Eruviel Ávila Villegas nació un 1 de mayo, en San Pedro Xalostoc, Ecatepec, Estado de México. Desde que era niño soñó con convertirse en Presidente Municipal. A los 10 años, ayudaba a su padre, chofer de la ruta San Pedro-Santa Clara, a cobrar pasajes. Estudió la licenciatura en Derecho en la Universidad Tecnológica de México y comenzó su carrera política a los 25 años, cuando trabajó como secretario del Ayuntamiento, durante la administración de Alfredo Torres Rodríguez. En la secundaria conoció a Grimalda Muñoz, con quien se casó a los 18 años después de un año y medio de novios. Juntos procrearon cuatro hijos: Isis, Eruviel, Raúl y Montserrat.
Ávila ha participado en cinco procesos electorales y en todos ha resultado vencedor. En 1997, tras obtener 20 mil 496 votos, fue electo diputado local por primera vez. Ocupó la Presidencia de la Comisión de Procuración de Justicia y permaneció tres años en ese cargo. Al terminar su periodo como legislador, Ávila se integró a la administración de Arturo Montiel Rojas como subsecretario regional de Gobierno en la zona Oriente.
Participó como candidato de la Alianza para Todos en Ecatepec (PRI-PVEM) en 2003 y le arrebató al PAN la presidencia de su municipio natal. En aquel entonces, Ávila declaró al diario Reforma poseer 815 mil pesos en capital total. La lista de bienes incluía dos casas en Ciudad Azteca, una con valor de 170 mil pesos y otra de 220 mil pesos; 103 mil pesos en muebles y utensilios; una camioneta Windstar, modelo 2001, de 240 mil pesos; un auto Escort 1998, de 82 mil pesos, y un auto y joyas propiedad de su esposa que equivalían a 33 mil 750 pesos. Como parte de su campaña entregó 1.2 millones de papeles con su propaganda para envolver el mismo número de kilos de tortillas.
El escándalo llegó cuando, gracias a un operativo, cayeron ocho hombres y dos niños que supuestamente cambiaban bultos de cemento por votos. Inmediatamente, el obispo Onésimo Cepeda “absolvió” al PRI de todo pecado. Ecatepec, el municipio más poblado del Estado de México, siempre ha representado un jugoso botín y la oposición no planeaba cruzarse de brazos. El PAN anunció que impugnaría la elección e hizo públicas 62 fotografías que mostraban supuestas irregularidades cometidas por la alianza encabezada por Eruviel Ávila. Los ex candidatos del PRD y del PAN anunciaron que formarían un frente ciudadano para vigilar las promesas de campaña del priísta.
La cercanía entre Ávila y Montiel nunca fue un secreto. En 2005, el alcalde de Ecatepec fue el primero en destapar al entonces gobernador del Edomex rumbo a la Presidencia. Durante la inauguración de un hospital del Issemym, dijo: “Si eso está haciendo (un hospital) el Gobernador, qué no hará cuando esté en la silla grande”. Además, Eruviel Ávila volvió a trabajar cerca de Arturo Montiel durante la precampaña presidencial del ex gobernador del Estado de México, en la que participó como Tesorero de la Federación Nacional de Municipios de México.
Ávila no culminó su primer periodo como edil, ya que renunció al cargo para buscar repetir en el cargo de diputado local. Con 29 mil 683 votos a favor, se convirtió en miembro de la Legislatura LVI. El priísta fungió como coordinador del grupo parlamentario de su partido y fue Presidente de la Junta de Coordinación Política. Tres años después, en 2009, participó en su cuarta elección. Esta vez, con el 44.37% de los votos, arrancó la Alcaldía de Ecatepec al PRD y repitió como presidente municipal.
Luis Sánchez Jiménez, líder estatal del PRD en 2009, acusó al obispo de Ecatepec de apoyar la candidatura de Eruviel durante sus homilías. “Quién puede dudar de la militancia o simpatía política o partidista de este señor (Onésimo Cepeda), quien está llamando a votar por Eruviel desde hace tiempo y lo hace abiertamente”, dijo el perredista. El empresario argentino Carlos Ahumada también acusó la relación entre el priísta y el jerarca católico. En su libro, Derecho de Réplica, Ahumada hizo públicas una serie de reuniones con Cepeda, quien buscaba apoyo económico para Ávila Villegas.
En 2011, a su salida de la presidencia municipal para buscar la gubernatura, dejó al 10.2% de la población de Ecatepec en pobreza extrema, según cifras del Consejo Nacional de Evaluación de la Política Social. Durante marzo, el PRI-Edomex eligió a su candidato. La lista de aspirantes estuvo conformada por Luis Videgaray, Ernesto Nemer, Ricardo Aguilar, Alfredo del Mazo y Azucena Olivares, pero Enrique Peña Nieto fue el encargado de orquestar el acuerdo para que Eruviel Ávila Villegas fuera el candidato del tricolor al gobierno del Estado de México.
Ávila aprovechó los acercamientos por parte de la oposición para convertirlo en candidato de una alianza entre PAN y PRD, y supo venderse caro ante Peña Nieto. Entre sus aliados, Eruviel Ávila contó con el apoyo de Elba Esther Gordillo, a quien todavía como precandidato, pidió su ayuda. “Necesito de la maestra Elba Esther y necesito de los maestros y maestras del Estado de México y del sector federalizado”, dijo casi dos meses antes de ser electo candidato.
Una vez más, su campaña estuvo plagada de descalabros. Camionetas con el logo de Televisa aparecieron en actos públicos del candidato entregando despensas para sumar apoyo a favor de Eruviel Ávila. También por esas fechas, apareció un video en el que se ve un grupo de niños, estudiantes de secundaria, haciendo banderas para la campaña del priísta. En Youtube pueden verse varios videos que acusan al ahora gobernador del Estado de México de ofrecer cargos en el gobierno, automóviles y tinacos, a cambio de votos. Además, el PRD local acusó a Eruviel Ávila de mantener vínculos con operadores políticos de Jorge Hank Rhon, quien en aquellas fechas permanecía preso por acopio de armas.
El 3 de julio de 2011, en un proceso electoral que costó mil 739 millones 611 mil 757 pesos, Ávila se enfrentó en las boletas al panista Luis Felipe Bravo Mena y a Alejandro Encinas Rodríguez, candidato del PRD. Y a pesar de todos los escándalos, el priísta arrasó con la competencia y resultó vencedor con 61.97% de los votos. Su quinta elección ganada supone una gran responsabilidad con su partido y Enrique Peña Nieto, ya que durante los próximos meses se convertirá en uno de los mandatarios estatales más importantes para llevar a su antecesor hasta la residencia oficial de Los Pinos en 2012.