México, 21 Nov. (Notimex).- El equipo de científicos mexicanos que participa en el Gran Colisionador de Hadrones, tiene previsto en los próximos años construir dos nuevos detectores, así como renovar los dos ya existentes, con lo que se incrementaría la participación mexicana en el llamado experimento científico más ambicioso de la historia.
En conferencia el científico Paolo Giubellino, vocero del experimento ALICE, una de las cuatro secciones en las que se divide el Gran Colisionador, añadió que en un periodo superior a los 10 años y los científicos de instituciones como el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) tendrán un papel fundamental.
Giubellino destacó el trabajo que a lo largo de dos décadas han realizado los investigadores mexicanos en este proyecto.
"No sólo se ha limitado a la colaboración de las investigaciones, sino también como proveedores de tecnología, ya que es la participación más grande de un país latinoamericano", expuso.
Explicó que en los experimentos del ALICE se generan en promedio lo correspondiente a cuatro gigabytes de información por segundo. "Si quisiéramos guardar toda la información generada en el LHC en discos compactos, se necesitaría una torre de 22 kilómetros para apilarlos"
Por su parte Gerardo Herrera Corral, miembro del Cinvestav y líder del grupo mexicano en el proyecto, dijo que además de la renovación de los dos detectores ACORDE y V0, desarrollarán dos nuevos aparatos que se prevé funciones en 2015 y 2018 respectivamente.
"Uno de ellos es un sistema de disparo y otro es un detector de rayos cósmicos, para la cual buscamos financiamiento de manera independiente, pues tan sólo el primero tiene un costo preliminar que supera el medio millón de francos suizos (alrededor de siete millones de pesos)", destacó Herrera Corral.
El primero de estos dispositivos prevé que entre en operaciones durante 2015, año en el que la capacidad de información del proyecto ALICE debe aumentar en 10 veces, "por lo que se precisa de la más alta precisión en este tipo de dispositivos, y es en lo que estamos trabajando", subrayó Herrera Corral.
Hasta ahora, han colaborado en el proyecto ALICE alrededor de 40 investigadores de origen mexicano provenientes de cinco instituciones diferentes, entre las que destacan el Cinvestav y las universidades Nacional Autónoma de México y Autónoma de Sinaloa, además de contar con el apoyo del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología.