Gobierno activa plan emergente para frenar pérdidas en el agro; 19 estados enfrentan la peor sequía de su historia

24/05/2013 - 12:03 am

Ciudad de México, 24 de mayo (SinEmbargo).-Escasez de alimentos, pérdida de cabezas de ganado, zonas áridas y grandes costos económicos son algunas de las consecuencias de la sequía, un problema que en 2011 afectaba al 40 por ciento del territorio mexicano, lo que representaba 789 mil 020 kilómetros cuadrados, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

A nivel mundial, más de 110 países sufren dificultades relacionados con la desertificación y la sequía, lo que da como resultado que cada año se pierdan más de 12 millones de hectáreas de suelo productivo. En países como México, la falta de agua ya se ha visto reflejada en los precios de algunos cultivos como el tomate verde, que en un año aumentó 200 por ciento.

“Las tierras áridas abarcan una superficie del 40 por ciento del suelo de nuestro planeta, donde viven las personas más pobres del mundo y las más vulnerables al hambre”, de acuerdo con Ban Ki-Moon, secretario general de la Organización de la Naciones Unidas.

Debido a esta crisis, en enero de 2012 se reveló que el Fondo de Desastres Naturales (Fonden) contaba con 23 mil 800 millones de pesos para complementar los recursos de combate al problema de la sequía.

Entre las zonas donde se presenta más este fenómeno se hallan las montañas bajas de Sonora, casi todo el territorio de Coahuila, San Luis Potosí, Zacatecas y Nuevo León, parte de Tamaulipas, la región noreste de Guanajuato, Aguascalientes y gran parte de Querétaro, así como los estados de Hidalgo, Puebla y una pequeña porción de Oaxaca.

Por entidad federativa, 19 de los 32 estados de la República sufren los efectos de la peor sequía que azota al país, entre los que destacan Coahuila, Chihuahua, Durango, San Luis Potosí y Zacatecas.

Derivado de esta situación, el 21 de mayo pasado el titular de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), Enrique Martínez y Martínez, anunció la inversión de recursos extraordinarios por 2 mil 460 millones de pesos para atender a los ganaderos de México afectados por la falta de lluvia. Una parte de este monto, precisó, va dirigida a detonar créditos inmediatos, con lo que la bolsa de recursos alcanza los 8 mil 163 millones.

La mayoría de los recursos se canalizará de la siguiente manera: 643 millones de pesos, administrados por la Subsecretaría de Agricultura al Programa de apoyo a la inversión para mitigar los efectos climatológicos en la agricultura.

Programa de apoyo a la inversión para mitigar los efectos de la sequía, heladas e inundaciones en el sector ganadero: 770 millones de pesos, administrados por la Coordinación General de Ganadería.

Fondo de apoyo a contingencias y garantías líquidas: 350 millones, administrados por la Coordinación General de Ganadería.

Un mes antes, Martínez y Martínez declaró que existe un plan emergente por la sequía prolongada en la región norte y centro del país, incluso, algunos estados demandan una declaración de desastre. En esa zona no llueve desde hace más de 30 meses, entonces tendríamos que hacer una declaratoria de emergencia para todo el territorio nacional, dijo a La Jornada.

Debido a esta situación, en días pasados, diputados federales anunciaron que solicitarán sean adelantados los recursos del Programa Nacional de Sequía a productores agropecuarios y responsables de los bosques, a fin de que resistan los embates de los incendios forestales y la sequía.

El presidente de la Comisión de Agua Potable y Saneamiento, Kamel Athie Flores, indicó a la agencia Notimex que ya se hizo el exhorto a las autoridades federales y que si hay un periodo extraordinario se planteará la propuesta para que el Congreso haga la exigencia.

Pero este problema no es nada nuevo y pese a las políticas que buscan erradicar la sequía, ésta parece no tener control. El Presidente Enrique Peña Nieto se ha desmarcado de su antecesor, a quien criticó por su indiferencia respecto al tema, y ahora promete combatir este fenómeno.

Foto: Cuartoscuro
Se han perdido miles de cabezas de ganado. Foto: Cuartoscuro

LA INDIFERENCIA DE FCH

A principios de 2012, Laura Gurza, entonces Coordinadora General de Protección Civil de la Secretaría de Gobernación (Segob), aseguró que el Gobierno Federal no estaba rebasado por la sequía que afectaba principalmente a siete entidades del norte del país.

"No estamos rebasados en este momento, por supuesto que va a comprometer finanzas de los tres órdenes de gobierno que implica inversiones extraordinarias y al menos en cuanto hace al gobierno federal, éste ha hecho su mejor esfuerzo y ha etiquetado recursos por al menos 22 mil millones de pesos más lo que se acumule en etiquetamiento de otros programas que se encuentran en ese proceso de análisis y los recursos que se activen del Fonden", afirmó.

Calificó como rumores los presuntos suicidios de indígenas Rarámuris en la sierra Tarahumara, debido a la falta de agua y alimento, y explicó que este sector de la población era atendido desde 2011.

El 25 de enero de 2012 se publicó en el Diario Oficial de la Federación el "Acuerdo por el que se instruyen acciones para mitigar los efectos de la sequía que atraviesan diversas entidades federativas", a través del cual el titular del Ejecutivo Federal instruyó a diversas dependencias de la Administración Pública Federal la ejecución de acciones para mitigar los efectos de la sequía, agilizar el ejercicio de recursos públicos y la realización de obras públicas para atender los efectos de dicho fenómeno meteorológico.

También el año pasado, el entonces Presidente Felipe Calderón aseguró que el Gobierno Federal destinaba “varios miles de millones de pesos” para socorrer a las poblaciones del país que enfrentaban los daños causados por la sequía.

Durante el lanzamiento del Programa Multianual de Cambio Climático Global 2012-2016, el mandatario mencionó que la sequía es una expresión del cambio climático, un fenómeno actual con consecuencias actuales y costos económicos también actuales. Por ello subrayó que el gobierno federal destina una gran cantidad de recursos para remediar, precisamente, las consecuencias del cambio climático, ya sea en el caso de inundaciones o de sequías.

Para junio se anunció que los siete estados más afectados por sequía, Coahuila, Chihuahua, Durango, Nuevo León, San Luis Potosí, Tamaulipas y Zacatecas, recibirían por adelantado el pago de 12 mil 187 millones de pesos para mantener las capacidades productivas del sector rural, así como el abasto permanente de alimentos y agua.

Días antes se anunció el incremento de 10 por ciento a la bolsa del Programa al pasar de 33 mil 827 millones de pesos a 37 mil 365 millones, destinados al abasto de agua, atención médica, protección social, apoyo al ingreso familiar y al empleo, obras hidroagrícolas, esquemas de aseguramiento y financiamiento.

A finales de año, fueron publicados los "Lineamientos que establecen los criterios y mecanismos para emitir acuerdos de carácter general en situaciones de emergencia por la ocurrencia de sequía, así como las medidas preventivas y de mitigación, que podrán implementar los usuarios de las aguas nacionales para lograr un uso eficiente del agua durante sequía", mediante los cuales se establecieron los criterios y mecanismos aplicables para que la Comisión Nacional del Agua pueda emitir Acuerdos de Carácter General de emergencia por ocurrencia de sequía, así como proponer a los usuarios las medidas preventivas y de mitigación de la sequía conforme a las cuales podrán lograr un uso eficiente del agua, preservándola.

Aún siendo virtual candidato a la Presidencia, Enrique Peña Nieto acusó en junio de 2012 a Felipe Calderón de mostrar falta de "sensibilidad" y "lejanía" para los 20 estados que enfrentaban la peor sequía que ha sufrido el país durante los últimos 70 años.

"Qué decir de cuando no se tiene cercanía y sensibilidad a los problemas que vive la sociedad mexicana como uno que hoy lamentablemente enfrentan 20 entidades del país, entre ellas Durango, ante lo que representa la sequía más grave y más delicada de los últimos 70 años.

"Por eso, desde Durango, me sumo a las voces que demandan al gobierno federal el apoyo inmediato, el apoyo sensible, que permita a los que viven del campo respuesta a su necesidad ante los estragos de la sequía más grave que ha azotado al país en estos últimos 70 años", dijo.

AGUA PARA EL CAMPO

Desde los primeros días del nuevo Gobierno, Enrique Peña Nieto anunció un fondo de seguros contra catástrofes para respaldar a los productores ante fenómenos naturales.

En enero adelantó la creación de un Programa Nacional contra la sequía.

Durante una visita a Zacatecas, el Jefe del Ejecutivo anunció respaldos, sin especificar el monto, para asegurar un total de 10 millones de hectáreas a nivel nacional y 6 millones de cabezas de ganado.

Tan sólo en esa entidad, se destinarán 120 millones de pesos para asegurar 400 mil hectáreas y 220 mil cabezas de ganado.

En febrero pasado, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) presentó el Programa Nacional contra la Sequía que espera "dar un giro total a la estrategia para que transite de un organismo reactivo a uno de prevención temprana".

David Korenfeld, titular del organismo, aseguró que el proyecto forma parte de los compromisos del Presidente, en búsqueda de acabar con la vulnerabilidad de la población ante los fenómenos hidrometeorológicos.

A cargo de la primera etapa estará la Comisión Intersecretarial para la Atención a la Sequía, conformada por las Secretarías de Economía; Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación; Educación; Energía; Salud; Defensa Nacional, Desarrollo Social, Gobernación, Turismo y la Comisión Nacional Forestal.

Recientemente, la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) anunció un programa emergente para el campo por 8 mil 163 millones de pesos que se destinarán a siete estados bajo una situación preocupante.

Durante su participación en la Convención Nacional Ganadera en Monterrey, Nuevo León, el titular de la dependencia, Enrique Martínez y Martínez, anunció que de ese presupuesto, 2 mil 460 millones son para garantías líquidas, pago de intereses y para apoyar el crédito.

Foto: Cuartoscuro
Foto: Cuartoscuro

LA RAÍZ DE LA SEQUÍA

De acuerdo con un reporte del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), publicado el 17 de junio de 2012, algunas de las causas de la sequía son "las manchas solares que alteran la cantidad de energía que llega a la superficie de la Tierra; las alteraciones en la circulación de los vientos generados por la modificación en el albedo (porcentaje de radiación que cualquier superficie refleja respecto a la radiación que incide sobre la misma) superficial o por cambios en la temperatura superficial de los océanos".

En el documento hacía hincapié en la importancia de conocer los efectos del fenómeno de “El niño”, caracterizado por debilitamiento a gran escala de los vientos y por el calentamiento de las capas superficiales del Océano Pacífico Ecuatorial en sus porciones Este y Central. 

De acuerdo con el INEGI, cuando se presenta este fenómeno, entre cada dos o siete años, las lluvias en la mayor parte de México disminuyen, por lo que la sequía comienza a aparecer.

A esto se suman los incendios forestales que azotan a diversos estados. Por ejemplo, en San Luis Potosí, durante marzo, se vivió una situación de emergencia por diversos incendios.

Incendio en Ciudad Valles, SLP. Foto: Cuartoscuro
Incendio en Ciudad Valles, SLP. Foto: Cuartoscuro

EFECTOS

El National Drought Mitigation Center, de los Estados Unidos (1996), ha clasificado las distintas consecuencias de la sequía:

-Económicas: Se presentan pérdidas en la producción de alimentos, en el sector ganadero, entre otros. Además de que es uno de los motivos del incremento de costos de energía, pérdidas en actividades industriales y la consecuente alza de precios en el mercado, incremento de los costos de suministro de agua, entre otros.

De 2010 a 2013 la sequía ha causado la muerte de un millón 300 mil cabezas y un millón más tuvo que ser sacrificado, según estimaciones de la Confederación Nacional de Organizaciones Ganaderas. Para los productores resultaba más barato sacrificar al ganado que alimentarlo para intentar que le diera alguna rentabilidad.

-Ambientales: Se registran daños en la flora y fauna silvestre, se incrementa la vulnerabilidad de los ecosistemas, se intensifican los procesos de erosión hídrica y eólica, se reduce la calidad del agua, se promueve la contaminación del aire y se afecta el ciclo hidrológico en general, entre otros.

-Sociales: Escasez de alimentos, malnutrición, disminución del nivel de vida, conflictos sociales por el uso del agua o de mejores tierras, incremento de la pobreza, migración, hacinamiento en las ciudades, abandono de tierras agrícolas.

Foto: Cuartoscuro
Foto: Cuartoscuro

DÍA MUNDIAL CONTRA LA DESERTIFICACIÓN

En 1995 la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el 17 de junio como el Día Mundial de Lucha contra la Desertificación y la Sequía. El lema del año pasado fue "Suelo saludable sustenta su vida: neutralidad de la degradación de la tierra".

De acuerdo con el INEGI, este fenómeno abarca el desgaste de tierras cultivables, zonas forestales y de uso pecuario.

Datos periodísticos indican que en nuestro país, alrededor del 64 por ciento de las tierras sufre de alguno de estos problemas. Además, se calcula que alrededor de 48 millones de personas padecen las consecuencias de la sequía en zonas áridas, semiáridas y subhúmedas secas.

Es tan grave este conflicto de años, que dos de cada tres hectáreas se encuentran dañadas, lo que implica una pérdida del 10 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) anualmente.

En 2011, 40 por ciento del territorio mexicano registró el peor año de sequías en las últimas siete décadas,  lo que representa 789 mil 020 kilómetros cuadrados, según el instituto.

También refiere que los suelos afectados por algún tipo de degradación representan el 45.2 por ciento de la superficie total del país y que 64 de las 174 áreas naturales protegidas (ANP) en México (36.8 por ciento) se encuentran en riesgo por la sequía que afecta al país, que ya es considerada como la peor en los últimos 70 años.

 

 

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