Las exmonjas clarisas de Belorado relacionaron lo ocurrido en el convento con una presencia maligna que yacía en el convento.
Ciudad de México, 30 de diciembre (SinEmbargo).- En medio de una batalla legal para conservar sus convento, las exmonjas clarisas de Belorado denunciaron a principios de diciembre haber sido testigos de una serie de fenómenos paranormales durante su estadía en el monasterio de Derio, en Bizkaia. Los hechos se remontan al 2017.
De acuerdo con The New York Times, días antes de se presentaran a la primera cita judicial ante la demanda de desahucio presentada por el arzobispo de Burgos, las exmonjas relataron que ante su estancia en el monasterio de Derio comenzaron a enfermar y surgieron disputas entre ellas.
Además, las exmonjas compartieron, que también experimentaron fenómenos extraños durante la noche como ruidos inexplicables, risas desoladoras y objetos que parecían moverse solos.
Lo anterior, llevó a creer a las exmonjas clarisas de Belorado que lo ocurrido en el convento fue provocado por una presencia maligna que yacía en el convento.
No obstante, fuentes cercanas al Arzobispado de Burgos explicaron a la agencia de noticias EFE que se realizaron diversas investigaciones, y concluyeron en que no había certeza de los fenómenos puestos en conocimiento por las exmonjas.
Las exmonjas, que renunciaron a la Iglesia católica para luego lealtad a un movimiento católico tradicionalista llamado sedevacantismo, han presentado estos argumentos a lo largo de una batalla legal debido a que no pueden habitar los inmuebles “pertenecientes a los monasterios que ocupaban”.
