Cancún, Q.Roo, 22 Jun. (Notimex).- Luego de un año con Xolos de Tijuana, donde se coronó campeón de liga y tuvo la oportunidad de participar en su tercera Copa Libertadores, Jorge Hernández enfrentará ahora una situación completamente distinta con Atlante, enfrentar el problema del descenso.
Sostuvo que además de trabajar en el aspecto físico, Atlante debe mentalizar muy bien el momento en el que se encuentra, pero no para presionarse sino para tratar de hacer las cosas bien desde el primer partido de la temporada.
"Tenemos que preparar con todo la temporada, nos jugamos mucho pero se está formando un buen grupo para dar la pelea", afirmó.
En entrevista, dijo recordar con gusto su paso por el equipo de Tijuana, que si bien el primer año no les hacían mucho caso, luego de conseguir el título, la afición y los medios los tomaban más en cuenta y eso se reflejo en el segundo semestre con el doble compromiso de defender el título y jugar la Copa Libertadores.
"En la Copa Libertadores llegamos lejos, desde el primer torneo que llegué gracias a dios fuimos campeones y eso me dio confianza", aseveró.
Ahora, en lo que se refiere a la pretemporada, señaló que los trabajos físicos son normales, que genera algunas contracturas pero que con todo y el cansancio que puedan tener, lo importante es llegar físicamente muy bien al inicio de la temporada.
El mediocampista campeón mundial sub-17 en Perú 2005 regresó a Cancún luego de un año de jugar con Xolos de Tijuana y aunque dijo que está en etapa de renovación de contrato, aseguró que entra en los planes de la directiva, por lo que sólo queda trabajar para que el técnico uruguayo Wilson Graniolatti lo tome en cuenta.
Sobre la experiencia en la Copa Libertadores, dice que le dejó mucha experiencia su tercera participación en la justa continental, que le da mucha madurez jugar en diferentes escenarios, ante públicos diferentes, muchas veces en un clima hostil.
No obstante, consideró que eso le sirve para enfrentar de otra manera el juego, pues, por ejemplo, con Atlante tendrán el tema de ganar puntos desde el primer juego ante rivales muy complicados.
"Jugar Libertadores da mucha cancha, lo único malo fueron los viajes, de mínimo ocho o nueve horas, eso fue lo más pesado, nos quedó la espinita al final, pero es en esos momentos donde más aprendes" afirmó.
Atlante cerró la semana con doble sesión, descansará el domingo y los jugadores están citados a entrenar a primera hora en lugar por definir, aunque según el plan de trabajo sería en la playa.