Ciudad de México, 27 de diciembre (SinEmbargo).- Pendiente de la resolución de un apasionado puertorriqueño, Saúl "Canelo" Álvarez tendrá que esperar a que Miguel Ángel Cotto se mida a un argentino longevo de gran carácter como lo es Sergio "Maravilla" Martínez. De todas las razones pesa solo él hacer historia. La pelea, que está pactada para el próximo 7 de junio, sería en el Madison Square Garden. El recinto deportivo por excelencia de Nueva York, vive momentos desolados debido a la orbe actuación de los tradicionales Knicks sin la potencia y la suerte de algunos ayeres.
El lugar apoteósico se presta para dibujar un encuentro que a los dos pugilistas les emociona. Los dos latinos reventarían el boletaje gracias a su talento confirmado en diferentes realidades. Cotto viene de su ida tras el nocaut propinado al dominicano Delvin Rodríguez el 5 de octubre pasado. Tras dos derrotas (Floyd Mayweather Jr. y Austin Trout), Cotto salió a comerse a un boxeador que había levantado suspiros augurándole una gran noche. Sin embargo, fue más el deseo de reivindicación de un consagrado caído quien anhelaba fervientemente retomar el camino exitoso que le había costado tomar.
Maravilla vive en Madrid, pero viaja constantemente a su natal Argentina. Hace poco lo hizo para inaugurar un gimnasio con su nombre. En la inauguración, se mostraba contento por el reciente visto bueno que le había dado el doctor que le operó la rodilla derecha, además de haber superado una lesión en su mano izquierda. A sus 38 años, mantiene un físico a la altura de un campeón del mundo temido. El argentino, actual monarca de peso mediano por el Consejo Mundial de Boxeo (CMB), expondrá su cinturón ante un peleador ávido de arrebatárselo para consagrarse en una fecha de gran simbolismo para su país.
Cotto, campeón en tres categorías distintas, quiere una cuarta para ser el primer puertorriqueño en conseguirlo, justo el día en el que se homenajeará a su compatriota fallecido, Félix Tito Trinidad . El anunció del boricua ante la prensa caribeña, hace juego con la actitud mostrada hace unos meses cuando se devoró a Rodríguez haciendo valer su lugar. "Quiero ir con Martínez. Lo principal es el título. Solo falta la confirmación de su grupo. La fecha es el 7 de junio y prefiero pelear en donde está mi historia, el Madison Square Garden", declaró. La fase preliminar de las negociaciones parece que avanzara muy rápido debido al interés de las dos partes por ser parte de una cartelera para el recuerdo.
"Me dicen que podría pelear con Miguel Cotto el 7 de junio, y creo que así será. Y será una gran pelea", declaró sonriente Maravilla mientras una multitud lo esperaba para poder abrazarlo o tomarle una foto junto al gimnasio que lleva su nombre. Constante el rumor de su retiro debido a su edad, el argentino no sabe si será su última pelea, "primero tengo que ver cómo son las cosas. Sé que se ha comentado que le prometí a mi madre no pelear en 2015, pero bueno, hay muchas promesas que no he cumplido", respondió risueño. A la espera de las siempre complicadas negociaciones, los dos boxeadores ya se imaginan estar enfrentados arriba de un ring.
Mientras Cotto desestimó al Canelo, quien "solo tiene 23 años, es joven, y es un nombre que estará ahí latente", Maravilla lamentó las pocas posibilidades que tiene para enfrentar a Floyd Mayweather Jr. Una pelea que "siempre estuvo lejos. Él elige a los rivales y pelea con niños, así que no creo que se haga". En un hotel de San José, Miguel Cotto le avisó al mundo que su apetito sigue intacto. En un barrio argentino, Sergio Martínez respondió alegre el reto, pidiendo "estímulos, necesito desafíos y por eso, está pelea me da muchas más ganas de seguir todavía". En plena víspera de año nuevo, el calendario marca ya una fecha en junio que pinta para el recuerdo.