El empresario explicó que no tendría sentido invertir en México si Donald Trump cumple su promesa de campaña de imponer aranceles a los vehículos producidos en México.
Ciudad de México, 23 de julio (SinEmbargo).- Elon Musk, presidente ejecutivo de Tesla, dijo este martes que la inversión de la empresa en México estará pausada por lo menos hasta que concluyan las elecciones presidenciales de Estados Unidos.
El magnate sudafricano explicó en teleconferencia con analistas y medios de comunicación que el candidato presidencial republicano Donald Trump ha dicho que pondrá aranceles a los vehículos producidos en México, por lo que detendrá temporalmente los planes de inversión en México, donde se tiene planeada la construcción de una planta automotriz en Nuevo León.
«No tiene sentido invertir mucho en México si eso va pasar. Necesitamos ver como las cosas se desarrollan políticamente», comentó Musk.
Elon Musk anunció oficialmente en marzo del año pasado la instalación de una fábrica de vehículos eléctricos en el municipio de Santa Catarina en Nuevo León.
“Estamos super emocionados de continuar nuestra expansión en México, de anunciar que la próxima fábrica gigante de Tesla se instalará en México, cerca de Monterrey”, dijo el magnate durante el Investor Day (Día del Inversionista) en el que, como su nombre lo indica, los inversores de Tesla conocen su línea de producción más avanzada, discuten planes de expansión a largo plazo, la plataforma de generación 3, asignación de capital, entre otras cosas.
En el evento dio la bienvenida a los representantes del Gobierno de México: a la subsecretaria de Relaciones Exteriores, Martha Delgado, aunque no la mencionó por su nombre, y al Gobernador de Nuevo León, Samuel García.
“Estamos muy emocionados de anunciar eso y creo que está aquí el Gobernador, bienvenido, el Secretario de Estado, creo, así que bienvenidos y estamos emocionados por tener un gran evento de poner la primera piedra y para la inauguración”, dijo el magnate al aclarar que con la nueva planta en México no se trata de trasladar producción de una parte a otra, sino de expandir toda su producción global.
Sin embargo, estos planes interfieren con la visión política de Musk, quien desde sus redes sociales ha expresado explícito al candidato republicano, quien busca la reelección para el periodo presidencial 2024-2028.
Donald Trump ha amenazado aplicar una política en materia económica en caso de regresar a la Casa Blanca: imponer aranceles expansivos a países “amigos y enemigos” por igual, incluyendo a México.
Lo hizo en mayo de 2019, durante su primer mandato, cuando amenazó con un arancel del 5 por ciento en todos los productos importados de México como castigo por la migración irregular. En esa ocasión dijo que dicho gravamen iría aumentando gradualmente —hasta el 25 por ciento— hasta que viera “control” de las personas que ingresaban a Estados Unidos. Días después suspendió esta medida pero quedó registro de las advertencias a México.
En esta ocasión, el amago es por la entrada de inversión china en el sector automotriz en México, bajo la lógica del nearshoring; Donald Trump ha declarado que si regresa a la Casa Blanca, impondrá aranceles del 10 por ciento a todos los productos que vengan de otros países, incluido México, y a los automóviles fabricados en el país vecino por empresas chinas un arancel de hasta 100 por ciento pues sostiene que se benefician de pagar menos impuestos por el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Ante este posible escenario, ¿qué consecuencias traería para México?, ¿qué puede hacer el nuevo gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo para evitar medidas tan drásticas? Jesús López Almejo, internacionalista miembro del Sistema Nacional de Investigadores del Conahcyt, explicó que todas las amenazas de Trump van de la mano, como utilizar el tema del tráfico de fentanilo o la migración para amagar a México con sanciones económicas, aunque no descarta otras intenciones como exigir más participación en la política mexicana para impulsar políticas públicas que favorezca sus intereses.
“Me parece que se quieren agarrar del plan del tema del fentanilo, culpar a México y poder amenazarnos con sanciones o solicitar más participación en la política mexicana, lo que sería gravísimo porque cuando ellos tienen más participación en la política de los países generan o tratan de impulsar políticas públicas que les favorezca sus intereses, incluso a veces en contra de los propios intereses nacionales de los países a los que influye. No es poca cosa. También se tiene que renovar el T-MEC”, dijo López Almejo en entrevista con SinEmbargo.
— Con información de Nancy Gómez