El voto juvenil es decisivo en una elección considerando que el 30 por ciento de la Lista Nominal pertenece a este sector. Sin embargo, el registro de los últimos procesos electorales demuestra que hay baja participación de los jóvenes.
Para algunos especialistas, esto no es así y la generación actual posee más armas para informarse, por lo que los hace más críticos, participativos e interesados en la vida política del país, lo que puede demostrarse en esta elección.
Sin embargo, los expertos consideran que la agenda política de los partidos no los toma mucho en cuenta o busca estrategias inmediatas porque sigue pensando que para ellos todo es "fiesta y rock and roll". No se han dado cuenta, añaden, del potencial que hay en este sector.
La elección de este 7 junio, en la que participarán más de 20 millones de jóvenes, éstos tendrán la oportunidad de demostrar el valor real del voto juvenil.
Ciudad de México, 6 de junio (SinEmbargo).– Este 7 de junio 24 millones 875 mil 289 jóvenes, de entre 18 y 29 años, tendrán la oportunidad de acudir a las urnas a emitir su voto para elegir a diputados federales, locales, presidentes municipales y hasta gobernadores. Representan el 29.7 por ciento de la población inscrita en la Lista Nominal, que comprende 83 millones 563 mil ciudadanos. No es un cifra menor, ya que su voto puede marcar una elección.
El peso del sector juvenil es relevante, aunque históricamente se habla de que su participación en los procesos electorales es baja, por apatía, desconfianza o simplemente por desinformación.
Sin embargo, en esta elección podría ser diferente. Esta generación de jóvenes es más activa, se informa más y se interesa por la situación del país, coinciden expertos en la materia.
Ernesto Cuna Pérez, académico de la Universidad Autónoma de México (UAM) Campus Xochimilco, explica que el supuesto de que la población juvenil es la que menos se expresa en las urnas es erróneo si se observan los datos a detalle, puesto aunque sí es un volumen poblacional alto y sus preocupaciones son más visibles, por tanto se esperaba más de ellos, pero en los últimos procesos se ha visto que las personas de 50 años o más son los que están más desencantandos ahora porque empiezan a notar que el discurso de la alternancia y cambio no ha dado los resultados esperados.
"[Los jóvenes] Sí miran, y esto es una señal de que sí miran el voto y su condición ciudadana es indicante para expresar algo, quizá no para expresar la necesidad de cambio, pero sí expresan algo con respecto a algo...", dice.
Y desde sus distintas trincheras, algunos jóvenes intentan demostrarlo a toda costa ya sea participando activamente, como miembros de organizaciones e incluso como líderes de grandes proyectos.
Claudia Regil Velasco es directora del Instituto de Pensamiento Estratégico Ágora (IPEA) y forma parte de 1 Millón de Jóvenes por México, una red de chavos que nació hace tres años con la intención de tener una interlocución eficaz con el Gobierno federal, para ser escuchados y presentar las propuestas de su agenda enfocada en la libertad, equidad, integridad, legalidad y corresponsabilidad. Son jóvenes universitarios, jóvenes que ya se graduaron, jóvenes que no estudian ni trabajan y que se les da la oportunidad de hacer que su voz sea escuchada y desde su movimiento afirman que deben dar el gran paso de protesta a la propuesta.
"No nos podemos quejar si estamos desde este lado nada más criticando y si no nos activamos, entonces ese grupo de jóvenes quiere hacer algo distinto por el país sin estar en un partido político, son los jóvenes que se han ido sumando a IPEA y a la red de 1 millón de Jóvenes por México", menciona.
Ella está segura que hay un grupo de jóvenes que sí está muy activo, que sí está preocupado por lo está sucediendo en el país, aunque reconoce que a veces es difícil porque muchas veces cuando se busca la interlocución con las personas en el gobierno muchos de ellos no son receptivos. Ahí es cuando algunos jóvenes se desaniman, considera.
Como ella, muchos jóvenes de la generación 2015 afirman que sí les importa la política y que están más informados.
LOS JÓVENES Y SUS PREOCUPACIONES
Datos de la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública, en su edición 2013, señalaron que los temas que más preocupan a la población joven son la inseguridad y el desempleo. El 56.6 por ciento se inclina por la primera y 49.2 por ciento por la segunda.
En cuanto al tema del desempleo y la dificultad para acceder al mercado laboral, hace unos días se publicó la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo la cual reveló que el 40 por ciento de los jóvenes entre 15 y 29 años se encuentran fuera del mercado laboral.
Para Claudia Regil Velasco, directora del IPEA, esto es una realidad. Por eso desde los 21 años ha participado en proyectos que impulsen el trabajo para los jóvenes y promueve la participación. Desde que empezó a gestarse la Reforma Fiscal 2014 presentó a legisladores sus propuestas respecto a esta norma y ahora viendo los efectos que tuvo están promoviendo un movimiento en redes sociales llamado #NoMásImpuestos para comprometer a los próximos diputados a no subir las cargas tributarias o hacer nuevas.
El especialista Cuna Pérez afirma que el voto joven puede cambiar una elección. Sin embargo, considera, cuando se observan las propuestas para el mundo juvenil son medidas inmediatas que aún asumen que el mundo joven solamente es diversión, rock and roll y fiesta, pero no consideran que ellos tienen más dificultades –por ejemplo de salubridad, violencia y seguridad– y tienen trayectorias fracasadas hacia el mundo laboral, que componen una serie de necesidades en función de su problemática que no son atendidas por los partidos políticos.
"Los jóvenes socialmente hablando importan demasiado, políticamente hablando también son muy importantes; sin embargo esta expresión númerica no se expresa en la agenda de los partidos. En este último proceso, solamente revisando las agendas de los partidos hay expresiones muy mínimas con respecto al mundo juvenil. Es decir, no se dedicaron a atender a este sector de la población. Por tanto, ¿cómo es que se les obliga a votar si ni siquiera se acercan a ello?", expresa.
JÓVENES INFORMADOS
El analista político Everardo Díaz explica que la gente joven se informa en Internet y en medios digitales por lo que tiene niveles de sofisticación política o conocimiento práctico mucho más elevado, lo que puede hacer una diferencia en la elección, aunque no sea en esta ni en la de 2018, sino en un largo plazo.
La población juvenil, dice, está más informada y está haciendo una división muy marcada en los estilos de información política entre los mayores y menores de 35 años.
"Los jóvenes en la ciudad son más participativos, se mueven en contextos sociales, leen, cuestionan la información que reciben y sobre todo no se quedan nada más en los spots [...] es un sector más critico, más informado del electorado", considera.
Cuna Pérez coincide: "Sí es [una generación] mucho más informada y mucho más participativa que generaciones anteriores. Tienen nuevos modelos de participación y está más informada en sus procesos de secularización; es decir es más urbanizada y más educada".
Por su parte, Adriana Escamilla Cervantes, de 24 años, quien es parte del equipo de jóvenes que trabaja en la plataforma informática votoinformado.mx de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), considera que sí hay una parte de la población juvenil que no está muy interesada en la vida política del país, por eso hace una llamado a que los jóvenes se informen y sepan que hay otros coetáneos que no sienten esa apatía y participan en proyectos como estos para "hacer cambios pequeños o grandes".
Los jóvenes, dice, están más informados y ellos son los que están haciendo una división muy marcada en los estilos de información política entre los mayores y menores de 35 años.
"Los jóvenes en la ciudad son más participativos, se mueven en contextos sociales, leen, cuestionan la información que reciben y sobre todo no se quedan nada más en los spots [...] es un sector más critico, más informado del electorado", considera.
ABSTENCIONISMO PARTICIPATIVO
En la más reciente elección intermedia, la de 2009, el extinto Instituto Federal Electoral (IFE) registró bajas tasas de participación en los jóvenes. El caso del grupo poblacional de 20 a 29 años se destacó por ser el sector con mayor abstención, sólo superado por el bloque de personas mayores de 80 años.
Las tasas de abstención más altas de los ciudadanos entre 18 y 29 años se registraron en los estados de Baja California, Chihuahua, Baja California Sur, Guerrero y Michoacán, en las últimas cuatro entidades el porcentaje de participación fue inferior al 30 por ciento de la lista nominal de los ciudadanos jóvenes.
Sin embargo, el grupo de los nuevos electores (personas de entre 18 y 19 años que fueron a las urnas por primera vez) mostraron una votación similar al promedio general, que fue de 44.06 por ciento.
Para Everardo Díaz, a pesar de que somos un país joven, las personas jóvenes tienen a votar en menor medida que las personas y aunado a eso hay gente que está informada y por eso decide no participar. "No le ayudas en nada al proceso democrático absteniéndote de votar. Si no votas por uno, no tienen consecuencia tu protesta", menciona.
Escamilla Cervantes considera que hay jóvenes que tienen un profundo desencanto y por eso tampoco van a votar, pero por eso "es justo que conozcan información antes de hacer una opinión errónea o tener información incompleta antes de decidir si van a votar o no".
Por su parte, el académico de la UAM explica como el mundo juvenil está más urbanizado, más educado y más informado incluso, con mayores redes de comunicación que los adultos, resulta que no votan, "pero no votan participando; es decir que han elegido el no voto no solamente por abstención o por apatía, sino por alejamiento del modelo de transformación política. Es lo que yo llamo un voto participativo, es una participación o un abstencionismo participativo".