Luego de que México perdió frente a Estados Unidos en su intento por prohibir la entrada del maíz transgénico a nuestro país, el Gobierno que encabeza la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo está buscando que dicha prohibición se implemente constitucionalmente, enfatizando en el riesgo a la salud y a las variedades nativas que ese alimento ocasiona.
Ciudad de México, 26 de enero (SinEmbargo).- Luego de la derrota que sufrió el Gobierno mexicano ante el panel de T-MEC por la disputa del maíz transgénico, la la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo presentó esta semana una iniciativa de reforma constitucional para prohibir la siembra de maíz transgénico en México.
Tanto el Gobierno de México como otros expertos en el tema han documentado el riesgo que implica la siembra de maíz genéticamente modificado, así como para el resto de las especies nativas de maíz en el país, ya que, por un lado, éstas corren el riesgo de desaparecer y, por el otro, el herbicida que se utiliza en la siembra del maíz transgénico supone una alto riesgo para la salud de las personas.
"México cuenta con la mayor diversidad genética de maíz conocida a nivel mundial, representada por los parientes silvestres presentes en su territorio, es decir cuenta con la fuente de variabilidad genética más amplia de un cultivo de importancia estratégica. Y es responsabilidad del Estado resguardar dicha diversidad para garantizar su permanencia para las generaciones futuras", se lee en la exposición de motivos de la iniciativa constitucional presentada por la Presidenta Sheinbaum el pasado 23 de enero.
La Reforma plantea modificar el Artículo 4 constitucional para que quede de la siguiente manera:
"Toda persona tiene derecho a la alimentación nutritiva, suficiente y de calidad. El Estado lo garantizará. El maíz es un elemento de identidad nacional cuyo cultivo debe ser libre de transgénicos, priorizando su manejo agroecológico".
De igual forma se propone cambiar el Artículo 27 de la siguiente manera:
"El Estado promoverá las condiciones para el desarrollo rural integral, con el propósito de generar empleo y garantizar a la población campesina el bienestar y su participación e incorporación en el desarrollo nacional, fomentará la actividad agropecuaria y forestal para el óptimo uso de la tierra libre de cultivos y semillas para siembra de maíz transgénico y con obras de infraestructura, insumos, créditos, servicios de capacitación y asistencia técnica. Asimismo, expedirá la legislación reglamentaria para planear y organizar la producción agropecuaria, su industralización y comercialización, considerándolas de interés público".
La iniciativa presidencial expone en su Artículo 4 transitorio que "se entenderá por maíz transgénico, aquel que ha sido modificado o alterado genéticamente, mediante la introducción artificial de una o más secuencias de ácido desoxirribonucleico y/0 ácido ribonucleico provenientes de otro organismo de otra especia usando tecnología recombinante".
La disputa con EU por el maíz transgénico
En diciembre de 2024, como resultado de la disputa comercial que Estados Unidos y México sostienen por la prohibición del maíz transgénico, nuestra nación fue derrotada. Esto, luego de que el panel del T-MEC determinó cómo no procedente esta medida bajo el argumento de que México no presentó el suficiente fundamento científico para que procediera la prohibición.
Además, el panel sostuvo que México estaba violando los compromisos que se establecieron en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá, también conocido como T-MEC. "El panel del T-MEC estuvo de acuerdo con Estados Unidos en las siete reclamaciones legales”, señaló Katherine Tai, representante Comercial de Estados Unidos, mediante un comunicado.
“Concluyó que las medidas de México no se basan en la ciencia y socavan el acceso al mercado que México acordó proporcionar en el Tratado", agregó Tai quien también subrayó la importancia de que las políticas comerciales cuenten con bases científicas, lo que, dijo, permite a agricultores y productores “competir de manera justa y aprovechar su innovación para abordar el cambio climático y mejorar la productividad", enfatizó.
Tras la resolución, la Presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, sostuvo que su Gobierno defenderá la producción de maíz criollo y reiteró que en el país está prohibida la siembra de maíz transgénico. "Hay que proteger la biodiversidad de México en nuestro país. Como decimos: ¡Sin maíz, no hay país!”, expresó.
"México, como país de origen del maíz, tiene la responsabilidad de proteger las variedades criollas y nativas que representan siglos de coevolución a lo largo y ancho de nuestra República. La contaminación de estas variedades por maíces transgénicos es un riesgo que no podemos ignorar", ahondaron las y los diputados.
Durante la inauguración del Hospital General Regional No. 2, en Ciudad Juárez, Chihuahua, en donde también anunció la creación de 12 Centros de Educación y Cuidado Infantil (CECI), adelantó que "en febrero de 2025 el Congreso legislará sobre la prohibición de sembrar maíz genéticamente modificado en territorio nacional".
El objetivo de esta reforma, dijo, es "proteger la biodiversidad del país". Las declaraciones de la Presidenta mexicana tuvieron lugar un día después de la resolución del Panel del T-MEC, del que forman parte México, Estados Unidos y Canadá, "sobre las medidas relacionadas con el maíz genéticamente modificado".
El anuncio de la iniciativa de la mandataria federal fue respaldado por las diputadas y los diputados federales de Morena, quienes el lunes 23 de diciembre, a través de un comunicado, expresaron su apoyo en el tema del maíz transgénico.
En su misiva, las y los legisladores morenistas destacaron que tras seguir el proceso de prohibición de los maíces transgénicos, que inició con el entonces Presidente Andrés Manuel López Obrador, ahora buscan "fortalecer el marco legal y administrativo, apoyándonos en bases técnicas, científicas y culturales plenamente legítimas", que sustenten tal bloqueo.
La determinación de las diputadas y los diputados morenistas tiene lugar tras la resolución que dio el pasado 20 de diciembre un Panel del T-MEC, en la que declaró inviable el decreto de prohibición del maíz transgénico que el exmandatario federal emitió en febrero de 2023.
"Aunque es importante destacar que esta decisión [del Panel del T-MEC] no se basó en el contenido sustantivo del mismo [decreto]. Ante esta resolución, se instó al Gobierno mexicano a perfeccionar los procedimientos administrativos necesarios para sustentar dicha medida", explicaron las y los legisladores.
El daño del maíz transgénico en México
México importó maíz genéticamente modificado en 1994, con el primer Tratado de Libre Comercio (TLC), debido a que éste estableció que el maíz de bajo precio proveniente de Estados Unidos, también conocido como transgénico, estaba libre de aranceles, y aunque nuestro país no estaba obligado a adquirir este producto, lo hacía debido a los pecios bajos que el mismo mantenía.
Fue hasta el Gobierno encabezado por Andrés Manuel López Obrador, en 2023, cuando se prohibió oficialmente la entrada de maíz transgénico para consumo humano en México, con el objetivo, argumentó, de fomentar la prácticas sostenibles y adecuadas, mismas que permitan la producción de alimentos agrícolas seguros para la salud y que a su vez promuevan la diversidad biocultural, así como la conservación del medio ambiente.
Y es que el Gobierno de México, país que cuenta con más de 55 variedades de maíz, ha insistido en que el maíz genéticamente modificado representa un riesgo para la salud de las personas, así como para la gran diversidad de este alimento, ya que el maíz transgénico podría contaminar genéticamente a las especies nativas, debido a que se sabe que el maíz estadounidense modificado, tiene la capacidad de invadir a las especies mexicanas.
Además, el maíz transgénico ha sido modificado para tolerar las plagas, pero “genera toxinas, cristales, que se mantienen aún en el grano que se consume”, sostiene el Gobierno mexicano. El grano amarillo importado en las siembras mexicanas poliniza los granos nativos y los contamina.
“El maíz transgénico, es aquel al que se le incorporó ungen para resistir la aplicación de glifosato, y/o un gen para tolerancia a plagas y el maíz transgénico resistente a glifosato no se afecta con la aplicación del herbicida, lo que produce un abuso de aplicaciones excesivas”, explicó el Gobierno de México en un comunicado que publicó el 13 de octubre de 2023.
Respecto al glifosato, el mismo comunicado explica que es “el herbicida más usado en todo el mundo”, ya que se aplica en los campos de cultivo para eliminar de manera total a la denominada “maleza, incluyendo a quelites y verdolagas”. Además, se subrayó que la exposición a este herbicida se asocia “con graves riesgos a la salud, contamina el aire, suelo y agua”.
“Tras revisar cerca de mil estudios científicos, en 2015, la Organización Mundial de la Salud clasificó a este herbicida como probable cancerígeno para humanos. La contaminación con glifosato en el campo y las aguas se relaciona con daños a peces, anfibios, reptiles, aves y mamíferos, así como la muerte de insectos benéficos como las abejas”, reiteró el Gobierno de México.
Se ha comprobado plenamente el uso de glifosato en los cultivos de maíz transgénico, lo cual “expone a graves riesgos la salud humana y la preservación del ambiente”. Incluso se identificó que el uso de ese herbicida en Estados Unidos y Canadá redujo la presencia de algodoncillo, un refugio natural para la mariposa monarca, lo que dificulta la sobrevivencia de esta especie durante su recorrido a México.
Este 12 de enero, durante su informe de los 100 días de mandato, la Presidenta Sheinbaum Pardo reiteró que su Gobierno presentará una iniciativa constitucional con la que se busca prohibir la siembra de maíz transgénico en México de manera definitiva. Detalló que será este mes de enero cuando presente su propuesta ante el Congreso de la Unión.
“En este mes presentaremos al Congreso la iniciativa constitucional para prohibir de manera definitiva la siembra de maíz transgénico en México. Se trata de proteger la biodiversidad y la salud. Con la participación de 60 mil productores en mil 305 asambleas y talleres, formulamos ya 155 proyectos territoriales del programa Cosechando Soberanía, para aumentar la producción de maíz, frijol, arroz, verduras, café, cacao y miel”, destacó la mandataria federal.
– Con información de Blanca Juárez
