Los otros sectores derrotados este año de elecciones fueron los que antes se habían beneficiado del régimen del PRI-PAN, es decir, el duopolio televisivo, la élite intelectual de derecha y encuestadoras patito.
Ciudad de México, 29 de diciembre (SinEmbargo).– En este año electoral no solo la alianza del PRI y el PAN obtuvo pésimos resultados en las urnas. El annus horribilis le pegó a otros sectores que en los gobiernos de estos partidos se habían beneficiado de ese régimen. Es el ejemplo del duopolio televisivo, la élite intelectual de derecha que esta vez arropó a la candidata Xóchitl Gálvez y hasta las encuestadoras patito.
Después del día de la votación el 2 de junio, cuando el proyecto de la Presidenta Claudia Sheinbaum fue respaldado de manera histórica por casi 36 millones de ciudadanos, la resaca no solo la padeció el bloque opositor, cuyos dirigentes Marko Cortés y Alejandro Moreno optaron por separarse, o peor, con el PRD perdiendo el registro que alguna vez heredó del Partido Comunista.
También, ante el nuevo contexto político, comenzaron reajustes en los medios tradicionales como en Televisa y El Universal. Desde la trinchera de nativos digitales y youtuberos tuvo más presencia "Atypical TV" con el publicista Carlos Alazraki, cuya reacción por la victoria electoral de Sheinbaum fue fuente de burlas en las redes sociales. Ese mismo programa en YouTube fue el espacio donde el dirigente panista Marko Cortés y el calderonista Javier Lozano se pelearon por el efecto de Genaro García Luna en los resultados electorales de Acción Nacional.
"Algo que ha influido en cómo los medios han cambiado en este país es que por lo general ya no reciben tanta publicidad como lo era antes. En el siglo XX prácticamente todos los periódicos y las revistas, excepto unos cuantos, vivían de la publicidad gubernamental y no se diga de las cadenas privadas de televisión. Por una parte hacía que fueran favorables al Gobierno, pero también incluían voces opositoras y se daba el caso paradójico de que en México, durante gran parte del siglo XX, principios del XXI, el Estado subsidiaba a una gran parte de los intelectuales. Es decir, ya sea porque sostenía con publicidad a los medios donde trabajaban o porque, al ser miembros de las universidades y academia, al trabajar en instituciones públicas recibían un salario de parte del Gobierno. Ahora eso ha cambiado porque los medios tradicionales ya no tienen la fuerza que tenían antes. Aunque aún son sectores a tomar en cuenta, vemos a TV Azteca abiertamente de adversarios y el dueño no quiere pagar sus impuestos. Luego Televisa ya no es lo que era antes, ha disminuido su audiencia y su propiedad ha cambiado de manos, ya no está la familia Azcárraga", dijo el historiador de la UAM, Harim Gutiérrez.
El académico Gutiérrez comentó que los ajustes en los medios tradicionales también se derivan de cómo la conferencia matutina –primero con López Obrador y ahora con Sheinbaum– impuso agenda, permitió que surgieran diversos youtuberos afines a la 4T e incluso dio publicidad a nativos opositores como Latinus conducido por Carlos Loret de Mola.
"La mañanera logró tener un impacto significativo en la comunicación porque logró que las primeras noticias se centraran en lo que decía el Presidente y que los medios tradicionales se enfocaran en eso, siempre estaba en el centro de los medios de comunicación. Eso por un lado favoreció a los nativos digitales y también le dio una influencia muy grande a medios nuevos, individuos que son afines a la 4T. Pero, paradójicamente, también sirvió para hacerle publicidad gratuita a sectores de la oposición. López Obrador, al ocuparse de sus adversarios, lograba hacerlos más famosos, hablaba mucho y muy mal de Loret de Mola, pero era finalmente una promoción para él y para Latinus; los legitimaba como adversarios y como un factor importante en los medios", dijo.
Asimismo, el Canal Once de la televisión pública canceló el programa "Primer Plano" con las participaciones de Sergio Aguayo o María Amparo Casar, cofundadora junto con Claudio X González de Mexicanos contra la Corrupción y señalada este año por defraudar a Pemex por el cobro irregular de una pensión.
De hecho, el director de la revista Nexos y cercano al salinismo, Héctor Aguilar Camín, dijo a SinEmbargo que sentía nostalgia por los "apapachos" recibidos en gobiernos priistas y panistas pasados. En su autobiografía, su amigo Jorge Castañeda, Canciller con Vicente Fox, compartió que Carlos Salinas de Gortari, Aguilar Camín y él eran íntimos en los noventa.
"En un par de ocasiones disfruté largos ratos con Fuentes y Salinas, una vez en Nueva York, el año siguiente en compañía también de García Márquez, de Ángeles Mastretta y Héctor Aguilar Camín, de donde salimos arrastrándonos este último y yo. Otra vez, nos reunimos en Londres con Roberto Mangabeira, amigo norteamericano brasileño de Salinas y mío y profesor de derecho en Harvard", escribió Castañeda.
Los "alcahuetes" de la oligarquía
En vísperas del cierre de las campañas presidenciales, más de 250 integrantes de la élite académica y científica de derecha se reunieron en el Palacio de Minería para llamar a votar por Xóchitl Gálvez, la empresaria y candidata del PRI-PAN-PRD, coalición hoy desintegrada e impulsada por Claudio X. González.
En una firma de un desplegado y en una fotografía con la señal de "X" se vio posar a los nostálgicos del apapacho: Enrique Krauze, Héctor Aguilar Camín, Jorge Castañeda, José Narro, Ángeles Mastretta, Roger Bartra, Arnoldo Kraus, Federico Reyes Heroles, Paco Calderón, Rafael Pérez Gay, entre otros abajofirmantes.
“Hemos decidido manifestarnos públicamente debido a que el Gobierno de López Obrador y su partido pretenden extender la deriva autoritaria durante el próximo sexenio, lo que significa una grave amenaza para la democracia”, planteó el antropólogo Roger Bartra, quien coordinó el desplegado.
En respuesta, el aún Presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó desde Palacio Nacional: "Lo pseudointelectuales también actúan como alcahuetes de la oligarquía corrupta. Esos legitiman, con toda una retacería de pseudoteorías, el porqué tiene que mantenerse el régimen”.
Respecto al señalamiento de que su Gobierno era autoritario y que se continuaría la militarización con la administración de Sheinbaum, agregó: “Se atreven a hablar de libertades, acuden a invocar la democracia, y todos ellos –o la mayoría, también, para no generalizar– al servicio del régimen, vendidos o alquilados, vividores al servicio del régimen de opresión; aparentemente académicos, estudiosos, pero nunca defienden al pueblo, son vasallos, son empleados serviles de la oligarquía en los países”.
El historiador Harim Gutiérrez comentó que ese grupo se mueve en un "círculo muy pequeño", por lo que su influencia social es mínima. Además, dado que la mayoría es adulto mayor, una parte todavía se guía por una "lógica de la Guerra fría y de las épocas del viejo PRI" por lo que, más allá de la autocrítica, culpan a la ciudadanía por no haber votado por Gálvez.
"Este grupo de académicos e intelectuales opuestos a la 4T, gente que encabezaba la firma de estos desplegados, a esas alturas de las elecciones y a estas alturas del presente, en gran parte ya solamente hablan para sí mismos y para un círculo que los está apoyando desde hace tiempo. Es decir, se dedican a predicar para adentro, para un consumo interno. No veo que ese desplegado haya movido de manera significativa el voto a favor de Xóchitl Gálvez. Un problema que tuvieron estos grupos es que se mueven en un círculo pequeño, en sus instituciones, en medios de comunicación donde trabajan, pero su impacto en el público en general no es muy grande y no son un factor que incline la balanza en unas elecciones. Algunos de ellos fueron beneficiados con contratos muy convenientes por parte de gobiernos anteriores, pero de todas maneras han logrado seguir", aseveró el académico de la UAM.
A la par de este grupo que habla para sí mismo, la empresa Massive Caller –del expanista Carlos Campo Riojas– no reparó en difundir seudo encuestas para aparentar que iba a la delantera la candidata de la derecha, Xóchitl Gálvez, aunque sus resultados levantados vía Whatsapp contrastaran con otras casas encuestadoras como Enkoll o incluso la de Reforma, cuyo director editorial hasta octubre 2023, Juan Pardinas, estuvo abiertamente en la campaña de la Senadora. Otra encuestadora patito difundida por la panista Kenia López Rabadán, vocera de la campaña de Xóchitl, fue México Elige.
"Hay algunas encuestadoras que han demostrado ser bastante serias y otras que solamente son propagandistas y que arreglan sus resultados para el mejor postor. El apunte que haría es que ahora que Morena es el partido dominante, y que no ha querido organizar elecciones internas para sus candidaturas y se fía en las encuestadoras, me parece algo inquietante porque si basta una medición de popularidad y no es necesario una elección interna, de alguna manera le puede dar más poder a las casas encuestadoras", dijo el historiador.