La decisión de mantener a Vera Carrizal en prisión fue recibida con alivio por Ríos y sus seguidores, quienes temían que la liberación del exdiputado pudiera poner en riesgo su seguridad.
Ciudad de México, 15 de agosto (SinEmbargo).- María Elena Ríos, la saxofonista y activista que sobrevivió a un ataque con ácido en 2019, compartió la esperanza que siente tras la suspensión de la absolución de su presunto agresor, Juan Antonio Vera Carrizal, y dos personas más, que los mantendrá en prisión.
La Jueza de Circuito de la Mixteca en Oaxaca revocó la libertad del exdiputado priista, ordenando que permanezca en prisión.
En un video publicado en sus redes sociales, Ríos mencionó que esta nueva resolución le da un rayo de luz no sólo a ella, sino a todas las mujeres y víctimas que han luchado por justicia.
"Esta nueva resolución me llena de esperanza, me da un rayo de luz, no solamente a mí, sino todas las mujeres, las infancias, las víctimas, que no nos hemos sabido quedar calladas y que, por supuesto, no van a contar con la comodidad de nuestros silencios”, sostuvo la activista.
🟣 Respecto a los hechos suscitados el día de ayer, esta es mi postura. pic.twitter.com/gRlh7CuvQl
— • 𝐄𝐥𝐞𝐧𝐚 𝐑í𝐨𝐬 🎷 (@_ElenaRios) August 15, 2024
La decisión de mantener a Vera Carrizal en prisión fue recibida con alivio por Ríos y sus seguidores, quienes temían que la liberación del exdiputado pudiera poner en riesgo su seguridad.
VERA CARRIZAL NO SALE
Luego de que se diera a conocer la liberación de Vera Carrizal y dos personas, acusados por atacar con ácido a la saxofonista, una Jueza anuló el dictamen, por lo que los tres presuntos atacantes continuarán encarcelados. Además, habrá una investigación en contra del juzgador.
María Antonia Esteva Domínguez, Jueza sustituta del Tribunal de Enjuiciamiento del Circuito Judicial de la Mixteca, con sede en Huajuapan de León, Oaxaca, fue la funcionaria del Poder Judicial estatal en revertir la resolución de José Gabriel Ramírez Montaño.
María Antonia Esteva Domínguez, jueza del Tribunal de Enjuiciamiento del Circuito Judicial de la Mixteca, revocó la boleta de libertad para Juan Antonio Vera Carrizal; piden mantener la prisión preventiva. pic.twitter.com/zHZn9OvwZN
— Misael Sánchez (@misaelsanchezmx) August 15, 2024
“Queda sin efecto boleta de libertad que fue ordenada a favor de los imputados antes mencionados y se ordena permita el ingreso de los mismos para que continúen con la medida cautelar originariamente impuesta en esta causa penal, esto en atención al acuerdo emitido con fecha 14 de agosto 2024”, señala la resolución de la Jueza María Antonia Esteva.
Por su parte, el Consejo de la Judicatura en el estado de Oaxaca, ordenó una investigación para fincar responsabilidades administrativas y penales en contra del mencionado Juez, por posibles actos de corrupción en el desempeño de sus funciones y conductas ilícitas.
La Magistrada Berenice Ramírez Jiménez, presidenta del Poder Judicial de Oaxaca, puntualizó que, si bien respeta la independencia de las y los jueces, en este caso particular se manifestó en desacuerdo con el fallo pues “deja desprotegida a una víctima de violencia y da muestra de inconsistencias evidentes e insostenibles”.
La Magistrada calificó como dudosa la conducta de los involucrados en el caso, por lo que prometió que se les castigará con todo el peso de la Ley.
#COMUNICADO | 📰🗞️
Ordena Presidenta del Poder Judicial investigación para deslindar responsabilidades administrativas y penales contra juez en el caso María Elena Ríos. pic.twitter.com/pyUR1rRPYb
— @TSJOaxaca (@tsjoaxaca) August 14, 2024
Elena Ríos había denunciado que el Juez José Gabriel Ramírez Montaño absolvió y ordenó la inmediata liberación de Juan Antonio Vera Carrizal y dos personas más por el delito de tentativa de feminicidio cometido contra la activista en 2019.
Elena Ríos, sobreviviente de un ataque con ácido, expuso que al Juez sólo le tomó 20 minutos dejar en libertad a sus tres agresores. “Ganó la corrupción (…) esa es la impunidad que viven las mujeres cuando luchan por justicia”, escribió en X, antes Twitter.
El Juez no acudió de manera presencial a la audiencia y se limitó a conectarse vía remota. Elena Ríos acusó a la Magistrada Magda Berenice Ramírez Jiménez, presidenta del Tribunal Superior de Justicia de Oaxaca, de proteger a sus agresores. “Hago este llamado respetuoso para hacer de conocimiento a la Presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo, y también a la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, que se fije atención de lo que está pasando en el Tribunal Superior de Justicia de Oaxaca (…) Ha habido mucha obstaculización de la justicia”, indicó.
Con el fallo, se ordenó la inmediata libertad a Vera Carrizal, Loaiza Chávez y Hernández Ríos, así como el cese del embargo de los bienes que se haya decretado a las personas absueltas del delito.
Ganó la corrupción.
Juan Antonio Vera Carrizal ha quedado en libertad.
20 minutos le tomó a este juez corrupto #JoséGabrielRamírezMontaño, la resolución. esto es #Oaxaca, esto es #México, esta es la impunidad que viven las mujeres en luchamos por justicia.
Todo fue pactado… pic.twitter.com/xpmfRpXXYR
— • 𝐄𝐥𝐞𝐧𝐚 𝐑í𝐨𝐬 🎷 (@_ElenaRios) August 14, 2024
La mañana del 9 de septiembre de 2019, María Elena Ríos fue atacada con ácido. El ataque lo hicieron dos albañiles, Ponciano “N” y su hijo Rubiciel “N”, quienes recibieron en total 30 mil pesos por parte de Juan Antonio Vera Carrizal, empresario y político mexicano, según ellos mismos confesaron en diciembre, cuando fueron detenidos en ese año.
En el intento de feminicidio también estuvo involucrado Rubén “N”, un exempleado del político, quien presuntamente fue el que entregó el ácido para atacar a María Elena. Pero, además, también participó el hijo de Juan Antonio Vera, Juan Vera Hernández, quien continua prófugo.
Para María Elena, quien estudió saxofón en el Conservatorio de Puebla y además la carrera en Comunicación, acceder a la justicia no ha sido fácil. Al principio su agresión fue clasificada como “heridas que tardan 30 días en sanar”. Sin embargo, el 23 de octubre, cuando su abogada demostró que le habían quemado el 40 por ciento de su cuerpo, las clasificaron como “heridas que ponían en riesgo su vida”. No fue hasta el 23 de diciembre cuando por fin le clasificaron el delito como “tentativa de feminicidio”.