México

Un acto de resistencia

Claves de cómo el consumo local puede ser una opción ante los aranceles y la chatarra

15/03/2025 - 1:00 pm
México

En las últimos semanas, las presiones arancelarias impuestas por el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, reavivaron el debate sobre la autosuficiencia económica de México y se ha escuchado con más fuerza la importancia de fortalecer el consumo interno.

Ciudad de México, 15 de marzo (SinEmbargo).,- En tiempos en los que las presiones aranceles del Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y donde las políticas comerciales capitalistas y las estrategias de mercado moldean lo que llega a nuestras casas y mesas —privilegiando ultraprocesados y comida chatarra—, el hacer las compras y llenar la despensa ya no es solo una rutina doméstica sino un acto de resistencia y política.

Así lo expone la antropóloga de la UNAM e integrante de Redes Alimentarias, Dulce Espinosa de la Mora, durante el programa Usted, Yo y Otros como Yo, al señalar que el consumo local puede volverse un frente de resistencia, pues en cada elección de compra, los consumidores deciden a qué modelo económico alimentan: uno basado en la producción masiva y el consumo acelerado o uno que prioriza la economía local, el bienestar comunitario y la sustentabilidad.

“Fíjense, ir a la la compra, hacer la despensa es todo un acto de resistencia y de política, porque nosotros tenemos que decir decidir hacia qué empresas vamos a consumirles. Esto significa una gran responsabilidad”, expresó.

En las últimos semanas, las presiones arancelarias impuestas por el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, reavivaron el debate sobre la autosuficiencia económica de México y se ha escuchado con más fuerza la importancia de fortalecer el consumo interno.

Ante la incertidumbre comercial, el Gobierno federal ha impulsado estrategias para fortalecer el consumo interno. La Presidenta anunció recientemente en el Zócalo capitalino un plan para impulsar la economía nacional, en respuesta a la incertidumbre comercial con Estados Unidos.

Durante este evento, celebrado el pasado domingo en la Ciudad de México, se presentaron diversas medidas para fortalecer el mercado interno, promover la autosuficiencia en bienes básicos y energéticos, e incentivar la inversión pública.

Uno de los puntos clave de este plan es precisamente el fortalecimiento del mercado interno, lo que incluye seguir incrementando los salarios y garantizar el bienestar de la población.

Desde la llegada de Donald Trump y su discurso antimigrante, así como sus amenazas de imponer aranceles a sus socios comerciales, también han surgido diversas manifestaciones en Estados Unidos y México. Redes latinas han impulsado campañas en redes sociales con hashtags que promueven el consumo de productos locales.

En febrero se relanzó el sello "Hecho en México", un distintivo que ha acompañado a la industria nacional por casi 40 años. Este sello, creado en 1978, ha sido retomado por la Secretaría de Economía como parte de un plan para fortalecer el mercado local y fomentar el consumo de productos nacionales.

A la par de estas iniciativas gubernamentales, también han surgido campañas impulsadas por la sociedad civil que buscan incentivar el consumo local, tanto en México como en las comunidades latinas en Estados Unidos.

Un dato relevante es que, en noviembre de 2024, el consumo de bienes importados cayó un 4.1%, mientras que el consumo de bienes y servicios de origen nacional aumentó apenas un 0.3%, de acuerado el Indicador Mensual del Consumo Privado, el cual mide la evolución del gasto de los hogares mexicanos en bienes y servicios.

El consumo local abarca muchos sectores, pero uno de los más importantes es el de los alimentos. Es un buen punto de partida para fortalecer la economía desde el día a día.

Dulce Espinosa de Mora, socia de un colectivo e integrante de las Redes Alimentarias Alternativas, en entrevista con Usted, Yo y otros como yo, habló acerca de que elegir el comprar con conciencia privilegiando productos frescos en mercados locales, así como cuestionar el origen de lo que comemos no solo impacta nuestra salud, sino que fortalece el mercado interno y desafía un sistema que prioriza las ganancias sobre la calidad de los alimentos.

Y es que, los hábitos de consumo actuales han sido moldeados por décadas de políticas que favorecen a la agroindustria y a las cadenas de distribución masiva, relegando a los pequeños productores y a la producción agroecológica.

En la primera quincena de febrero de 2025, el INPC registró un nivel de 138.631: aumentó 0.15 por ciento respecto a la quincena anterior.
Foto: Magdalena Montiel Velázquez, Cuartoscuro

¿Cómo hacer compras más conscientes? Experta dan claves para una mejor alimentación

Adoptar hábitos de consumo más responsables no solo beneficia la salud, sino también la economía local y el medio ambiente. Dulce Espinosa, experta en redes alimentarias, comparte algunos puntos clave para transformar la manera en que compramos y consumimos alimentos.

En una reciente conversación, Dulce María Espinosa de la Mora, líder de Redes Alimentarias, habló sobre cómo los mexicanos pueden hacer una diferencia significativa en sus hábitos alimenticios, promoviendo el consumo local y adoptando una mentalidad más consciente hacia los productos que consumimos.

Y es que a menudo, el pensamiento de que comprar alimentos baratos es una forma de apoyar la economía y ahorrar dinero está errado. Una de las claves para comenzar hacer un cambio significativo, de acuerdo con la activista y antropóloga de la UNAM, está en la forma en que los consumidores toman decisiones sobre lo que van a comprar.

En su opinión, un gran obstáculo para la adopción de hábitos más saludables es el ritmo acelerado de la vida moderna. Sin embargo, hizo un llamado a no dejar de lado el aspecto alimentario.

La activista también recalcó que el cambio no será inmediato y que las políticas públicas, que en muchas ocasiones han favorecido un modelo de producción y consumo masivo, deben cambiar. Y es que nosotros como consumidores tenemos el poder , dijo y si se organizan de manera colectiva, los cambios son posibles. Redes Alimentarias, organización que lidera, trabaja para fortalecer esta conciencia entre la población.

Para aquellos que buscan dar un paso hacia una alimentación más saludable, la especialista compartió algunas recomendaciones. En primer lugar, sugirió comprar alimentos frescos, preferentemente en mercados locales o tianguis. “Estos productos suelen tener menos químicos y están mucho más cerca de la naturaleza. Además, muchas veces son más accesibles en cuanto a precio”, explicó.

A la hora de hacer las compras, uno de los puntos más destacados es la importancia de dedicar tiempo y atención a lo que adquirimos. “Comprar a las carreras nos lleva a elegir productos procesados o empaquetados que, a menudo, no son lo mejor para nuestra salud. Es vital ser más conscientes y no dejar el tema alimentario en segundo plano”, sostuvo.

https://www.youtube.com/channel/UCJLhNTARdDSgxEpweH138Fg

Además, la activista mencionó que la clave está en crear nuevas dinámicas de compra, como colaborar con otras personas para hacer la despensa y reaprender sobre los procesos de producción y consumo. “Las canastas locales de frutas, verduras y otros productos frescos son una excelente alternativa. Esto no solo beneficia nuestra salud, sino que también es una forma de apoyar a los pequeños productores y fortalecer nuestra economía local”.

Tips para mejorar los hábitos de compra y apoyar la economía local

  • Compra en mercados y tianguis: Los productos frescos y locales tienen menos químicos y conservantes.
  • Prefiere alimentos naturales: Evita los ultraprocesados y empaquetados. En su lugar, opta por frutas, verduras y granos en su estado natural.
  • Fíjate en la frescura: Los cereales y legumbres pierden nutrientes si llevan demasiado tiempo almacenados.
  • Planea tus compras: Evita adquirir alimentos por impulso. Dedica tiempo a elegir productos de calidad.
  • Únete a iniciativas de consumo responsable: Existen redes ciudadanas que promueven la compra directa a productores.
  • Un cambio necesario para la salud y el planeta

Espinosa destacó que estos pequeños cambios pueden marcar la diferencia no solo en la salud de los consumidores, sino también en la sostenibilidad del sistema alimentario.

"Repensar nuestra alimentación es fundamental. Necesitamos tomar conciencia de que cada compra es un acto político y de resistencia. No podemos dejar nuestra alimentación en manos de un sistema que prioriza las ganancias sobre la calidad de los alimentos", concluye.

En esta entrevista con la antropóloga Dulce Espinosa, nos explicó también que la oferta alimentaria en México involucra tres sectores: el privado, el público y la producción campesina de alimentos. Sin embargo, no hay una relación justa entre estos tres niveles. Aunque el gobierno ha promovido políticas para garantizar el acceso a la alimentación, estas no siempre han asegurado alimentos de calidad, como productos sin pesticidas ni conservadores. Un ejemplo es el caso de Coca-Cola, especialmente en Chiapas, donde la bebida se popularizó por una política pública que buscaba garantizar el acceso a agua, pero no consideró la calidad nutricional de los alimentos.

Hoy en día, los productos empaquetados están disponibles en todo el país, pero no se ha fomentado un acceso igualitario a alimentos más saludables o agroecológicos, que con el tiempo se han convertido en productos de élite. Vamos a escuchar lo que nos dijo.

Dulce Espinosa también habló sobre diversas iniciativas para promover el consumo local de alimentos en México y los retos que enfrentan los productores. Mencionó las iniciativas georreferenciadas en un mapa de la CONABIO, las cuales están impulsadas por la sociedad civil, no por negocios, las cualess incluyen centros de distribución de alimentos saludables, huertos urbanos en la Ciudad de México, y comedores comunitarios que ofrecen comidas saludables a precios accesibles. Destacó que muchas de estas iniciativas están enfocadas en sensibilizar a la población sobre la importancia de consumir localmente.

Además, comentó sobre la Ley de Alimentación de México, la cual es un paso importante, ya que garantiza el derecho a la alimentación, pero aún falta el manual operativo para su implementación. Para Dulce, los cambios deben surgir desde la población civil, que tiene el poder de movilizarse y aplicar la ley en sus territorios. Sin embargo, advirtió que no todas las iniciativas sobre alimentación son serias, ya que también existen negocios que se aprovechan de la tendencia verde y saludable.

En cuanto a los retos de los productores locales, mencionó la necesidad de mejorar las infraestructuras y espacios de distribución para que los pequeños productores puedan llegar a las ciudades sin enfrentar dificultades como largos tiempos de transporte y costos elevados. Propuso que las autoridades municipales y locales deben involucrarse para garantizar precios justos y mejorar las condiciones de los mercados. Además, destacó la importancia de que los pequeños productores continúen en sus tierras, ya que muchas veces venden sus terrenos debido a la falta de oportunidades económicas.

En México existen al menos 38 redes alimentarias alternativas en las que consumidores y productores se articulan para lograr sistemas de alimentación locales y sostenibles, esto como respuesta al modelo actual, donde la comida chatarra ha desplazado las dietas tradicionales.

Sugeyry Romina Gándara
Ha trabajado como reportera y fotoperiodista de nota roja en Chihuahua. Los últimos años, ya radicada en CdMx, los ha dedicado a cobertura sobre temas de desaparición, seguridad y víctimas de la violencia.
en Sinembargo al Aire

Lo dice el Reportero

Opinión

Opinión en video