Ciudad de México, 10 de septiembre (SinEmbargo).– La ex titular de la Procuraduría General de la República (PGR) en el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa, Marisela Morales Ibañez, es investigada por presuntos desvíos en el cobro de recompensas, confirmó hoy en Washington, DC, el Procurador Jesús Murillo Karam.
La hoy Cónsul General de México en Italia, dijo el titular de la PGR, y algunos de sus más cercanos colaboradores están ya en un proceso de investigación por posibles irregularidades en el cobro de recompensas por la captura de capos del crimen organizado, explicó el funcionario federal.
“El asunto de las recompensas lo hemos estado estudiando desde el principio”, dijo Murillo Karam en una rueda de prensa donde también detalló que la subprocuradora Jurídica y de Asuntos Internacionales de la PGR, Mariana Benítez, halló “por casualidad” un pago no emitido en una recompensa.
Sobre este caso, Murillo Karam aclaró que se trataba de un intento de cobro de la recompensa: “Y como sigue todavía la investigación, hasta ahí me voy a quedar, pero no se cobró; no hemos pagado una sola recompensa desde esta administración (de Enrique Peña Nieto). Ni una”.
El Procurador anunció también que este día planteó a Estados Unidos la necesidad de revisar los mecanismos de aplicación de la Iniciativa Mérida, aunque reconoció que es un "excelente instrumento" de cooperación.
Murillo Karam, quien habló sobre la transformación del sistema judicial de México en el Centro Woodrow Wilson, sostuvo que el mayor valor de la Iniciativa Mérida es ser un instrumento de colaboración para hacer valer el estado de derecho y combatir la delincuencia.
"Creo que los mecanismos de aplicación tienen que ser revisados, tienen que ser cuidados, tienen que ser manejados de manera distinta. Pero el propósito me parece espléndido, la intención es correcta y los resultados pueden ser mucho mejores", acotó.
Murillo Karam dijo haber hecho el planteamiento la víspera de manera "tangencial" al Procurador estadunidense Eric Holder, sin obtener una respuesta específica del funcionario, reporta un cable de la agencia Notimex.
El procurador mexicano rechazó por otra parte que el nuevo gobierno mexicano haya optado por un esquema de "marginación" a la cooperación con entidades estadunidenses como la Agencia Antidrogas (DEA).
"La colaboración es muy bienvenida, lo que no hemos admitido es que se supla la autoridad local", precisó.
Durante el encuentro de la víspera, Holder reiteró su preocupación por la liberación de Rafael Caro Quintero, convicto por el asesinato del agente de la DEA Enrique Camarena Salazar, en 1985, y dijo que continuarán trabajando con México para su recaptura.
Murillo Karam dijo haber aprovechado la oportunidad para agradecer a Holder la rapidez en la entrega de la solicitud de extradición y reiteró que desconocen el paradero de Caro Quintero, aunque trabajan activamente para su localización.
"Desgraciadamente en este momento ya no sabemos dónde está; si supiéramos, lo tendría detenido, tengo una orden de detención", señaló el funcionario mexicano en rueda de prensa posterior a su presentación.
En relación con la estrategia de seguridad de México, Murillo Karam hizo notar que se le ha dado a la gendarmería un peso mayor que el que tiene realmente.
"Sí tiene una función estratégica fundamental. Es el aseguramiento del territorio. Hay regiones del país que de no ser atendidas con presencia física, pudieran convertirse en un problema de pérdida del estado de derecho", detalló el Procurador.
La subprocuradora Jurídica y de Asuntos Internacionales, Mariana Benítez Tiburcio, dijo en la rueda de prensa que la visita a Estados Unidos permitirá abrir nuevos espacios de cooperación como las campañas de prevención de las adicciones.
"Vemos una gran ventana de oportunidad para trabajar en forma conjunta", señaló la funcionaria.
Durante su visita a Washington, Murillo Karam se reunió además con el director de la Oficina Nacional para el Control de Drogas de la Casa Blanca (ONDCP), Gil Kerlikowske, y con la titular de la DEA, Michelle Leonhart.
Asimismo, sostuvo encuentros con representantes del Buró Federal de Investigaciones (FBI), de la DEA y del Departamento del Tesoro.