Ciudad de México, 17 de marzo (SinEmbargo).- Lo que presumía ser una noche con amigos para el futbolista argentino Jonathan Botinelli, cambió drásticamente cuando fue interceptado por cuatro personas que apuntándole con un arma lo secuestraron por algunos minutos de la noche del pasado jueves.
El reloj marcaba poco después de las 20:00 horas en la zona residencial de “El Palomar” en Buenos Aires (Argentina), cuando el defensor fue detenido por los asaltantes, quienes no pudieron llevárselo en su automóvil porque no arrancó, y tuvieron que trepar a la camioneta del jugador de River Plate para continuar con el atraco, publicó Clarín.
Fueron cerca de 40 cuadras las que el jugador sufrió en el robo, donde los ladrones huyeron con dos mil pesos argentinos, joyas y el celular del deportista, quien fue rescatado por la policía quee inclusive cruzó fuego con los asaltantes para recuperar la libertad del argentino, luego de que la llamada de un vecino les avisó sobre el percance.
Bottinelli fue liberado enseguida por la policía, que lo trasladó a la Comisaría 6a. de El Palomar, donde prestó declaración ante las autoridades. Según el padre del futbolista, Juan Carlos Botinelli, su hijo se negó a llevar a los ladrones a su casa para que le robaran más cosas, por lo que recibió algunos golpes en la cabeza y otras partes del cuerpo.
Aun tras el episodio, el defensor entrenó este viernes y viajará a Rosario junto con el resto del equipo millonario, pues no quiere perderse el duelo contra Newell’s, además de que quiere olvidar rápidamente lo sucedido y enfocarse en su trabajo.
«A ‘Jonhy’ se lo ve en buenas condiciones físicas. Esas son las cosas que no nos gustan de este país, toda la inseguridad, la gente necesita tranquilidad, le puede tocar a cualquiera. Ojalá se pueda recuperar, voy a hablar con él», dijo a Olé el estratega de River Plate, Ramón Díaz, que antes aseguró respetaría cualquier decisión que tomara el futbolista.
La situación no es novedad para el futbol argentino, pues el pasado febrero fue el jugador de balompié Patricio Toranzo, junto a su hijo de 4 años, quienes fueron secuestrados y asaltados por una banda que en la misma localidad de “El Palomar”, al oeste del conurbano bonaerense.
En el caso del ex jugador de Huracán, Racing y River, varios hombres en un auto lo amenazaron con armas y subieron al coche, para tres horas después liberarlos en otra zona.
“Sin dudas ayer pasé la peor noche de mi vida, mucha impotencia y bronca por la inseguridad de este país. Porqué (sic.) tanta violencia. Gracias por todos los mensajes, fueron 3 horas de terror pero por suerte están bien tanto pato como su hijo”, escribió en aquella ocasión Tamara Alves, esposa de Toranzo.
Esto se da un par de días después de que la Federación Peruana de Futbol (FPF) estableció un plan de seguridad para proteger a sus jugadores que militan en equipos del extranjero, ante alguna amenaza de secuestro antes del partido de eliminatorias del Mundial de Brasil 2014.
Antonio García Pye, gerente de la selección inca informó que hay ciertas medidas previstas para resguardar a los jugadores que llegarán desde el próximo domingo a Lima, pues según un portal peruano hay bandas criminales que pueden amenazar la seguridad de jugadores como Claudio Pizarro, Jefferson Farfán, y Juan Vargas del Bayern Múnich, Schalke 04, Genoa, respectivamente.
«Se ha dispuesto de un plan de seguridad que contará con el apoyo de la Policía Nacional y el Servicio de Inteligencia, que se aplicará desde que lleguen a Lima», dijo García.
