El Tren de Aragua, de acuerdo con un boletín del Departamento de Estado en Estados Unidos, es una organización delictiva transnacional que comenzó como una banda en la cárcel de Tocorón, en el estado de Aragua, Venezuela. En los últimos seis años, el líder del Tren de Aragua, Niño Guerrero, ha expandido la red delictiva del grupo por toda Sudamérica y recientemente se ha extendido hacia el norte, Centroamérica y Estados Unidos.
Ciudad de México, 8 de diciembre (SinEmbargo).- La pandilla venezolana Tren de Aragua se ha puesto en la mira en México y en parte de sus autoridades debido a la creciente expansión de este grupo delictivo trasnacional que se ha vuelto un peligro latente para los migrantes, ya que uno de sus principales crímenes es la trata de personas, actividad que le ha permitido extender su influencia por el continente.
El pasado 5 de diciembre, durante un operativo en un domicilio de la Alcaldía Gustavo A. Madero, fueron detenidas cinco personas extranjeras. La acción, que contó con la participación de la Secretaría de Marina (Semar) y la Fiscalía General de la República (FGR), se llevó a cabo en cumplimiento de una orden de cateo vinculada a investigaciones sobre narcomenudeo y trata de personas con fines de explotación sexual.
Ese mismo día, las autoridades informaron que los detenidos –identificados como Dayerlin Johana Aristiguetta Herrera, de 26 años; Leonardo Abrahan Iriarte Echarry, de 22 años; Deivis Daniel Dicuro Acosta, de 23 años; y Christopher Alexander Sánchez Hernández, de 20 años– eran de nacionalidad venezolana e integrantes del Tren de Aragua.
Cinco personas extranjeras de un grupo dedicado al narcomenudeo y trata de personas con fines de explotación sexual, fueron detenidos en coordinación con autoridades de la Ciudad de México, @SSC_CDMX y @FiscaliaCDMX en @TuAlcaldiaGAM, por elementos de @SEDENAmx , @SEMAR_mx ,… pic.twitter.com/vYBsUzZEy4
— Omar H Garcia Harfuch (@OHarfuch) December 6, 2024
Entre los detenidos se encuentra Manuel X, señalado como "Morgan y/o Kilin Morran y/o Morant", presunto líder de una célula del Tren de Aragua y que también se le vincula como autor material del feminicidio de dos venezolanas ocurrido en julio de este año en la Alcaldía Tlalpan, un caso que causó gran impacto a nivel nacional al revelar una red de esclavitud sexual.
La explotación sexual es una de las modalidades más frecuentes en el delito de trata de personas en la Ciudad de México, dijo en una entrevista a SinEmbargo, ante ese caso, Salvador Guerrero Chiprés, presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México. “En el caso concreto de las modalidades de trata de personas, sí destaca la explotación sexual y destaca la explotación a las mujeres”.
Un grupo criminal en expansión
El Tren de Aragua, de acuerdo con un boletín del Departamento de Estado de Estados Unidos, es una organización delictiva transnacional que comenzó como una banda en la cárcel de Tocorón, en el estado de Aragua, Venezuela. En los últimos seis años, el líder del Tren de Aragua, Niño Guerrero, ha expandido la red delictiva del grupo por toda Sudamérica y recientemente se ha extendido hacia el norte, Centroamérica y Estados Unidos.
“Si el Tren de Aragua fuera literalmente un ferrocarril, Tocorón sería su estación central, la plataforma desde donde la megabanda controla la salida y la llegada de miles de presos y gestiona sus actividades delictivas en Venezuela, Colombia, Brasil, Perú, Ecuador, Bolivia, Chile y posiblemente Estados Unidos”, describe la periodista de investigación, consultora en materia de seguridad y crimen organizado, Ronna Rísquez, en su libro El Tren de Aragua: la banda que revolucionó el crimen organizado en América Latina.
Rísquez, una de las principales expertas en grupos armados y gobernanzas criminales en Venezuela, señala que en la cúpula del Tren de Aragua se encuentra Héctor Rusthenford Guerrero Flores, alias "Niño Guerrero". El pasado 11 de junio, el Departamento de Estado, en coordinación con el Departamento de Justicia (DOJ), ofreció una recompensa de 5 millones de dólares por información que conduzca a su captura o condena en cualquier país.
Junto a él, el Departamento de Estado identifica como líderes de este grupo delictivo a Yohan José Romero, alias "Johan Petrica", por quien ofrecen hasta 4 millones de dólares, y a Giovanny San Vicente, conocido como "Giovanny", "Viejo Viejo" o "El Viejo", con una recompensa de hasta 3 millones de dólares.
En México, la incursión de la pandilla El Tren de Aragua ha estado relacionada principalmente con delitos de trata de personas, secuestro y extorsión, de acuerdo con la información que han dado a conocer autoridades mexicanas y estadounidenses.
La Ciudad de México y Chihuahua son dos entidades en las que se ha identificado mayormente su incursión, así como otras ciudades de la frontera sur. Se estima que esta pandilla empezó a incursionar en el país frente a la movilización masiva de migrantes, es decir, de las caravanas que han disparado la migración en el país.
“Los jefes del Tren de Aragua identificaron en la migración venezolana masiva y forzada una mina de oportunidades de negocio. Por eso no dudaron en seguir los pasos de los compatriotas que huían de la crisis económica y social que los dejó sin empleo y sin comida. […] La organización criminal comenzó a instalar células en los países que los venezolanos escogieron como refugios, pero no en cualquier ciudad de esos países. Se instalaron en las zonas fronterizas, justamente por donde tienen que pasar los venezolanos en proceso de movilidad”, explica Rísquez en su libro.
La trata de personas se convirtió en uno de los delitos clave para la expansión internacional del Tren de Aragua, de acuerdo con la periodista venezolana, quien explica que el modus operandi de esa organización criminal consiste en reclutar, principalmente, a mujeres venezolanas mayores de 18 años en su país de origen. A estas mujeres se les ofrece trasladarlas a otros países para trabajar como sexoservidoras, con la promesa de que recuperarán su libertad una vez que paguen la inversión realizada por el grupo criminal para su viaje. Sin embargo, “una vez que llegan al país de destino, los líderes del Tren de Aragua incumplen los acuerdos y obligan a las mujeres –bajo amenazas de muerte– a seguir trabajando para ellos”, explica la periodista en su libro.
La investigación de Rísquez también revela que las víctimas son explotadas sin recibir pago o con pagos mínimos, permanecen en cautiverio y la deuda inicial se vuelve interminable. Además, se detalla que una de las estrategias de reclutamiento utilizadas por el Tren de Aragua en algunas regiones de Venezuela es a través de concursos de belleza.
El Tren de Aragua comenzó a operar en México a través de los estados de Chiapas y Quintana Roo, de acuerdo con recientes declaraciones del secretario de Seguridad Pública estatal de Chihuahua, Gilberto Lozoya. La incursión de esa banda delictiva en el país y su expansión a ciudades de la frontera ha generado que, precisamente en el estado de Chihuahua, hayan establecido un grupo para dar seguimiento especial a dicha agrupación, según las declaraciones de su titular el pasado 28 de octubre.
“Como ustedes saben, la Secretaría de Seguridad Pública tiene un área, una Subsecretaría de Inteligencia, que ha sido la principal responsable de generar la información respecto a la operación de esta pandilla a nivel local y la trazabilidad que tenemos de los integrantes de esta pandilla por otros puntos de interés. Esto nos ha permitido identificar la forma de operar del Tren de Aragua aquí. Este grupo, que se ha especializado en esto, forma parte del equipo especializado en atención y control a la delincuencia organizada por parte de la Secretaría de Seguridad Pública. Uno de sus objetivos o metas principales es el seguimiento al Tren de Aragua”, explicó el funcionario.
Se estiman que la presencia de esta pandilla en el país tiene al menos dos años, según las autoridades chihuahuense con base en el patrón de conducta de los secuestros y la trata de personas, principalmente de migrantes en la frontera.
“Desde hace cerca de dos años empezamos a señalar la presencia de esta pandilla en el estado, así como su trazabilidad. Sin embargo, no teníamos datos claros y precisos de cómo estaba operando esta pandilla. Hoy tenemos información más precisa de cómo opera desde su ingreso al país, a través del estado de Chiapas y del estado de Quintana Roo. También sabemos cómo realizan sus traslados, sobre todo cómo se están involucrando con la delincuencia organizada en todos estos puntos, incluyendo aquí en el estado de Chihuahua, principalmente en Ciudad Juárez”, destacó el funcionario en esa conferencia de prensa.
Uno de los principales focos de atención ha sido la implicación de esta pandilla en secuestros y extorsiones a migrantes, especialmente aquellos que forman parte de caravanas o llegan de manera individual. Muchas de las víctimas –a decir de Gilberto Lozoya– han identificado a los agresores con acento venezolano, pues los migrantes, al comunicarse con sus familiares en otros países, señalaron que quienes estaban en contacto con ellos hablaban de la misma manera, lo que ha permitido a las autoridades correlacionar las extorsiones con la operación del Tren de Aragua, que se ha infiltrado en las redes locales de delincuencia organizada.
“Aquí detectamos su presencia cuando comenzamos a registrar una gran cantidad de secuestros y extorsiones a migrantes, tanto de caravanas como de personas que llegaban solas a Ciudad Juárez. Dentro de los testimonios de las víctimas, notamos que quienes se comunicaban con sus familiares en el centro y sur del continente eran personas con el mismo acento que ellos. Es decir, los grupos locales de delincuencia comenzaron a utilizarlos para llevar a cabo estas extorsiones”.
Desde 2018, México había experimentado un aumento sostenido en el número de víctimas de trata, alcanzando un máximo en 2022 con 940 casos. El incremento fue constante durante cinco años, con un aumento significativo entre 2020 y 2021, pasando de 681 a 753 víctimas. En 2019, se registraron 682 casos, frente a los 584 del año anterior. Sin embargo, desde 2023, se ha observado una contención y una ligera disminución en los reportes, con 935 víctimas en todo el año. No obstante, en lo que va de 2024, de enero a octubre, la disminución es más notoria, pues se han reportado 697 casos, lo que representa una reducción del 19 por ciento con respecto al mismo periodo de 2023, cuando se registraron 861 víctimas.
“El secuestro, desaparición y masacres de personas migrantes, algunas con necesidades de protección internacional, en Tamaulipas y otras regiones del país no han cesado en más de una década”, alertaron en un comunicado las organizaciones Fundación para la Justicia, Sin Fronteras e Instituto para las Mujeres en la Migración a inicios de año.
Se mimetizan con cárteles
El Tren de Aragua ha logrado integrarse a las estructuras de los cárteles locales, como el Cártel de Juárez. Los funcionarios de Chihuahua han señalado que, en cuanto a la operación de la pandilla, al igual que en Chile, el Tren de Aragua ha comenzado a mezclarse con la población local, creando una "codependencia" con otros grupos del crimen organizado.
Las autoridades de Chihuahua aseguraron que ese tipo de sinergias con grupos criminales establecidos en la región ha permitido que la pandilla aumente su control y capacidad operativa en el norte de México.
“También observamos cómo se mimetizaban con los mismos cárteles locales para fines de secuestro y trata de personas. Seguimos dando seguimiento a esta situación”, dijo Lozoya.
En la Ciudad de México, se estima que opera principalmente en las alcaldías Tlalpan, Cuauhtémoc y Gustavo A. Madero. Según las investigaciones de autoridades capitalinas, el grupo criminal reclutaba a sus víctimas a través de propuestas laborales fuera de sus países de origen. Les financian cirugías estéticas y, una vez recuperadas, son enviadas a su país destino. Luego, les cobran una comisión para que puedan trabajar como sexoservidoras y también les exigen el pago de los gastos generados por su traslado.
La información de inteligencia de la Secretaría de Seguridad Pública de Chihuahua señala que han detectado la colaboración del Tren de Aragua con Los Bravos de Colombia, un grupo que opera principalmente en la zona centro del país y que está relacionado con una modalidad de secuestro llamada “préstamos gota a gota”. Esta práctica se comenzó a identificar en el centro del país en 2016, pero las autoridades chihuahuenses no descartan que pudiera expandirse al norte de México.
Cuando la ahora presidenta Claudia Sheinbaum fue jefa de gobierno de la Ciudad de México, presentó un informe sobre la existencia de una red de extorsionadores que cobraba “derecho de piso” a comerciantes y pequeños ambulantes, misma que generaba ganancias de hasta 100 millones de pesos a la semana. En ese informe, presentado en enero de 2019, Rosa Icela Rodríguez, quien entonces era secretaria de Gobierno capitalino, expuso que la organización delincuencial estaba compuesta por alrededor de mil 500 personas, mexicanas y de otras nacionalidades, principalmente colombianas, quienes tenían un particular mecanismo de actuación. La funcionaria, ahora secretaria de Gobernación, explicó que esta red delincuencial comenzó a operar en 2015 ofreciendo préstamos de dinero “exprés” con altos intereses a pequeños comerciantes y ambulantes en un esquema conocido como “gota a gota”, que inició en Colombia hace alrededor de una década. Este esquema utiliza el cobro de préstamos y, en caso de que el monto no sea cubierto, los deudores son amedrentados e incluso asaltados por los cobradores, quienes llegan todos los días a bordo de motonetas a exigir el pago.
“Hoy tenemos trazabilidad de lo que ha sucedido con personas relacionadas con el Tren de Aragua tanto en el centro como en el sur del país, de cómo han estado trabajando directamente en Estados Unidos, pero también de cómo se han vinculado con otras pandillas del mismo continente, como la Mara Salvatrucha fuera de El Salvador y el Barrio 18. Estas pandillas operan más en el centro del país, pero ya podemos empezar a ver su presencia aquí, en el norte de México. También han estado vinculándose con la pandilla de Los Bravos de Colombia, quienes trabajan en préstamos ‘gota a gota’. Ellos están directamente relacionados con el Tren de Aragua en el centro del país, pero no descartamos que puedan comenzar a vincularse aquí, en Chihuahua”, dijo el secretario de Seguridad Pública chihuahuense en esa conferencia de prensa del 28 de octubre de 2024.
Una detallada investigación realizada por Insight Crime en octubre de 2023 señala que los informes de la presencia del grupo fuera de Venezuela surgieron en 2018 en Colombia y que, a partir de entonces, ha habido señales de la presencia del Tren de Aragua en los principales destinos de los migrantes venezolanos en la región. “La banda echó raíces en Colombia, Perú y Chile, y han surgido informes de su aparición en Ecuador, Brasil y Bolivia”, detalla la investigación, la cual aclara que “si bien esta expansión quizá comenzó como una manera de aprovechar las oportunidades criminales generadas por la crisis migratoria, ha evolucionado y se volvió más organizada y coordinada a medida que la red se desarrolló”.