El lugar ideal para guardar una obra de arte son los museos, sin embargo hay algunos famosos con gustos tan refinados que prefieren conservarlas en sus casas. Hoy en el Día del Museo, presentamos a cuatro famosos coleccionistas.
Blindaje surrealista
Brad Pitt
El actor estadunidense, Brad Pitt, se convirtió en un verdadero coleccionista de arte al grado de instalar en todas sus casas sistemas de seguridad que no le quitan nada a los de cualquier museo para proteger su preciada colección valorada en más de 25 millones de dólares.
“Habría que estar loco para intentar robar un cuadro en esas casas”, dijo un experto en seguridad cercano a la pareja. Sin embargo –según diversas publicaciones– los críticos de arte señalan los gustos de Pitt como “sobrios y surrealistas” lo que hace que no te den ganas de entrar a robar.
En los búnkers de Pitt se encuentra una pintura de Neo Rauch que le costó aproximadamente un millón de dólares. Además obras del artista de grafiti Bansky, debido a que a su esposa Angelina Jolie es afín a sus creaciones.
Asimismo, al actor le gusta pasearse por exposiciones, museos y ferias de arte para degustar de las grandes creaciones. Incluso recientemente, Pitt fue multado por estacionarse mal afuera de la galería de arte Fahey/Klein en Los Angeles, California.
……………………………………………………………………………………………………..
Un obsesivo de la pintura
Jack Nicholson
Cualquiera que pise la casa de Jack Nicholson se quedaría abrumado con lo que cuelga en sus paredes: Picasso, Matisse, Tamara de Lempicka, Modigliani, Chagall, Botero y Warhol entre otros. El actor es aficionado a la pintura y quizás para comprobar su estatus en el mundo del arte, compró un ejemplar de la revista Art & Antique (que luego desechó).
“Hay a quien le asustan todos estos cuadros pero ahora soy una persona mucho más casera que disfruta de sus cosas”, confesó el actor criticado por quien fuera su cuñada, Alegra Huston, por coleccionar arte “como una obsesión”.
Incluso en 2008 cuando se presentó la primera gran retrospectiva de art decó de la polaca Lempicka en México, Nicholson fue de las estrellas de Hollywood que vinieron al país a presenciar sus obras. Él –al igual que otros famosos– poseen colecciones con sus creaciones.
Hace algunos años, Nicholson se vio involucrado en un caso de fraude precisamente por su pasión al arte. De acuerdo con autoridades de Estados Unidos, Jack invirtió en un fondo de inversión de un personaje que hacía subastas con las posesiones de sus clientes, entre ellos el actor.
……………………………………………………………………………………………………..
Sin límites
Román Abramóvich
El hombre de negocios ruso y dueño del Chelsea, Román Abramóvich, lidera el ranking de los 10 coleccionistas más activos del mundo. Desde el 2008 compra valiosas obras de los pintores más caros del mundo y ayuda a su pareja Daria Zhukova a mantener en Moscú el Centro de Arte Contemporáneo Garazh.
Más conocido por sus inversiones en el mercado del futbol británico, Abramóvich se inició como coleccionista de arte gracias a la influencia de su novia, Daria Zhukova, hija de un magnate del petróleo ruso y propietaria de una galería de arte en Moscú, la GCCC, además de ser miembro del Consejo de Administración del Los Angeles County Museum of Art.
Diversas publicaciones han publicado que Abramovich llegó a pagar más de 33 millones de dólares en una puja de la casa Christie’s por el cuadro “Benefits Supervisor Sleeping”, obra de Freud. Poco después, el multimillonario ruso desembolsó más de 86 millones de dólares (55 millones de euros) por otra obra: “Triptych, 1976”, en esta ocasión de Francis Bacon.
La actual novia del magnate tuvo que pedir disculpas recientemente por la polémica que se creó en torno a una fotografía que Dasha Zhukova publicó en la que aparecía sentada sobre una silla “artística” que simulaba ser una mujer afroamericana semidesnuda.
……………………………………………………………………………………………………..
En nombre del arte
Leonardo DiCaprio
La afición del actor estadunidense Leonardo DiCaprio por el arte nació desde la cuna. Incluso sus padres le pusieron el nombre del pintor italiano del Renacimiento, Leonardo Da Vinci, después de que visitaron la galería Uffizi en Florencia.
Su colección actual se centra especialmente en el constructivismo ruso y el expresionismo alemán, área donde no solo le interesa la pintura sino el arte popular como pósters originales de El acorazado Potemkin o El gabinete del doctor Caligari.
El año pasado, Leo se encaprichó en la última subasta de la casa Phillips al punto de pagar 401 mil dólares por un cuadro del artista colombiano Oscar Murillo que estaba valorada entre 30 y 40 mil dólares. La firma describió la obra como “pulverización de pintura, el esmalte, la suciedad y técnica mixta sobre lienzo”.
Pero no fue el primer acercamiento que el actor tuvo con las pujas, un año antes organizó una en la casa Christie's en la recaudó 38 millones de dólares para la conversación del medioambiente. Vendió parte de su colección entre ellos obras de Walton Ford, Schnabel, Banksy o Elizabeth Peyton.