En los estados la inclusión de expriistas, expanistas o figuras que no han sido afines a los principios de la Cuarta Transformación han generado movilizaciones de simpatizantes de Morena inconformes por las decisiones de las dirigencias en la elección de sus candidatos.
Ciudad de México, 12 de diciembre (SinEmbargo).- La incorporación de personajes del PRIAN o figuras polémicas a gobiernos de Morena ha generado reclamos en la dirigencia nacional del partido, que ha reconocido no contar con los mecanismos para llamar a rendir cuentas a funcionarios, emanados de ese partido para explicar estas incorporaciones. Sin embargo, estos casos no solo ocurren en la administración pública. Las propias dirigencias de Morena en cada una de las entidades han permitido que lleguen cuadros de otros partidos para desplazar a los propios fundadores, según han denunciado desde hace tiempo las bases del partido.
Las inconformidades en las entidades han generado reclamos a las dirigencias desde hace un par de años; reclamos que se intensificaron durante las precampañas y campañas del proceso electoral pasado, y que ahora resurgen, pero en esta ocasión hacia la gobernadora de Campeche, Layda Sansores, por sumar a su gobierno al panista Jorge Luis Lavalle Maury, quien aunque fue liberado con un brazalete electrónico, sigue en un proceso penal por el delito de corrupción y está relacionado con Emilio Lozoya, único detenido por la trama Odebrecht.
“Nosotros como partido no nos podemos meter directamente en sus nombramientos [que hace cada mandatario estatal]”, dijo la morenista en respuesta al cuestionamiento sobre la postura del partido respecto al nombramiento de Lavalle Maury. "No podemos actuar hacia un nombramiento que no está en nuestras manos, es un nombramiento de gobierno, no es del partido. Si empezamos a romper esa línea, entonces, el día de mañana tendremos de nueva cuenta el partido de Estado que anteriormente era el PRI. Nosotros tenemos que respetar la autonomía también de las y los gobernantes", enfatizó en entrevista para el programa Café y Noticias, transmitido por el canal de YouTube SinEmbargo Al Aire.
Lo cierto es que los reclamos hacia Morena y sus dirigentes por la incorporación de estas figuras polémicas se han vuelto un “ir y venir”, un asunto cíclico y cada vez más recurrente. Ahora están concentrados en el caso de Jorge Luis Lavalle, pero hace apenas un par de meses ocurrió algo similar con el actor y bailarín Sergio Mayer, quien, después de haberse alejado de la Cuarta Transformación al no lograr su reelección y desatar críticas contra el movimiento, regresó a Morena hasta con premio: con una diputación plurinominal. Otro caso emblemático fue el del exclavadista Rommel Pacheco, en Yucatán, cuya incorporación a Morena incluso provocó conflictos entre los morenistas de esa entidad.
En el caso de Mayer, incluso en ese momento Citlalli Hernández – quien era secretaria de Morena– responsabilizó de esa decisión al entonces líder morenista Mario Delgado, hoy Secretario de Educación. En ese momento, la defensa de dicha decisión por parte de la dirigencia nacional desató una serie de críticas al monero Fisgón.
En algunos estados hay casos similares en los que la inclusión de expriistas, expanistas o figuras que no han sido afines a los principios de la Cuarta Transformación han generado movilizaciones de simpatizantes de Morena inconformes por las decisiones de las dirigencias en la elección de sus candidatos.
Las bases del partido han manifestado su descontento por la aceptación de perfiles “prianistas” o personajes que antes eran críticos de Morena. Durante el proceso electoral y las campañas, en la Ciudad de México y en estados como Chihuahua, Guerrero, Guanajuato, Jalisco, Puebla, Quintana Roo, Tabasco, Yucatán, Sinaloa y Zacatecas, militantes y simpatizantes de Morena realizaron protestas por el reparto de candidaturas a los llamados “chapulines”, perfiles provenientes de otros partidos.
Para las bases morenistas, esto es inconcebible, ya que el movimiento nació para erradicar la vieja política, los corruptos y los políticos que representan al PRI y al PAN. “Ya solo falta que Fox o Salinas de Gortari entren a Morena con puestos”, sentenció desde entonces en una entrevista con SinEmbargo Perla de la Rosa, activista política de izquierda en Chihuahua, simpatizante de la Cuarta Transformación e integrante del Frente Plural en Defensa de Ciudad Juárez, una agrupación que se ha manifestado en contra de las candidaturas y los perfiles prianistas que Morena ha incorporado, y ha protestado contra la reelección del alcalde juarense Cruz Pérez Cuéllar, de extracción panista.
En Durango, al menos dos figuras del PRI incorporadas a Morena desataron críticas: Marina Vitela Rodríguez y Otniel García Navarro, quienes han obtenido cargos como diputada federal y diputado local plurinominal, respectivamente.
En Quintana Roo, la Senadora de Morena, Maricruz Carrillo Orozco, una de las fundadoras del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en ese estado, denunció públicamente en marzo la exclusión de la base y los fundadores del partido de los puestos de elección popular. Según sus declaraciones recogidas por medios locales, la legisladora acusó que estos cargos se otorgaron a personas ajenas que simplemente van cambiando de puesto en puesto sin tener un arraigo real en el partido. En Ciudad Juárez, Chihuahua, persiste el descontento entre los miembros de Morena debido a la reelección de Cruz Pérez Cuéllar, un expansiva que luego emigró a Movimiento Ciudadano, y que después se fue a Morena donde logró ser alcalde.
En Tabasco, la Coordinación Nacional de Fundadores, Militantes y Simpatizantes de Morena (Conafumsm) lideró diversas manifestaciones y protestas denunciando la sistemática exclusión de las bases en la selección de candidatos del partido en el proceso electoral pasado. En Guerrero, simpatizantes de Morena encabezados por Silvestre Arizmendi, Zeferino Gómez y Antonio Helguera acudieron a finales de febrero a la sede del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) para manifestar su inconformidad por la designación de candidatos en los pasados comicios. En Puebla, al menos una veintena de municipios también expresaron en marzo su descontento por la presunta imposición de candidatos para las alcaldías en municipios como Tepeaca, Ajalpan, Huehuetla, Zacatlán, Cuautempan, Tepetzintla, Ahuehuetitla, Nealtican, Cuapiaxtla, Chietla, Hueytlalpan, Atlixco, Atempan, Zaragoza, Teziutlán, Acatzingo, San Pedro Cholula, Tepeaca, Tlacotepec de Benito Juárez, Izúcar de Matamoros y Huauchinango.
En Veracruz, María del Carmen Pinete Vargas, quien militó en el PRI desde 1975 hasta 2021, cuando se cambió al PVEM, fue la candidata de la Alianza Sigamos Haciendo Historia en el distrito 1 en Pánuco y ganó con al menos el 59.47 por ciento de los votos. Rosa María Hernández Espejo, exmilitante del PRD y periodista hasta 2018, compitió por Morena en el distrito 12 en el Puerto de Veracruz y ganó con el 56.25 por ciento de los votos, equivalentes a 93,781.
Otros candidatos con pasado priista incluyen a Nancy Sánchez Arredondo, exdirigente del PRI en Baja California (1989-2019), Diputada electa por el distrito 2 en Mexicali; y Olga Juliana Elizondo Guerra, excandidata por el distrito 7 en Reynosa, quien ha sido parte de Morena, PVEM y PT.
BIENVENIDOS, MIENTRAS CUMPLAN DECÁLOGO: MORENA
Camila Martínez, Secretaria General de Comunicación Social de Morena, cuestionada sobre la llegada de perfiles externos a Morena, aludió que lejos de cerrarse las puertas, el movimiento apuesta por la renovación de las conciencias.
“Creo que Morena tiene que apostar por una revolución de las conciencias [...]que las personas que han participado a través de otras fuerzas políticas tengan una reflexión profunda de las carencias, las faltas de pensiones, cómo esos otros partidos políticos no han sabido solucionar buena parte de los problemas de las personas y se comprometan con ciertos principios irrenunciables que tiene Morena”, expresó en entrevista con SinEmbargo.
Martínez detalló que durante las giras se está promoviendo un decálogo que fija 10 principios que deben cumplir las autoridades del partido, entre los cuales, destacan: mantener una constante vinculación con el pueblo, evitar la privatización de servicios básicos, garantizar que no se utilice la policía para reprimir protestas y ejercer el poder con humildad y eficiencia en el uso de los recursos públicos.
"Y bueno, estos perfiles que quizá en algún momento hayan estado en otro partido político , que cumplan en esta parte. No nosotros no nos oponemos", puntualizó Martínez.
¿Y QUIÉN DESIGNA A LOS DIRIGENTES ESTATALES?
Las decisiones del partido, principalmente de incorporación de figuras polémicas, también pone ahora en la mira a quienes están a cargo de las dirigencias estatales y sus nombramientos. Recientemente, en los últimos dos meses, octubre y noviembre, el partido realizó renovaciones en los Comités Estatales de Morena para cubrir las 91 vacantes que dejó el proceso electoral, entre ellas, los cargos del Presidente de Comité Estatal en 16 estados, así como 75 secretarias.
Tras el pasado proceso electoral, 2023-2024, varios integrantes de los comités ejecutivos estatales fueron electos o asumieron cargos en las administraciones federal, estatal o municipal, lo cual, conllevó al partido a solicitar que definieran su permanencia, explicó Camila Martínez Secretaria General de Comunicación Social del partido.
"Fíjate que nuestro Estatuto dice que uno no puede tener una responsabilidad en los comités ejecutivos, si además tiene un cargo de representación. Entonces, no puede ser un diputado y al mismo tiempo ser secretario general del comité en Yucatán. O no puede ser senador y al mismo tiempo … (dirigente)”, explicó la Secretaría de Comunicación.
El proceso para elegir a los nuevos integrantes, de acuerdo con la funcionaria partidista, se realizó mediante reuniones internas de las y los consejeros estatales, quienes fueron electos por la militancia.
“Lo que sucedió, y que logramos hacer en tiempo récord, es que en los 32 estados de la República hubo reuniones de las y los consejeros, quienes finalmente tienen una representación porque fueron electos por la gente. Se reunieron, y ahí mismo surgieron los perfiles que levantaron la mano y dijeron: `Bueno, a mí me gustaría participar como presidente del comité estatal”, etcétera´ Y por mayoría de votación fue que se eligió a estos perfiles”, dijo.
En la dinámica política de las instituciones partidistas, siempre existen grupos y corrientes que respaldan a distintos actores, ya sea funcionarios federales, dirigencias nacionales o los gobernadores en turno, quienes, en teoría, poseen un mayor peso político en las decisiones internas del partido.
Al respecto, sobre la posible influencia de los gobernadores de Morena en estas decisiones, Martínez aseguró que las elecciones fueron estrictamente internas.
“No, pues son elecciones internas de nuestro partido. Algunos de los gobernadores y gobernadoras, como fue, por ejemplo, en el caso de la Presidenta de la República, lo que hacen es tomar licencia del partido. Lo vimos, por ejemplo, en el Congreso Nacional en el que se renovó el Comité Ejecutivo Nacional. Claudia compartió una carta donde habló de un agradecimiento a Morena por el trabajo que había podido construir ahí. Finalmente, fue una fundadora que creó, desde las calles nuestro movimiento, pero que ahora reconocía la importancia de gobernar para todos”, detalló.
