La Reforma Energética de Peña Nieto podría convertir a México, Estados Unidos y Canadá como un “nuevo eje internacional”, según algunos analistas, que ahora llaman a la zona “Saudi América”. Sin embargo, la opacidad y la corrupción ponen en duda el proyecto de Peña Nieto, coinciden los más. Si México no logra combatir irregularidades como el otorgamiento de contratos a determinados grupos, no sólo pone en peligro el éxito de la nueva legislación sino también un negocio de 1.5 trillones de dólares. Ayer, el afamado director mexicano Alfonso Cuarón preguntó al Presidente cuándo llegarán los beneficios que prometió a los ciudadanos, pero además tocó el mismo tema que llena de dudas a los observadores: ¿qué garantías hay para que el negocio energético no se vuelva en el botín del siglo para algunos cuantos?
Ciudad de México, 29 de abril (SinEmbargo).- La corrupción en la industria petrolera es uno de los puntos que deben quedar los suficientemente claros para que la Reforma Energética pueda cumplir con su objetivo de generación de empleos y crecimiento económico, de lo contrario, el país se quedará en el mismo lugar en el que se encuentra en este momento, advirtieron analistas, académicos y representantes de Petróleos Mexicanos (Pemex).
La corrupción, no sólo en Pemex sino en todo el sector energético, pone en riesgo un negocio que para el gobierno de México puede representar 1.5 trillones de dólares durante los próximo 15 años, de acuerdo con firmas de análisis económico.
Aunque a juicio de los entrevistados la corrupción dentro de Pemex tiene décadas, fue apenas hasta 2011 cuando empezaron a ventilarse este tipo de casos que involucran a altos funcionarios, empleados, sindicato y empresas contratistas. Tan sólo en el últimos dos meses se dieron a conocer dos casos en los que existieron corrupción y sobornos: Oceanografía y el que involucra a la estadounidense Hewlett Packard.
Ya en diciembre pasado, Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, el líder moral de la izquierda en México e hijo del ex Presidente Lázaro Cárdenas del Río quien durante su gestión nacionalizó el petróleo, advertía que los nuevos lineamientos en el sector beneficiarían a unos cuantos.
“Se está hablando de asociados privados con el Estado, con este Estado entreguista y lleno de corrupción. Vamos a ver otra camada de funcionarios y de sus socios privados de afuera que se van a enriquecer indebidamente. Grandes negocios que el Estado quiere entregar a sus favoritos, a los que después les van a dar su mochada”, dijo Cárdenas el 10 de diciembre de 2013 durante una caminata en defensa del petróleo.
“La corrupción no es cuestión de reformar leyes, que aparezca que Pemex no se puede robar o que la CFE [Comisión Federal de Electricidad] no se puede robar, o que no se pueden ordeñar a los ductos. Lo que sucede es que el gobierno no quiere combatir la corrupción, lo que se quiere es que haya funcionarios y gente de afuera que se beneficien, por eso quiere disponer de toda la industria petrolera”, añadió.
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En dos meses han salido a la luz pública dos casos de corrupción que involucran a la paraestatal por el otorgamiento irregular de contratos, ambos ventilados desde Estados Unidos.
El primero es el de la empresa Oceanografía, vinculada a los hijos de la ex primera dama Martha Sahagún de Fox. Citigroup Inc informó el 28 de febrero que descubrió un fraude en contra de su filial mexicana Banamex relacionado con la firma de servicios petroleros Oceanografía, por lo que recortó su ganancia neta de 2013 en 235 millones de dólares (mdd).
Inmediatamente, la Procuraduría General de la República (PGR) ordenó la intervención de la compañía y las investigaciones correspondientes, lo que puso en duda la forma en la que se habían otorgado a la firma contratos de Pemex durante los sexenios panistas.
El 10 de abril, la fabricante de equipo de cómputo Hewlett-Packard (HP) llegó a un acuerdo con el Departamento de Justicia de Estados Unidos para pagar una multa de 108 millones de dólares, luego de que la Comisión del Mercado de Valores (SEC, por su sigla en inglés) descubrió casos de sobornos para conseguir contratos con Pemex en México.
Según un comunicado de la agencia estadounidense, HP en México pagó más de un millón de dólares en comisiones para obtener un contrato de un paquete de software con Pemex, lo que le generó ganancias ilícitas por 2.5 millones de dólares.
Sin embargo, desde el año pasado, funcionarios del sector energético compartieron con legisladores información del gobierno federal que sostiene que en Petróleos Mexicanos opera una red de corrupción que involucra a empresas, contratistas, empleados y funcionarios de diversos niveles, lo que se temía que pudiera frenar la Reforma Energética.
Gracias a casos como los de Oceanografía y HP ahora se sabe con más datos que en Pemex hubo contratos sin licitación, concursos diseñados para beneficiar a familiares y amigos de políticos, sobrepagos de servicios, entre otras irregularidades.
“La corrupción en Pemex es un problema terrible hay muchos intereses creados”, aseguró Miriam Grunstein Dickter, investigadora del área de Estudios Jurídicos del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE).
Otros casos que han salido a luz son el de Mexicana de Lubricantes (MexLub) y los ventajosos contratos que obtiene de Pemex; Siemens, que involucra al consorcio Conproca, relacionada con un caso de sobrepagos en torno a la refinería de Cadereyta, así como el uso de recursos de la petrolera para gastos personales y familiares de directivos y su líder sindical, Carlos Romero Deschamps.
LA TRANSPARENCIA Y LA REFORMA ENERGÉTICA
Fluvio César Ruiz Alarcón, consejero profesional de Pemex, aseguró que la paraestatal es una de las petroleras más transparentes a nivel mundial, gracias a que tiene un portal sobre el tema en el que hace públicas sus finanzas y que pertenece a la Iniciativa para la Transparencia de las Empresas Extractivas, sin embargo, la corrupción al interior, es otro tema.
“Lo que se me haría inverosímil es que a Pemex se le exigiera un nivel de transparencia distinto al de las empresas privadas… Pemex podría estar en desventaja, no puede haber asimetría regulatoria, la regulación de los operadores puede ser la misma, todo mundo está ocupado en hacer transparente a Pemex, pero también tenemos que hacer que los demás también lo sean”.
Advierte también que a la paraestatal no se le puede obligar a que informe lo que otros no informarían, pues a diferencia de la mayoría de las compañías que serán contratistas al tratarse de una empresa del estado, maneja información que puede considerarse como estratégica para la nación.
En cuanto a la corrupción al interior de la paraestatal aseguró que desde 2008 existe un esfuerzo permanente por sanear la petrolera mexicana y uno de los primeros esfuerzos fue el transformar los mecanismos de supervisión para controlar el acceso a los procesos, “el pillo lo primero que hace es aprenderse los procedimientos, es como el judicial que te quiere golpear sin dejar huella”.
Admitió que el proceso de maduración de la Reforma Energética será largo y los beneficios se verán en el largo plazo, pues se estima que la implementación del nuevo marco legal y la normas secundarias puede tardar entre dos y tres años y en este periodo, precisamente, en el que será pertinente aplicar controles anticorrupción más estricto, por lo que señaló que no es extraño que en los próximos meses “sepamos de más casos de corrupción”.
Poner un alto a la corrupción antes de aterrizar la Reforma Energética, no sólo en la paraestatal sino en general en el sector energético, permitirá que en el país se pueda detonar un negocio de “1.5 trillones de dólares en los próximos 15 años, lo que pone a México en otro contexto; este dinero podría provenir una tercera parte de inversiones en petróleo, otra tercera por las perforaciones para la extracción de gas y gasoductos y una tercera de la generación eléctrica”, estimó Juan Sebastián Musi, director general de Somoza Musi & Asociados, firma mexicana de análisis económico y financiero.
“Van a salir nuevos casos de corrupción a la luz, se está tratando de hacer una limpia, pero creo que no se va a poder erradicar, incluso con la nueva administración también habrá empresas que lleguen a hacer contratos con Pemex y que no serán de lo más transparentes”, anticipó Mussi.
Estas prácticas, consideró, no se van a erradicar de una día para otro y pueden ser a causa de que la implementación de la Reforma Energética sea más tardada “porque hay mucha corrupción, ineficiencias en tecnología… hay que empezar por hacer una revisión exhaustiva a todo el personal que hay en la nómina si se justifica o no”.
Miriam Grunstein, por su parte, consideró que la corrupción no es exclusiva de Pemex sino del sector petrolero a nivel mundial al tratarse de una industria que involucra cantidades millonarias de dinero y un sin fin de intereses, que lo mismo involucra a países con alta opacidad como Nigeria e India, que a otros del llamado primer mundo como Noruega, cuya empresa petrolera, Statoil, es uno de los ejemplos sobre eficiencia en el sector.
“No hay que olvidar que los padres fundadores de la cloaca que estamos son los que nos están gobernando. Hay demasiado dinero, la industria petrolera y la eléctrica son corruptas y también tienen demasiado poder y eso es aquí y en el Mar del Norte, en Brasil y en todos lados. Es una industria profundamente corrupta”, aseguró.
En el caso de México, consideró que para un correcto aterrizaje de la Reforma Energética deben definirse las normas secundarias, pero también debe combinarse con una constante vigilancia ciudadana y en este sentido resaltó el papel que tendrá la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH), que entre sus funciones tendrá la vigilancia de todos los involucrados sean estatales o privados.
Señaló que la labor de la CNH será sumamente importante ya que el país viene de un proceso de más de 70 años de “autoritarismo financiado con ingresos petroleros y una serie de obras improductivas tras el descubrimiento de Cantarell”.
Expresó que si en este momento no se hubiera aprobado una Reforma Energética el escenario que tendría el país sería de “corrupción sin petróleo y con la Reforma, lo más probable es que tengamos corrupción con petróleo y lo pero sería lo primero”.
¿SAUDI AMÉRICA?
La semana pasada el diario estadounidense The New York Times publicó un amplio reportaje en el que vaticinaba que con la Reforma Energética en México se estaba gestando un nuevo eje mundial en la materia integrado por Estados Unidos, Canadá y el mismo México.
Expertos entrevistados por el diario prevén que Estados Unidos se convierta en el principal productor de petróleo del mundo, lo que lo convertirá en un país autosuficiente en la materia.
La Reforma Energética mexicana, una vez que sean aprobadas sus legislaciones secundarias, ayudará a construir proyectos tripartitas que ayudarán al país a recuperar sus niveles de exportación de crudo que en 2006 alcanzaban los 1.7 millones de barriles diarios para llegar a apenas un millón en los últimos meses.
“El problema de México es su ‘enferma’ compañía petrolera nacional, Petróleos Mexicanos, conocida como Pemex, que tiene el monopolio en producción y venta de gasolina desde los años 30 y que es más conocida por sus casos de corrupción que por su expertise. Durante años ha sido también forzada a entregar sus ganancias al gobierno en lugar de destinarlas a la investigación y explotación de nuevos campos”, señaló el rotativo en un reportaje llamado “¿El Milagro de Saudi América?”
Citi Research estima que este año México podría tener reservas de petróleo cercanas a los 29 mil millones de barriles, así como reservas de gas en el Golfo y, adicionalmente, 13 mil millones de barriles en reservas de gas shale.
Expertos anticipan que la producción de petróleo podría incrementarse 25 por ciento para el año 2024 para llegar a cerca de 4 millones de barriles diarios, lo que convertiría al país en el quinto o sexto productor de crudo a nivel mundial.
En este escenario, “Estados Unidos puede ser el gran beneficiario de la bonanza mexicana”, advierte el diario.
Recientemente, en una conferencia, Ryan Lance, jefe ejecutivo de ConocoPhillips aseguró que “las noticias positivas en México, ayudarán al abasto en Norteamérica”.
“Se necesita transparencia, dijo por su parte al rotativo Jorge R. Piñón ex presidente de Amoco Latinoamérica.
