Ciudad de México, 25 de mayo (SinEmbargo).– El subcomandante Marcos, uno de los líderes del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), anunció su retiro después de 20 años de ser una de las figuras más visibles al frente del movimiento revolucionario indígena.
"Siendo las 02:08 del 25 de mayo del 2014 en el frente de combate suroriental del EZLN, declaro que deja de existir el conocido como Subcomandante Insurgente Marcos [...] Por mi voz ya no hablará la voz del Ejército Zapatista de Liberación Nacional", dice un comunicado del propio Marcos.
En sus "últimas palabras en público antes de dejar de existir", Marcos habla de un relevo múltiple y complejo en el EZLN, el cual es generacional, de clase, de raza y de pensamiento.
"En estos 20 años ha habido un relevo múltiple y complejo en el EZLN. Algunos han advertido sólo el evidente: el generacional. Pero algunos estudiosos no se han percatado de otros relevos: El de clase: del origen clase mediero ilustrado, al indígena campesino. El de raza: de la dirección mestiza a la dirección netamente indígena. Y el más importante: el relevo de pensamiento", dice Marcos a horas de que reapareciera en público después de 5 años.
En el texto, explica que él fue sólo "una botarga, un holograma" que permitió que las personas voltearan a ver lo que sucedía en Chiapas.
"En la madrugada del día primero del primer mes del año de 1994, un ejército de gigantes, es decir, de indígenas rebeldes, bajó a las ciudades para con su paso sacudir el mundo. Apenas unos días después, con la sangre de nuestros caídos aún fresca en las calles citadinas, nos dimos cuenta de que los de afuera no nos veían [...] Su mirada se había detenido en el único mestizo que vieron con pasamontañas, es decir, que no miraron [...] Empezó entonces la construcción del personaje llamado 'Marcos', dice el texto.
Y agrega: "Podrán decir luego que lo del personaje fue ocioso. Pero una revisión honesta de esos días dirá de cuántas y cuántos voltearon a mirarnos, con agrado o desagrado, por los desfiguros de una botarga".
En este contexto, el guerrillero precisa que "el relevo de mando no se da por enfermedad o muerte, ni por desplazamiento interno, purga o depuración. Se da lógicamente de acuerdo a los cambios internos que ha tenido y tiene el EZLN".
Marcos insiste que su decisión de "dejar de existir" no implica que esté enfermo como antes había afirmado la prensa nacional. "Ni estoy ni he estado enfermo, ni estoy ni he estado muerto [...] Si alentamos esos rumores fue porque así convenía. El último gran truco del holograma fue simular enfermedad terminal, e incluso todas las muertes que ha padecido", dice en el texto.
"Por cierto, lo de 'si su salud lo permite', que el Subcomandante Insurgente Moisés usó en el comunicado anunciando la compartición con el CNI, era un equivalente a 'si el pueblo lo pide' o 'si las encuestas me favorecen' o 'si dios me da licencia' u otros lugares comunes que han sido la muletilla en la clase política en los últimos tiempos", comenta.
Y agrega: "Si me permiten un consejo: deberían cultivar un poco el sentido del humor, no sólo por salud mental y física, también porque sin sentido del humor no van a entender al zapatismo. Y el que no entiende, juzga; y el que juzga, condena".
Con respecto a la muerte del “sargento Galeano”, fallecido tras una ataque el pasado 2 de mayo, Marcos dijo que "al asesinar a Galeano, o a cualquiera de los zapatistas, los de arriba querían asesinar al EZLN".
"Los de arriba, desean el páramo de las industrias mineras, petroleras, turísticas, la muerte de la tierra y de quienes la habitan y trabajan", denunció.
El subcomandante indicó que la dirigencia del EZLN entendió que a causa de la muerte del sargento Galeano "es necesario que uno de nosotros muera [...] para que él viva y la muerte se lleve no una vida, sino un nombre solamente, unas letras vaciadas de todo sentido, sin historia propia, sin vida. Así que hemos decidido que Marcos deje de existir hoy".
"Salud y hasta nunca… o hasta siempre, quien entendió sabrá que eso ya no importa, que nunca ha importado", finaliza el texto firmado desde La Realidad, Chiapas.