El mandatario mexicano aseguró que la decisión fue tomada por Claudia Sheinbaum, postura a la que reiteró su respaldo.
Ciudad de México, 27 de septiembre (SinEmbargo).- El Presidente Andrés Manuel López Obrador criticó esta mañana a su homólogo español, Pedro Sánchez, por insinuar que fue el mandatario mexicano quien determinó que el rey Felipe VI no fuera invitado a la toma de protesta de Claudia Sheinbaum Pardo, hecho que negó rotundamente.
Durante su penúltima conferencia de prensa matutina, el Presidente López Obrador aseguró que el mandatario español está cometiendo una falta de respeto hacia la Presidenta electa.
"Le están faltando al respeto, además y eso lo está haciendo el Presidente de España, a la Presidenta electa [...] está insinuando que fue una decisión que yo tomé, como si la Presidenta de México fuese manipulable, es una falta de respeto adicional", expresó este viernes desde el Salón Tesorería de Palacio Nacional.
López Obrador agregó que la decisión fue tomada por la Presidenta electa, misma postura que reiteró su respaldo, tal y como lo enunció el pasado martes cuando se dio conocer la negativa de invitar al monarca español.
"Se equivocan mucho, ojalá antes de emitir una opinión piensen que en México se está llevando a cabo una transformación [...] porque se está arrancando de raíz la corrupción y las injusticias, los privilegios, el clasismo y el racismo", ha remachado López Obrador, que ha instado a las autoridades españolas a entender que México es "un país independiente, libre y soberano que no es colonia ni tierra de conquista de nadie".
Este jueves salió a la luz un reportaje en el diario español ABC donde aseguraba que el equipo de transición de la Presidenta electa Claudia Sheinbaum buscó invitar a la princesa Leonor a la toma de posesión como una alternativa para que no viniera el rey Felipe VI, hecho que fue desmentido por la propia Claudia Sheinbaum.
El equipo de la Presidenta electa confirmó a SinEmbargo que la versión es errónea y que no hubo tal intención de separar el Gobierno español de la corona, ni que se haya pensado invitar a la princesa Leonor, hija de Felipe VI. Por el contrario, reiteraron que la política exterior del Gobierno de Claudia Sheinbaum seguirá los principios constitucionales de la libre autodeterminación de los pueblos, la no intervención, la solución pacífica de las controversias, la cooperación internacional para el desarrollo y la fraternidad con todos los pueblos del mundo.
Las declaraciones del Presidente López Obrador se inscriben en lo señalado por dicho artículo, pues la publicación, firmada por los periodistas Angie Calero y Milton Merlo, afirmaba que el Gobierno mexicano “intentó separar al Gobierno del izquierdista Pedro Sánchez de la corona” y que la idea la habría encabezado el portavoz presidencial Jesús Ramírez Cuevas, “quien le decía al Presidente Andrés Manuel López Obrador que España era progresista”.
El diario agregó que Ramírez Cuevas insistía con que no se podía invitar a Felipe VI y utilizó como argumento frente a López Obrador que esta semana México aprobó leyes constitucionales en favor de los pueblos originarios con lo cual la presencia del rey restaría fuerza a esa supuesta conquista social.
“Una vez convencido el Presidente costó muy poco que Sheinbaum se plegase a AMLO y decidiera no invitar al rey”, afirma ABC.
UNA CADENA DE DESENCUENTROS
A lo largo del Gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador han tenido lugar diferencias con el Gobierno español, sobre todo ante el rey de este país, Felipe VI, quien se negó a responder oficialmente a la petición de disculpas que pidió México por los horrores cometidos en la Conquista. Ahora, en la recta final de esta administración se ha sumado otro episodio más luego de que el monarca no fuera invitado por la Presidenta electa Claudia Sheinbaum, precisamente por su silencio a la carta a la que envió López Obrador años atrás.
Durante los último seis años se han presentado diversas polémicas que han generado tensión entre el Gobierno de España y el de México, al punto que desde 2022, el Presidente López Obrador dio a conocer que establecería una pausa en la relación diplomática entre ambas naciones.
Todo inició cuando el 1 de marzo de 2019, el Presidente López Obrador envió de manera personal una carta a Felipe VI en la que, con motivo de la celebración de los 200 años de la vida independiente y casi 2 siglos de la fundación de Tenochtitlan.
La respuesta del rey de España nunca llegó y en cambio filtró la misiva a la prensa española. Hoy Claudia Sheinbaum se ha referido al tema: “la corona española al perdón que engrandece a los pueblos […] no hay una respuesta oficial al Presidente de la República, no solamente a Andrés Manuel López Obrador, sino al Presidente de la República, representante del pueblo de México. Pues evidentemente, no solamente es un agravio al Presidente, al hombre, sino al pueblo de México”.
Esto, luego de que se diera a conocer que no contempló al rey Felipe VI como invitado a la ceremonia de su toma de protesta, el próximo 1 de octubre, aunque sí se le hizo la invitación al Gobierno de España, lo que éste consideró como un “desaire”, por lo que declinó la invitación y aseguró que ese país no enviaría a ningún representante a dicho evento.
Al respecto, el Gobierno de España hizo llegar una queja formal a México por la negativa de invitar al rey Felipe VI. El Embajador mexicano en Madrid, Quirino Ordaz, fue convocado al Ministerio de Asuntos Exteriores para hacerle llegar una queja formal por esta cuestión.
Asimismo, el Embajador de España en México, Juan Duarte, acudió personalmente a la Cancillería mexicana para hacer entrega de una nota verbal, como se denomina en la jerga diplomática al documento por el que un país comunica a otro su postura respecto a alguna cuestión.
— Con información de EuropaPress