Moody’s considera que el riesgo derivado del incremento en la de tasa de interés "es manejable", pero los niveles de deuda podrían subir más de lo que estima si no se aplican controles estrictos de gasto en el corto plazo. Además, las participaciones federales, una fuente de ingresos para los estados, han disminuido y su fondo compensatorio está en riesgo de agotarse por la caída en los precios del petróleo.
Ciudad de México, 1 de marzo (SinEmbargo).– El aumento de 50 puntos base en la tasa de interés por parte del Banco de México (Banxico) es un factor crediticio negativo para los estados y municipios mexicanos, alertó Moody's, en particular para las entidades con un mayor costo promedio ponderado de su deuda: Quintana Roo y Chihuahua.
La mayor parte de la deuda subnacional paga intereses a una tasa variable y, por lo tanto, se prevé un aumento en el costo promedio ponderado de la deuda a 6 por ciento, afirma la calificadora. Pero los niveles de deuda podrían subir por encima de 8 por ciento, alerta, si no se aplican controles estrictos de gasto en el corto plazo.
Quintana Roo, Chihuahua, Guerrero, Nayarit y Nuevo León se espera que enfrenten un mayor impacto en sus respectivos servicios de deuda, expone.
En el primer caso, la entidad gobernada por el priista Roberto Borge Angulo tiene el pasivo per cápita más alto entre las 32 entidades del país, con 14 mil 441 pesos por cada uno de sus ciudadanos, de acuerdo con cifras de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP). Cuando Borge Angulo asumió el Gobierno de Quintana Roo, el 5 de abril de 2011, el estado reportaba una deuda pública de 9 mil 791 millones de pesos. Hoy, casi cinco años después, ese pasivo se ha convertido en el más alto del país, medido por el número de personas.
En tanto, como en su tiempo lo fue la deuda de Humberto Moreira Valdés, ahora la de César Duarte Jáquez, Gobernador de Chihuahua, se ha convertido en emblemática debido a su crecimiento exponencial.
El 4 de octubre de 2010, Duarte recibió la entidad con una deuda de 12 mil 547 millones de pesos, para 2011 había crecido a 17 mil 316.6 millones, para el año siguiente cerró en 23 mil 284 millones de pesos, en 2013 dio el salto a 41 mil 768.2 millones de pesos, nivel en el que se mantuvo hasta el primer trimestre de 2015, con 41 mil 926 millones de pesos, de acuerdo con cifras de Hacienda.
Coahuila, la Ciudad de México, Oaxaca, Veracruz, Chiapas, Tamaulipas, Jalisco y Michoacán también están por arriba del promedio.
La deuda de Coahuila, de acuerdo con el "Saldo histórico de obligaciones financieras de entidades, municipios y sus organismos" de la SHCP, hasta el tercer trimestre de 2015, fue de 37 mil 242 millones pesos, mientras que la per cápita asciende a 12 mil 986 pesos.
No obstante, en opinión de Moody’s el riesgo derivado del incremento en la de tasa de interés "es manejable para el sector en su conjunto".
Durante el periodo 2010 a 2014 los estados mexicanos registraron déficits financieros cuya mediana fue de -2 por ciento de los ingresos totales y se estima se ubiquen en -2.4 por ciento en 2015, pero podría superarlo si no se aplican controles estrictos de gasto en el corto plazo. Los niveles de deuda aumentarían por encima de 8 por ciento, alerta.
En caso de que prevalezcan las condiciones actuales, se esperaría un aumento en las presiones sobre las finanzas estatales y en menor medida en las finanzas municipales, ya que su dependencia por participaciones federales es inferior a la de los estados.
En febrero el banco central elevó la tasa de interés a 3.75 por ciento, como parte de una serie de medidas para tratar de detener la depreciación del peso.
El banco Merrill Lynch alertó que ese sorpresivo incremento puede confundir al mercado y limitar el crecimiento económico.
“Banxico no sería capaz de continuar con los aumentos para defender la moneda sin enviar a la economía a una recesión, así que hay un límite natural para esa estrategia”, expuso en un informe.
PARTICIPACIONES FEDERALES
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) informó que las participaciones federales –que representan un 40 por ciento de los ingresos totales de los estados– disminuyeron 3.9 por ciento a enero de este año.
Baja California Sur, Guerrero, Michoacán, San Luis Potosí y Morelos fueron los estados que presentaron mayores disminuciones en sus participaciones federales al mes de enero de 2016.
Uno de los fondos que integran las participaciones federales, agrega la calificadora, es el Fondo General de Participaciones (FGP), que representa el 80 por ciento de las transferencias tanto para los estados como para los municipios.
Los subsoberanos mexicanos cuentan con el Fondo de Estabilización de los Ingresos de las Entidades Federativas (FEIEF), que es un fondo contingente para compensar disminuciones en las participaciones federales, sin embargo podría agotarse por la caída del petróleo.
De acuerdo con proyecciones de Moody’s, los precios del petróleo se mantendrán bajos, promediando 33 dólares por barril para 2016 y 37 dólares para 2017 tanto para la mezcla Brent como para el de Texas.