Ciudad de México, 5 de septiembre (SinEmbargo).– Organizaciones de campesinos agrupadas en el Consejo Nacional de Organizaciones Campesinas (Conoc), que incluyen al Consejo Agrario Permanente (CAP) y al Consejo Nacional de Organismos Rurales y Pesqueros (Conorp) denunciaron que el Primer Informe de Gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto no reporta ni un cambio significativo en la política del país hacia el campo.
La CONOC afirma que hasta la fecha, la administración de Peña Nieto sigue aplicando la “receta política” heredada por sus antecesores y a días de iniciarse la discusión del presupuesto federal 2014 no da señales de querer cambiarla.
De acuerdo con un análisis de los trabajadores del campo, el gobierno federal carece de propuestas para atender los graves problemas del medio rural, tales como la dependencia alimentaria, la falta de empleo para la población en general, la falta de oportunidades para jóvenes y mujeres, la caída o estancamiento de la productividad y la falta de atención para la pequeña agricultura o a la agricultura campesina e indígena.
Ante los escasos resultados en estos nueve meses de administración, las organizaciones campesinas e indígenas demandaron al gobierno federal la instalación inmediata de una mesa de diálogo y negociación de los cambios de fondo que requiere el campo mexicano.
“Hacemos un llamado al Gobierno de la República a dejar de lado sus resistencias y prejuicios e iniciar un diálogo franco y dar respuestas a los planteamientos de las organizaciones campesinas e indígenas”, afirmaron.
INCONSISTENCIAS EN EL PRIMER INFORME
Este año el Programa PROCAMPO Productivo estima invertir más de 13 mil millones de pesos, en apoyo a 2.5 millones de productores que cultivan una superficie de 11.9 millones de hectáreas.
Sin embargo –según la Conoc– este programa estrella de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) se reporta sin cambios sustantivos.
“No se habla de reducir la superficie de apoyo para atender a más productores y dejar de privilegiar a los poseedores de grandes superficies; ni de darle una orientación productiva al instrumento ni mucho menos convertirlo en un programa de fomento a la pequeña agricultura y diseñar otros instrumentos para productores comerciales o más capitalizados”, dice.
Además, en el Informe se señala que “… en apoyo a las sequías y contingencias climatológicas” se puso en operación el Programa Emergente de Atención a la Sequía y el Componente Fondo de Apoyo Rural para Contingencias Climatológicas.
“Por otra parte, en apoyo a las sequías y contingencias climatológicas, su puso en operación el Programa Emergente de Atención a la Sequía, en el cual se invierten más de 8 mil 163 millones de pesos, para reactivar la productividad agroalimentarias. También se estableció el Componente Fondo de Apoyo Rural para Contingencias Climatológicas 2013, con una inversión de 3 mil 950 millones de pesos, a través de la cual se aseguraron 12 millones de hectáreas y 10 millones de unidades animal, lo que representa un incremento de 27% y 44%, respectivamente, en comparación con 2012”, dice el Primer Informe de Gobierno.
Pero en este aspecto no solo el fondo es inadecuado sino incluso la redacción, ya que debería señalar que frente a la sequía y las contingencias climatológicas se tomaron determinadas acciones y no la desafortunada frase de “…en apoyo a la sequía y las contingencias climatológicas…”, refieren las organizaciones de campesinos.
Y añade que esta administración sigue con la inercia de ver en la sequía el problema, y se le atiende como una coyuntura, sin ver los problemas estructurales de fondo.
“La sequía, un periodo con escasez de agua, lo que pone en evidencia es una política inadecuada de manejo de tierras (agrícola, ganadera, agroforestal, etcétera) en áreas vulnerables que es la que debe atenderse para evitar que se siga atendiendo como zona de siniestro casi cada año”, plantea la Conoc en un comunicado.
Un síntoma de esta atención inercial a temas como el de la sequía y el Manejo sustentable de Tierras es que tiene casi un año sin convocarse a reunión del Sistema Nacional de Lucha contra la Desertificación (Sinades) ni retomarse la aplicación de la Estrategia Nacional de Manejo Sustentable de Tierras (ENAMST) con la publicación del Programa Nacional correspondiente, refiere.
MEDIO AMBIENTE
El Consejo Nacional de Organizaciones Campesinas refiere que en materia de Medio Ambiente persiste la misma situación y se desatienden las medidas para contrarrestar los problemas del país.
“Para empezar el informe y Plan Nacional de Desarrollo utilizan la expresión ‘Crecimiento Verde’, es decir tenemos un retroceso conceptual cuando pasamos de hablar de desarrollo como una categoría más integral a hablar sólo de crecimiento, detalla la Conoc.
En esta lógica se puede hablar de logros aún cuando el crecimiento haya sido sólo para un sector de la sociedad, lo cual puede agravar las brechas de desigualdad social, dicen.
Asimismo, se destaca la publicación de la Estrategia Nacional de Cambio Climático, sin embargo este ejercicio es uno de los cuestionamiento que tenemos las organizaciones campesinas e indígenas porque se ha realizado de manera excluyente mediante publicaciones en internet y con unos cuantos talleres, denunciaron los campesinos.
“Este ejercicio se ha excluido a la población indígena y campesina a pesar de que el gobierno mexicano ha suscrito diferentes acuerdos internacionales, entre ellos los acuerdos de la COP 16 de Cancún, en los que se comprometió a la participación plena y efectiva de los pueblos indígenas”.
Al respecto estamos demandando el establecimiento de una Mesa Gobierno-Organizaciones Indígenas y Campesinas para incluir la visión de los pueblos indígenas y las comunidades campesinas en la Estrategia Nacional de Cambio Climático.
También se reporta –menciona la Conoc– como un gran logro la instalación del Consejo de Cambio Climático, cuando ha sido un ejercicio digno del siglo XIX o de una monarquía en donde no se abrió convocatoria pública y mediante invitación del poder ejecutivo se incorporan a 15 personas del sector privado, académico, organizaciones no gubernamentales nacionales e internacionales , pero no se convocó a un representante de los pueblos indígenas y de las organizaciones campesinas a pesar de que muchas de las políticas en materia de cambio climático tienen que ver con el manejo sustentable de los territorios y de los compromisos internacionales.
Por lo que demandaron al Gobierno de Peña Nieto abrir el Consejo de Cambio Climático a una representación social amplia campesina e indígena a este consejo y al de Áreas Naturales Protegidas.
De igual manera, se presenta como uno de los grandes logros la inscripción de la Reserva de la Biósfera El Pinacate y Gran Desierto de Altar en la Lista de Patrimonio Mundial como Bien Natural de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco); sin embargo, las organizaciones campesinas e indígenas demostraron los graves problemas de degradación de los recursos naturales que hay en las Áreas Naturales Protegidas por la implementación de un modelo basado en las restricciones al manejo y uso sustentable de los recursos ecosistémicos y en la violación a los derechos de los pueblos indígenas y comunidades campesinas.
