Luego de su intento de imponer la Ley marcial en Corea del Sur, el Presidente Yoon Suk Yeol ofreció una disculpa pública por el acto, en medio de un proceso que podría culminar con su destitución.
Por Kim Tong-Hyung y Hyung-Jin Kim
SEÚL, Corea del Sur (AP).- El Presidente de Corea del Sur se disculpó el sábado por la ansiedad pública causada por su breve intento de imponer la Ley marcial a principios de esta semana, horas antes de una votación parlamentaria sobre su destitución.
Yoon dijo en un breve discurso televisado el sábado por la mañana que no eludirá la responsabilidad legal o política por la declaración y prometió no hacer otro intento de imponerla. Dijo que dejaría que su partido político conservador trace un rumbo a través de la agitación política del país, “incluidos los asuntos relacionados con mi mandato”.
Los legisladores surcoreanos votarán más tarde el sábado sobre la acusación del Presidente Yoon Suk Yeol por su breve intento de imponer la Ley marcial, mientras aumentan las protestas en todo el país pidiendo su destitución.
No estaba claro de inmediato si la moción presentada por los legisladores de la oposición obtendría la mayoría de dos tercios necesaria para la acusación de Yoon. Pero parecía más probable después de que el líder del propio partido de Yoon pidiera el viernes la suspensión de sus poderes constitucionales, describiéndolo como no apto para ejercer el cargo y capaz de tomar medidas más extremas, incluidos nuevos intentos de imponer la Ley marcial.
Para destituir a Yoon se necesitaría el apoyo de 200 de los 300 miembros de la Asamblea Nacional. Los partidos de la oposición que presentaron conjuntamente la moción de destitución tienen 192 escaños en conjunto.
Eso significa que necesitarían al menos ocho votos del Partido del Poder Popular de Yoon. El miércoles, 18 miembros del PPP se unieron a una votación que canceló por unanimidad la Ley marcial por 190 a 0 menos de tres horas después de que Yoon declarara la medida en televisión, llamando al Parlamento controlado por la oposición una "cueva de criminales" que empantana los asuntos estatales. La votación se llevó a cabo mientras cientos de tropas fuertemente armadas rodeaban la Asamblea Nacional en un intento de interrumpir la votación y posiblemente detener a políticos clave.
El Parlamento dijo el sábado que se reuniría a las 17:00 horas. Primero votará sobre un proyecto de Ley que designa a un Fiscal especial para investigar las acusaciones de tráfico de influencias en torno a la esposa de Yoon, y luego sobre la acusación de Yoon.
La agitación resultante de la extraña y mal pensada maniobra de Yoon ha paralizado la política surcoreana y ha provocado alarma entre los principales socios diplomáticos, incluido el vecino Japón y el principal aliado de Seúl, Estados Unidos, mientras una de las democracias más fuertes de Asia se enfrenta a una crisis política que podría derrocar a su líder.
Los legisladores de la oposición afirman que la declaración de Ley marcial de Yoon equivalió a un autogolpe de Estado y redactaron la moción de acusación en torno a cargos de rebelión.
El PPP decidió oponerse a la acusación en una reunión de legisladores, a pesar de las súplicas de su líder Han Dong-hun, que no es legislador y no tiene voto.
Después de una reunión del partido el viernes, Han destacó la necesidad de suspender rápidamente los deberes y el poder presidencial de Yoon, diciendo que "podría poner potencialmente a la República de Corea y a sus ciudadanos en gran peligro".
Han dijo que había recibido información de que durante el breve período de la Ley marcial, Yoon ordenó al comandante de contrainteligencia de defensa del país que arrestara y detuviera a políticos clave no especificados basándose en acusaciones de "actividades antiestatales".
Hong Jang-won, primer subdirector del Servicio Nacional de Inteligencia de Corea del Sur, dijo más tarde a los legisladores en una reunión informativa a puerta cerrada que Yoon llamó después de imponer la Ley marcial y le ordenó que ayudara a la unidad de contrainteligencia de defensa a detener a políticos clave. Los políticos afectados incluían a Han, el líder de la oposición Lee Jae-myung y el presidente de la Asamblea Nacional Woo Won Shik, según Kim Byung-kee, uno de los legisladores que asistieron a la reunión.
El Ministerio de Defensa dijo que había suspendido al comandante de contrainteligencia de defensa, Yeo In-hyung, quien, según Han, había recibido órdenes de Yoon de detener a los políticos. El Ministerio también suspendió a Lee Jin-woo, comandante del comando de defensa de la capital, y a Kwak Jong-geun, comandante del comando de guerra especial, por su participación en la aplicación de la Ley marcial.
El exministro de Defensa Kim Yong Hyun, acusado de recomendar a Yoon que impusiera la Ley marcial, ha sido sometido a una prohibición de viajar y se enfrenta a una investigación de los fiscales por cargos de rebelión.
El Viceministro de Defensa Kim Seon Ho, que se convirtió en ministro de Defensa en funciones después de que Yoon aceptara la dimisión de Kim Yong Hyun el jueves, ha testificado ante el Parlamento que fue Kim Yong Hyun quien ordenó el despliegue de tropas en la Asamblea Nacional después de que Yoon impusiera la Ley marcial.
