Ciudad de México, 21 de noviembre (SinEmbargo).– La revelación de que un grupo de 10 integrantes del crimen organizado –de los autodenominados Caballeros Templarios de Michoacán– habrían entrado y salido del Senado de la República como cualquier ciudadano con privilegios, ha alcanzado tanto a la cúpula de la Cámara Alta como a la Secretaría de Gobernación. Ambas instancias estarían enteradas del hecho, sin que hasta el momento hayan aclarado este asunto.
La situación descrita en un principio como una anécdota por la Senadora Luisa María Calderón Hinojosa, hermana del ex Presidente Felipe Calderón, ha llegado a tal punto que hasta el Presidente del Senado, Raúl Cervantes ha salido a pedir “información fidedigna” del grave embrollo.
La presidencia del Senado, la Comisión de Seguridad y la Secretaría de Gobernación, las instantas que, en teoría, están más enteradas de lo que pasa en México, están en manos del PRI.
El líder de los senadores del Partido Acción Nacional (PAN), Jorge Luis Preciado, afirmó que de común acuerdo con su homólogo del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Emilio Gamboa, determinaron que el priista Omar Fayad, en su calidad de Presidente de la Comisión de Seguridad Pública, fuera el encargado de informar al Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, de la visita de los presuntos narcotraficantes.
En la reunión con presuntos integrantes de la delincuencia organizada, estuvieron presentes las senadoras michoacanas Luisa María Calderón y Rocío Hernández Gochi, mientras que la perredista Iris Vianey Mendoza habría rechazado la invitación.
Según consta en el registro de entrada del recinto, por la comitiva que pidió audiencia estuvieron presentes: Juan Olmos Mantilla, Luis Padrón Ramírez, Emma Gómez Vargas, Juan Avilez Ruiz, Ricardo Sánchez, José Filiberto Vejar, Armando Alemán Maciel, Rigoberto Peláez, Tito Emigdio Fernández Torres, este último supuestamente relacionado con el brazo político de los Caballeros Templarios, según expedientes de la Policía Federal.
Todos se habrían registrado como ejidatarios, empresarios e integrantes de la Asociación Michoacanos, Paz y Dignidad.
LA VERSIÓN DE “COCOA”
Aunque su declaración cobró revuelo el pasado martes 19 de noviembre, la Senadora Calderón afirma que ya había hecho pública la noticia días antes, pero que “apenas le cayó el veinte” a la prensa.
Presionada por reporteros, la legisladora por Michoacán empezó a revelar nombres de los senadores citados a la reunión con los narcotraficantes y quién convocó a este singular encuentro.
Detalló que la Mesa Directiva del Senado, que preside Raúl Cervantes, le había pedido a legisladores michoacanos recibir a un grupo de personas, que a la postre resultaron ser los presuntos templarios. Al mismo tiempo, precisó que el Senador Omar Fayad, del PRI, Presidente de la Comisión de Seguridad Pública sería el encargado de recibir a la comitiva.
“A ver, ¿qué fue lo que pasó? A nosotros nos mataron a un panista en Apatzingán un martes. En la sesión del jueves yo estaba muy sentada y vino un funcionario de la Mesa Directiva y me dijo, –piden de la Mesa Directiva que atiendan a unas gentes de Apatzingán. Entonces yo le dije – A ver, denme los nombres, porque a mí eso no me suena. (Entonces) dijo el funcionario –Pues son unas gentes de Apatzingán. Y le dije –¿Y quién va a atenderlos? Dijo– Pues va a ir el presidente de la Comisión de Seguridad, e invitan a los senadores michoacanos. Entonces yo respondí –Cuando venga el senador Omar Fayad, vamos”, declaró ante pregunta expresa de la prensa.
Derivado de sus dichos, se desprende que la reunión en cuestión se habría realizado el jueves 17 de octubre, dos días después del asesinato de Octavio Contreras, ex Secretario General del PAN, ocurrido presuntamente el martes 15 de octubre de este año, o en palabras de la Senadora “un panista que nos mataron en Apatzingán el martes”.
Luisa María “Cocoa” Calderón aseguró que Omar Fayad tardó hora y media en llegar, tiempo suficiente para que ella preguntara los nombres de los integrantes de la comitiva de michoacanos, así que le pidió al Senador priista que no los recibieran.
“Le dije –A mí me parece que los mandan Los Templarios, yo te pido que no los atendamos. (Él) contestó, –Bueno, la Mesa Directiva nos lo pide, no sabemos quiénes son. Pues vamos a atenderlos, no le podemos cerrar la puerta a los ciudadanos”, relató así.
La legisladora Calderón asegura que eran entre 10 y 12 personas, que los senadores sí les vieron los rostros, que escucharon sus nombres , y que luego aprovecharon un receso para salirse de la reunión.
Aseguró que ha pedido una cita a la Secretaría de Gobernación para hablar de estos y otros hechos que ocurren diariamente en Michoacán, pero la dependencia “está muy ocupada en muchas otras cosas, me dicen que ya merito, que ya merito. Si a mí no me recibe Gobernación, porque está muy ocupada, pues yo tengo que decirlo públicamente, porque Michoacán está que arde”.
LA VERSIÓN DEL PAN
En medio del escándalo, el Coordinador del PAN en el Senado, Jorge Luis Preciado, explicó su versión de los hechos.
“Quiero comentar cómo estuvo toda la situación. Por parte de Mesa Directiva nos dicen que hay una manifestación aquí afuera [del Senado] de aproximadamente 400 a 500 personas, que venían de Michoacán y que estaban pidiendo ser escuchadas por una comisión del Senado para plantear los temas de inseguridad allá en el estado”, relató en una improvisada conferencia de prensa.
Y prosigue. “Esta comisión la integrarían 10 gentes que pasarían al Senado a ver el tema de inseguridad de Michoacán; y pues obviamente nadie sabe quién está allá afuera, simplemente vemos que son manifestantes y que libremente se están manifestando aquí afuera del Senado en virtud de lo que está sucediendo allá en Michoacán de Ocampo”, explicó a la prensa el también Presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo).
Agregó que él mismo pidió a algunos senadores de Michoacán que recibieran a la comitiva para atender sus inquietudes. “Una vez que tuvieron el primer encuentro, en una de las votaciones se regresan algunos senadores y nos dicen, -Oye, al parecer hay gente dentro de la Comisión que viene a platicar (y) que se le relaciona con el crimen organizado. Por lo que nosotros dimos la instrucción de que ya no regresaran a platicar con esa comisión”.
Preciado afirmó que Fayad, en su calidad de Presidente de la Comisión de Seguridad Pública informaría al Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, de lo que estaba sucediendo.
“Lo discutimos ahí junto con el Presidente de la Comisión de Seguridad, y junto con el Senador Emilio Gamboa. Le pedimos que se informara inmediatamente a Gobernación, respecto a que podrían algunas de las gentes que se estaban manifestando aquí afuera, pertenecer a grupos del crimen organizado”, apuntó el Presidente de la Jucopo.
Preciado explicó que no se les detuvo porque no tenían la certeza de que se tratara de criminales o que tuvieran conocimiento de una orden de aprehensión en su contra.
“No, la información nosotros que recibimos fue que algunas personas de ahí tenían o podrían tener, nosotros no tenemos la certeza, no somos PGR ni somos ministerio público, nosotros sólo recibimos a una comisión de personas que se estaban manifestando aquí afuera del Senado”, reiteró.
LA VERSIÓN DEL PRI
Antes que otra cosa, el Coordinador del PRI, Emilio Gamboa Patrón defendió la honorabilidad del Senado. Afirmó que por obligación constitucional la cámara alta está comprometida a recibir a todos los grupos que soliciten audiencia, mediante una comisión legislativa.
A continuación, el líder de los senadores priistas dio su versión de los hechos.
“Estoy enterado que la Mesa Directiva aprobó que se configurara una comisión de senadores de Michoacán, y dijeron que lo que venían a tratar –un grupo de 400 personas– era un tema de seguridad pública, y por eso se le pidió al senador Omar Fayad que acudiera”, explicó el legislador.
Indicó que no se procedió a detener a la comitiva porque no contaban con elementos para afirmar si las personas que ingresaron al Senado pertenecían al grupo criminal de los Caballeros Templarios o no, por lo que pidió a “la persona” que los reconoció que presente la denuncia correspondiente.
“¿Y quién me aseguraba que estaban y que era real? El que lo confirmó debió haberlo hecho. Si ahorita me dicen que hay gente perversa en el Senado, ni modo que yo esté trayendo a la Procuraduría o a la Secretaría de Gobernación en cada uno de estos casos. Hay que confirmarlo. Quien tenga esa confirmación, que lo denuncie. Yo no tengo esa información a mi alcance”, subrayó.
El pastor de los senadores priistas explicó que el Senador Omar Fayad no está en México, pero confió en que la próxima semana, cuando regrese, dará una conferencia al respecto.
PIDEN DENUNCIAS, NO DECLARACIONES
El Presidente de la Mesa Directiva del Senado, Raúl Cervantes Andrade, pidió a la Senadora Luisa María Calderón Hinojosa que presente una denuncia si tiene información fidedigna para comprobar que miembros de la banda delictiva de los Caballeros Templarios ingresaron a la cámara alta y se reunieron con legisladores.
El priista afirmó que el Senado recibió a la comitiva del 17 de octubre, de la misma forma que recibe a grupos que solicita audiencia para tratar distintas demandas ciudadanas.
“Venía gente del Estado de Michoacán, campesinos –no tenemos por qué prejuzgar si lo eran o no lo eran--, en un tema de seguridad. Se pidió que se diera un espacio específico, que los recibiera un grupo de senadores y los recibió el Presidente de la Comisión”, detalló.
Cervantes descartó que el Senado vaya a cerrar las puertas o a “poner mecanismos que discriminen o violen los derechos humanos”, sólo por “la sospecha de que alguien es delincuente”.
Por otro lado, el Presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, el perredista Silvano Aureoles, pidió a quien haya identificado a ciertas personas o lo haya hecho público, que precise la información, presente las denuncias correspondientes y que responsabilidades.
“Yo digo que en esos casos no se pueden quedar las cosas a nivel de columnas o de comentarios periodísticos, en el ámbito estrictamente de los medios y tienen que aclararse las cosas porque Michoacán le afecta eso”, apuntó el perredista.
“Yo creo que sería pertinente, por un asunto de salud pública, de salud política y por el bien de mi estado, que las cosas pudieran precisarse muy bien”, enfatizó el ex candidato a la gubernatura de Michoacán.
