Claudia Sheinbaum lanza "Sí al desarme, sí a la paz", un programa que busca reducir armas, fomentar justicia social y transformar el entorno infantil en México.
Ciudad de México, 10 de enero (SinEmbargo).- Desde la Basílica de Guadalupe, la Presidenta Claudia Sheinbaum dio inicio al programa “Sí al desarme, sí a la paz”, una iniciativa que busca eliminar armas de los hogares mexicanos.
Este programa permite que los ciudadanos entreguen armas de fuego de forma anónima a cambio de una compensación económica.
Según Sheinbaum, se busca evitar que las armas en los hogares representen un riesgo para la vida o la integridad de las personas.
“La idea es que ningún niño o niña tenga un juguete que se relacione con armas”, aseguró la mandataria.
Como parte del programa, se intercambiarán juguetes bélicos por juguetes educativos, fomentando una cultura de paz en las nuevas generaciones.
Hoy tuve el privilegio de acompañar a la Presidenta🇲🇽, Claudia Sheinbaum (@Claudiashein), y al Secretario @OHarfuch, en la Basílica de Guadalupe para arrancar con la estrategia de desarme.
Esta estrategia es esencial en la Prevención de las Violencias, ya que su propósito es… pic.twitter.com/eZ9EyZmgQi
— Esthela Damián (@esthela_damian) January 10, 2025
Sheinbaum destacó que esta acción forma parte de la atención a las causas, el primero de los cuatro ejes de la Estrategia Nacional de Seguridad. Los otros ejes incluyen el fortalecimiento de la Guardia Nacional, la inteligencia y la coordinación con los estados.
Rosa Icela Rodríguez, Secretaria de Gobernación, detalló que el programa arrancará en iglesias de la Ciudad de México y se extenderá a municipios prioritarios de Baja California, Estado de México, Guanajuato, Guerrero y Tabasco.
“El objetivo es evitar niñas o niños heridos, familias destruidas y conflictos que se agraven por el uso de armas”, declaró Rodríguez, enfatizando la importancia de prevenir tragedias derivadas de la violencia.
La funcionaria recordó que las armas de fuego no resuelven problemas y generan consecuencias irreparables. “No queremos balas perdidas ni vidas truncadas por conflictos domésticos”, añadió.
Además, el programa busca educar a la ciudadanía sobre los riesgos de poseer armas y transformar la percepción social en torno a la violencia. Las autoridades consideran esta estrategia una herramienta clave para fortalecer el tejido social.
Sheinbaum afirmó que esta iniciativa es un ejemplo de cómo el Gobierno trabaja en acciones integrales para garantizar la paz. “Este programa va a hacer historia al enseñar que en México construimos justicia y paz”, enfatizó.
Por otro lado, el intercambio de armas se realizará sin investigación previa, garantizando confidencialidad para incentivar la participación. Las armas recolectadas serán destruidas para evitar que vuelvan a circular.
“El enfoque está en proteger a las familias mexicanas y garantizar un futuro de oportunidades para los más pequeños”, señaló Sheinbaum, insistiendo en que este proyecto es parte de un esfuerzo más amplio por erradicar la violencia en el país.
La entrega de juguetes educativos busca eliminar símbolos de violencia en la infancia y promover el desarrollo integral de niños y niñas. Según Sheinbaum, este cambio simbólico ayudará a construir una sociedad con valores pacíficos.
En su intervención, Rodríguez subrayó que la implementación inicial en iglesias busca generar confianza en comunidades clave. “Es una señal clara de que queremos llegar a todos los rincones”, afirmó.
El programa también incluye campañas de sensibilización sobre el impacto negativo de las armas en el entorno familiar y comunitario. Las autoridades esperan un impacto positivo en las regiones con mayor incidencia de violencia.
Sheinbaum señaló que la paz es un compromiso colectivo que requiere acciones desde el hogar hasta las políticas públicas. “Transformar nuestra sociedad es posible cuando trabajamos juntos”, aseguró.
El programa busca replicar experiencias exitosas de desarme en otras regiones del mundo, adaptadas al contexto mexicano. Las autoridades consideran que la educación y la sensibilización son pilares esenciales de esta estrategia.
“Con cada arma destruida, reducimos el riesgo de tragedias y fortalecemos nuestra capacidad para vivir en armonía”, declaró Sheinbaum al finalizar el evento inaugural.