú las tasas son prácticamente iguales.
EFECTOS EN EL TIPO DE CAMBIO
La semana pasada, el peso mexicano volvió a presionarse al grado de superar los 18.00 por dólar (ha subido por más de 1 peso en su cotización spot: 6por ciento), en línea con fuertes correcciones en los activos financieros globales con mayor riesgo.
La razón, dijeron los expertos, es que cambió el sentimiento a negativo sobre la fragilidad de la economía mundial, donde los riesgos de bajo crecimiento por varios años o incluso de crisis siguen presentes y sin resolverse.
“Esta incertidumbre, ha provocado que el sentimiento del inversionista cambie constantemente y de manera abrupta. El ahora sentimiento negativo en los mercados resta racionalidad en la reacción de la publicación de otras variables que en otros momentos fortalecerían a la moneda mexicana”, expuso el CI Banco en un análisis.
No sólo el peso registró una fuerte depreciación frente al dólar, también lo hicieron la mayoría de las monedas de países emergentes, ya que los inversionistas compran dólares en busca de un menor riesgo.
Los principales riesgos y preocupaciones para los inversionistas son:
– El comportamiento errático del precio del petróleo: el precio se mueve al alza por cambiantes señales en la demanda de combustible y baja en la producción de petróleo en Estados Unidos.
– La situación económica mundial: En general débiles reportes de indicadores económicos en Europa, China, Japón, EU, Brasil, y continuas bajas en las expectativas de éste y los próximos años.
– Los débiles reportes de los últimos días de abril y de la primera semana de mayo: ISM manufacturero en EU, PMIs en China e Inglaterra, PIB de EU, informe de empleo en EU.
– Incertidumbre por política monetaria de la FED de EU: El mercado actualmente espera con una probabilidad menor al 50 por ciento que la FED vuelva a subir tasas antes de febrero de 2017 (para la reunión de Junio la probabilidad es de 4 por ciento).
– Incertidumbre política por elecciones presidenciales en EU: La victoria de Trump como candidato único para el partido Republicano, así como la cantidad de seguidores que ha logrado hasta el momento genera nerviosismo en los mercados financieros.
–Revisión de calificación de deuda soberana en México: La complicada situación financiera en Petróleos Mexicanos (Pemex), que pudiera afectar a las finanzas públicas del país tienen en riesgo una posible baja en la calificación por parte de Moodys.
Por un lado, el Gobierno mexicano anunció recortes presupuestales e inyecciones de capital para Pemex buscando quitarle presión. Recompró deuda por casi 100 mil millones de pesos, recursos provenientes del remanente de operación del Banco de México (Banxico). Sin embargo, la agencia calificadora ha comentado que espera ver que lo anunciado beneficie a la empresa de forma sostenida.
“En México, la economía se mantiene estable con una dinámica moderada pero mejor que muchos países emergentes. Además, Banxico se dijo estar preparado a nuevos episodios de volatilidad financiera internacional, lo que se intuye que podría intervenir directamente vendiendo dólares a los bancos comerciales, si nota un ataque especulativo a la moneda mexicana”, destacó el CI Banco.