Claudia Sheinbaum Pardo, no contempló al rey Felipe VI como invitado a la ceremonia de su toma de protesta el próximo 1 de octubre, aunque sí se le hizo la invitación al Gobierno de España, lo que éste consideró como un “desaire”, por lo que declinó la invitación y aseguró que ese país no enviaría a ningún representante a dicho evento. La Presidenta electa sostuvo que el rey no fue invitado porque nunca dio una repuesta oficial a México sobre la disculpa que se pidió por el papel de España en la Conquista.
Ciudad de México, 26 de septiembre (SinEmbargo).- A lo largo del Gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador han tenido lugar diferencias con el Gobierno español, sobre todo ante el rey de este país, Felipe VI, quien se negó a responder oficialmente a la petición de disculpas que pidió México por los horrores cometidos en la Conquista. Ahora, en la recta final de esta administración se ha sumado otro episodio más luego de que el monarca no fuera invitado por la Presidenta electa Claudia Sheinbaum, precisamente por su silencio a la carta a la que envió López Obrador años atrás.
Durante los último seis años se han presentado diversas polémicas que han generado tensión entre el Gobierno de España y el de México, al punto que desde 2022, el Presidente López Obrador dio a conocer que establecería una pausa en la relación diplomática entre ambas naciones.
Todo inició cuando el 1 de marzo de 2019, el Presidente López Obrador envió de manera personal una carta a Felipe VI en la que, con motivo de la celebración de los 200 años de la vida independiente y casi 2 siglos de la fundación de Tenochtitlan, le proponía:
"‘Una hoja de ruta para lograr el objetivo de realizar en 2021, una ceremonia conjunta al más alto nivel; que el Reino de España exprese de manera pública y oficial el reconocimiento de los agravios causados y que ambos países acuerden y redacten un relato compartido, público y socializado de su historia común, a fin de iniciar en nuestras relaciones, una nueva etapa, plenamente apegada a los principios que orientan en la actualidad a nuestros respectivos Estados y brindar a las próximas generaciones de ambas orillas del Atlántico, los causes para una convivencia más estrecha, más fluida y más fraternal’".
La respuesta del rey de España nunca llegó y en cambio filtró la misiva a la prensa española. Hoy Claudia Sheinbaum se ha referido al tema: "la corona española al perdón que engrandece a los pueblos […] no hay una respuesta oficial al Presidente de la República, no solamente a Andrés Manuel López Obrador, sino al Presidente de la República, representante del pueblo de México. Pues evidentemente, no solamente es un agravio al Presidente, al hombre, sino al pueblo de México”
Esto, luego de que se diera a conocer que no contempló al rey Felipe VI como invitado a la ceremonia de su toma de protesta, el próximo 1 de octubre, aunque sí se le hizo la invitación al Gobierno de España, lo que éste consideró como un “desaire”, por lo que declinó la invitación y aseguró que ese país no enviaría a ningún representante a dicho evento.
EL INICIO DEL CONFLICTO
En marzo de 2019, el Presidente Andrés Manuel López Obrador dio a conocer, a través de un video, que envió dos cartas, la primera, al rey Felipe VI de España y, la segunda, al Papa Francisco, con la intención de que ambos ofrecieran perdón a los pueblos originarios de México por las matanzas y la imposición que se dio hace 500 años durante la Conquista.
“Envié ya una carta al Rey de España y otra carta al Papa para que se haga un relato de agravios y se pida perdón a los pueblos originarios por las violaciones a lo que ahora se conoce como derechos humanos. Hubieron matanzas, imposiciones, la llamada Conquista se hizo con la espada y con la cruz, se edificaron las iglesias arriba de los templos”, dijo el mandatario federal.
La misiva fue enviada en el marco de la celebración de los 500 años de la caída de Tenochtitlán y los 200 años de la independencia de México, las cuales se conmemoraron en 2021, año al que denominó el de la “reconciliación histórica”. “Fue lamentable lo que pasó con el exterminio a los yaquis, a los mayas, incluso el exterminio a los chinos en plena Revolución Mexicana, desde el Porfiriato. Entonces tenemos que pedir perdón”, agregó.
En ese mismo mes, la carta se filtró a los medios. Reforma dio a conocer el contenido de la carta que el Presidente mexicano envió al rey Felipe VI, en la que le solicitó que ofreciera una disculpa en nombre de su país por los abusos cometidos durante la denominada Conquista de México. No obstante, el mandatario mexicano aseguró que el documento era un borrador de la carta, la cual se daría a conocer cuando recibiera una respuesta a su petición.
En el documento, según la información dada a conocer por el diario, el Jefe del Ejecutivo propuso al monarca español una ceremonia pública para disculparse. El texto difundido seña que el Presidente mexicano se dirigió al rey igual que “como me dirigí a Su Santidad [el] Papa Francisco”. Aunque hasta ese momento el Gobierno de México no había dado a conocer la totalidad de la misiva, el mandatario siguió insistiendo en que España ofreciera disculpas.
En octubre de 2020, el Presidente López Obrador, insistió a las autoridades españolas a pedir perdón a los pueblos indígenas por la “imposición” y el “saqueo” de la Conquista. Con motivo del Día de la Hispanidad, subrayó que “es importante que se conozca lo que sucedió” durante la Conquista, ya que hay una “historia oficial” y también “otra visión, la versión de los vencidos”, en alusión a las poblaciones indígenas.
“Es mejor que todos, con humildad, ofrezcamos disculpas a los pueblos originarios y se procure iniciar una etapa nueva en nuestras relaciones”, declaró en ese momento, en el que se dijo confiado en que este gesto lleve también parejo el “compromiso de no repetición” y se descarte cualquier futuro “sometimiento”.
Fue en enero de 2021 cuando el propio mandatario mexicano dio a conocer el contenido de la carta, en la que exigió al Estado español ofrecer una disculpa al pueblo de México por los crímenes cometidos durante la Conquista, los cuales, anunció, serían enlistados y se los haría saber al rey de esa nación europea.
“El Gobierno de México propone a su majestad que trabaje a la brevedad, y en forma bilateral, en una hoja de ruta para lograr el objetivo de realizar en 2021 una ceremonia conjunta al más alto nivel; que el Reino de España exprese de manera pública y oficial el reconocimiento de los agravios causados y que ambos países acuerden y redacten un relato compartido, público y socializado…”, se indicó en la misiva de López obrador.
En el documento, se recordó la conmemoración de los 500 años de la caída de Tenochtitlán y los 200 años del movimiento de Independencia. “Nos encontramos en un periodo en el que resulta ineludible la reflexión ante hechos que marcaron de manera decisiva la historia de nuestras naciones y que aún generan encendidas polémicas en ambos lados del océano”, se agrega en la misiva.
Pero la respuesta de las autoridades españolas no fue favorable, ya que además de rechazar “con toda firmeza” dicha petición, señalaron que la misma es “anacrónica” y que esos acontecimientos “no puede juzgarse a la luz de consideraciones contemporáneas”, postura que el mandatario mexicano calificó de “soberbia”. “Actuaron creo que con soberbia”, expresó el tabasqueño durante un evento en Mazatlán, Sinaloa, en 2021.
“Les planteamos de manera muy respetuosa que ofrecieran disculpas, sobre todo la monarquía, por lo que se llevó a cabo de manera abusiva en nuestro país con las comunidades originarias, la represión que hubo, los asesinatos masivos, el exterminio, pues ellos no lo entendieron así, se sintieron ofendidos, actuaron creo que con soberbia”, comentó.
En ese mismo evento, el Presidente López Obrador propuso al exgobernador Quirino Ordaz Coppel, como nuevo Embajador de México en España, quien, detalló, tendría la encomienda de ayudar a restablecer “por completo y en muy buenos términos las relaciones con España, que son de todo tipo, principalmente de amistad con el pueblo español”.
“Tenemos en España buenas relaciones, a veces no como quisiéramos, con malos entendidos, pero yo aspiro a que se restablezcan por completo las buenas relaciones con España”, enfatizó el mandatario federal y subrayó que exgobernador tendría la misión de “restablecer las relaciones a plenitud entre México y España, a partir del respeto mutuo, que no nos vean como actuaban, porque se lo permitían los Gobiernos neoliberales, que no nos vean como tierra de conquista”.
Sin embargo, las confrontación entre el Gobierno español y el mandatario mexicano subió de tono cuando el expresidente del Gobierno español José María Aznar se burló del origen del nombre y de los apellidos del Presidente López Obrador. Además de defender a la conquista frente al “indigenismo”.
“En esta época en la que se pide perdón por todo yo no voy a engrosar las filas de los que piden perdón, no lo voy a hacer”, dijo Aznar al aludir al papel de España en la Conquista. “Por defender la importancia histórica de la nación española, la historia de España -con sus claros y con sus oscuros, con sus aciertos y con sus errores- estoy dispuesto a sentirme muy orgulloso, pero no voy a pedir perdón“, recalcó el exmandatario español.
Además ironizó sobre el nombre del mandatario mexicano. “Doscientos años del aniversario de la Independencia de México, enhorabuena. Y ahora me cambia usted todas las cosas y dice que España tiene que pedir perdón: ‘¿Y usted cómo se llama? Yo me llamo Andrés Manuel López Obrador. Andrés por los aztecas; Manuel por parte de los mayas; López es una mezcla”, sostuvo el expresidente español.
En el marco de la exigencia del Gobierno mexicano para que se disculpe por la violencia que aconteció durante la conquista, el Presidente López Obrador señaló de manera constante a empresas españolas, específicamente a las compañías energéticas y de la construcción, a las que acusó de considerar, aún, a México como “tierra de conquista y saqueo”.
Durante una de sus habituales conferencias matutinas, en noviembre de 2021, el tabasqueño comparó a la élite de España con Hernán Cortés, en referencia al saqueo que éste hizo durante la época de la Conquista, ya que consideró que las compañías del sector energético y de la construcción también saquearon a México durante los mandatos de Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto.
“Los de arriba [de España] son como cuando vino Cortés y nos invadieron, desde que llegaron se quedaron con el tesoro de Moctezuma”, dijo y recordó presuntos actos de corrupción de esas compañías. “Esa mentalidad es la de todavía algunos de los de arriba, de los potentados, no del pueblo español, que es un pueblo trabajador, progresista, que merece todo nuestro respeto, toda nuestra admiración”, aclaró.
Específicamente acusó a las compañías Repsol, OHL e Iberdrola, al señalarlas de saquear a México, lo que calificó como una “segunda conquista”. Incluso, consideró que la supervisión que se ejerce sobre las empresas españolas que operan en México, es muy relajada, ya que, dijo, estas compañías violaban o incumplían con los ordenamientos legales establecidos y no había consecuencias para las mismas.
Entre las irregularidades de las empresas españolas, el mandatario federal señaló a las denominadas “sociedades autoabasto”, que estaban a cargo de comercializar la energía generada pese a que su denominación indicara lo contrario. “Todas españolas, yo no sé por qué tanta complacencia con los españoles, me refiero con los de arriba de España, con el poder”, sostuvo.
“Era más que estrecha la relación del Gobierno de España con el Gobierno de México durante los sexenios del periodo neoliberal, las empresas españolas hacían lo que querían. Nos veían como tierra de conquista, nos veían como una segunda conquista, pero eso ya se acabó. Hay pruebas abundantes de eso con Repsol, OHL e Iberdrola”, expuso en otra ocasión.
Tras este intercambio de declaraciones, el Jefe del Ejecutivo federal decidió hacer una pausa en las relaciones entre los gobiernos de los dos países. En febrero de 2022, durante su habitual conferencia matutina, el Presidente mexicano consideró que a los pueblos de México y de España les vendría bien “poner en pausa” las relaciones que sostenían los dos países, ya que argumentó que “no somos tierra de conquista”.
“A mí me gustaría que hasta nos tardáramos en que se normalizara [la buena relación entre México y las empresas españolas] para hacer una pausa, que yo creo que nos va a convenir a los mexicanos y a los españoles, desde luego al pueblo de México y al pueblo de España, hacer una pausa en las relaciones”, dijo en esa ocasión.
“Porque era un contubernio arriba, una promiscuidad económica-política en la cúpula de los gobiernos de México y de España, pero como tres sexenios seguidos. Y México llevaba la peor parte, lo saqueaban”, añadió y volvió a referirse a los negocios que las empresas españolas hicieron en México en pasadas administraciones, y consideró que aún ven a este país como “tierra de conquista y saqueo”.
Por ello, el mandatario planteó la posibilidad de una pausa, al señalar que “vale más darnos un tiempo, una pausa”, ya que “a lo mejor ya cuando cambie el Gobierno, ya se restablecen las relaciones”. “Yo desearía, ya cuando no esté yo aquí, que no fuesen igual como eran antes”, afirmó en su intervención frente a los medios de comunicación.
En diciembre de 2022, el mandatario federal reiteró que la “pausa” en la relación diplomática con España continuaba, ya que, dijo, “no hay una actitud de respeto”. Esto, a pesar de que el entonces Canciller Marcelo Ebrard Casaubón recibió en esos días la visita de cinco ministros españoles.
“Continúa la pausa, porque no hay, de parte de ellos, una actitud de respeto. Le envíe una carta respetuosa al Jefe de Estado [Felipe VI], al rey de España y ni siquiera tuvo la atención de contestarme”, reclamó el Presidente López Obrador en alusión a la misiva enviada en marzo de 2019 en la que reclamaba a España que admitiese su “responsabilidad histórica”.
Cuando les dijimos que para iniciar una nueva etapa en las relaciones con España, considerábamos importante un gesto de humildad ofreciendo una disculpa por el exterminio, la represión y los asesinatos a los pueblos originarios, salen con que tenernos que agradecerles que vinieron a civilizarnos”, criticó el Presidente.
En el más reciente episodio de esta confrontación entre los gobiernos de España y México, se dio a conocer que la Presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo, no contempló al rey Felipe VI como invitado a la ceremonia de su toma de protesta el próximo 1 de octubre, aunque sí se le hizo la invitación al Gobierno de España, lo que éste consideró como un “desaire”, por lo que declinó la invitación y aseguró que ese país no enviaría a ningún representante a dicho evento.
“El Gobierno de España considera inaceptable la exclusión de S.M. el Rey de la invitación a la toma de posesión de la presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum Pardo, el próximo 1 de octubre en Ciudad de México. Por este motivo el Gobierno de España ha decidido no participar en dicha toma de posesión a ningún nivel”, se lee en el comunicado 055 difundido por el Ministerio de Asuntos Exteriores de ese país.
En respuesta a esta postura, la Presidenta electa Claudia Sheinbaum Pardo aclaró que sí se invitó a España a la ceremonia de su toma de protesta el 1 de octubre a través del Presidente del Gobierno español Pedro Sánchez Castellón, a quien envió una nota diplomática en julio y después conversaron.
No obstante, sobre la invitación al rey de España, la próxima Presidenta de México destacó que no se le invitó a la toma de posesión porque no hubo respuesta directa a la misiva del Presidente Andrés Manuel López Obrador sobre disculpa a pueblos indígenas. A través de un comunicado difundido en sus redes, Sheinbaum detalló los antecedentes de la razón por la cual se invitó solamente al Presidente de España.
“El 1 de marzo de 2019, el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, envió de manera personal, a Su Majestad, Felipe VI, Rey de España, una misiva en la que, con motivo de la celebración de los 200 años de la vida independiente y casi dos siglos de la fundación de Tenochtitlan, le proponía ‘que se trabaje en forma bilateral, en una hoja de ruta para lograr el objetivo de realizar en 2021, una ceremonia conjunta al más alto nivel”, dijo.
“Que el Reino de España exprese de manera pública y oficial el reconocimiento de los agravios causados y que ambos países acuerden y redacten un relato compartido, público y socializado de su historia común, a fin de iniciar en nuestras relaciones, una nueva etapa, plenamente apegada a los principios que orientan en la actualidad a nuestros respectivos Estados y brindar a las próximas generaciones de ambas orillas del Atlántico, los cauces para una convivencia más estrecha, más fluida y más fraternal”, detalló.
Sheinbaum explicó que dicha misiva no mereció respuesta alguna de forma directa y, en cambio, parte de la carta se filtró en medios de comunicación, un hecho que consideró lamentable pues no corresponde a las prácticas diplomáticas de las relaciones bilaterales que tienen México y España.
“Lamentablemente, dicha misiva no mereció respuesta alguna de forma directa, como hubiera correspondido a la mejor práctica diplomática de las relaciones bilaterales. En cambio, parte de la carta se filtró en medios de comunicación y posterior a ello, el Ministerio de Asuntos Exteriores de España realizó un comunicado de prensa. Hasta el momento, esta circunstancia no ha sido aclarada, ni respondida de forma directa al Gobierno de México”.
Sobre el comunicado del 24 de septiembre del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación de España. pic.twitter.com/K1rFImrO4p
— Dra. Claudia Sheinbaum (@Claudiashein) September 25, 2024
Por su parte, el aún Presidente de México respaldó la decisión de la Presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo, de no invitar al rey de España a su toma de posesión y acusó a la monarquía española de actuar con prepotencia. “Yo apoyo a la Presidenta electa. Si ella ya fijó postura yo la apoyo, la respaldo y yo creo que muchos mexicanos, millones, la apoyan”, dijo durante su habitual su conferencia matutina de este 25 de septiembre.
“Y es importante aclarar que estas diferencias con el Gobierno de España no se tienen con el pueblo español. Estamos hablando de diferencias con la Monarquía española, a la que se le pidió de manera respetuosa que ofrecieran una disculpa a los pueblos originarios por las atrocidades cometidas durante la invasión europea en el país y no hubo respuesta. Y no sólo eso, sino que filtraron la carta y desataron toda una campaña en contra de nosotros, del Gobierno de México, y actuaron con mucha prepotencia”, subrayó.
Esto pese a que el pasado mes de julio, el mandatario federal consideró que la pausa en las relaciones diplomáticas con España se podría terminar con la entrada de la siguiente administración, que encabezará Shienbaum Pardo. Asimismo, explicó que la pausa era para “reforzar”, a partir del perdón y de las disculpas, las relaciones entre España y México, pero “no lo entendieron”.
“Como cambió la política, ahora es distinto; pero en ese entonces había mucha arrogancia, mucha prepotencia. Por eso decidimos: no es ruptura, es pausa. No es ruptura, es pausa”, mencionó. También aclaró que las diferencias no son con la ciudadanía española, sino con las y los dirigentes, y destacó que con el nuevo Gobierno seguirá la política de “respeto hacia los pueblos”.
“Ahora que se den los cambios, hay una oportunidad con la Presidenta [electa] Claudia Sheinbaum, que es una mujer muy inteligente, muy respetuosa, muy fraterna, y además conocedora de la historia de México y del mundo. Sabe lo que significa la relación, la importancia que tiene la relación de México con España, histórica, cultural, económica”, agregó.
“No tenemos diferencias con el pueblo español, que es un pueblo trabajador, un pueblo progresista. No, son las élites. Y eso hay que aclararlo en todos los casos, porque es lo que sucede en todos los países. Una cosa son los gobiernos y otra cosa son los pueblos”, sostuvo en ese entonces el Jefe del Ejecutivo federal.