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ENTREVISTA¬ La derecha se quedó en el Echeverrismo y el Diazordacismo: Jairo Calixto

14/07/2024 - 12:00 am

Jairo Calixto Albarrán platicó que en las páginas de su texto, en las cuales recorre con su conocida mordacidad una serie de episodios que han marcado a la derecha, llevó a cabo un análisis de inteligencia emocional, particularmente para exponer cómo han actuado con puro hacia el Presidente Andrés Manuel López Obrador o, por ejemplo, hacia el comunismo.

Ciudad de México, 14 de julio (SinEmbargo).– “Sí la derecha está atrapada en los 60s, se quedó allá atrapada en el macartismo, se quedó atrapada en el Echeverrismo, en el Diazordacismo, es decir, se quedó en esos ismos ya ni vintage, porque hasta dan penita”, comentó en entrevista el periodista Jairo Calixto Albarrán.

Jairo habló con SinEmbargo sobre su más reciente libro, El derechairo que vendió su Ferrari (Aguilar Ideas), una especie de sumersión que hace en la mente de los seguidores de la derecha. “Es un servicio social, como un apoyo a la comunidad derechaira, la derechaiza en éxtasis, es también una forma también con humor para que no sea como de regaño, no te estoy regañando, no te regaño, yo te oriento, entonces, esa es la intención, es un trabajo terapéutico que he decidido emprender como un ejercicio de apoyo a los otros, a los más desvalidos”.

“Es la exploración antropológica que viene, no es de ayer, ya tiene algunos años, como diría la película de José Agustín ‘ya sé quién eres, te he estado observando’, los he estado observando detenidamente a estos personajes, a esta zoología nada fantástica, que tiene sus atractivos, sus encantos, sobre todo porque como saben exactamente del otro lado de mi mente, del otro lado de mi forma de ser, de mi pensamiento, me llama la atención cómo funciona esa mente retorcida, que está más retorcida que unos Cheetos, entonces, es interesante ver cómo funciona sobre todo a partir del periodo de la derrota del 2018, donde se han exacerbado su propia naturaleza, donde se han quedado en el melodrama reguetonero y no han sido capaz de generar nada refrescante, nada nuevo, es lo mismo, es el odio, el rencor y ya”.

Jairo Calixto Albarrán platicó que en las páginas de su texto, en las cuales recorre con su conocida mordacidad una serie de episodios que han marcado a la derecha, llevó a cabo un análisis de inteligencia emocional, particularmente para exponer cómo han actuado con puro hacia el Presidente Andrés Manuel López Obrador o, por ejemplo, hacia el comunismo.

“Todavía creen que existe el comunismo, lo cual ya está muy mal, y también todo lo que se ha generado alrededor, digamos, impulsar ese tipo de pensamiento, retardatario, reaccionario, de derecha, conservador, medieval en muchos sentidos y del yunque, o sea, a través de lo que vimos a lo largo de este sexenio: información de dudosa categoría, personajes cada vez más dudosos, cada vez más siniestros, que con tal de ganar algunos likes, se dedicaron a mentir y a esconder, y a guardar, siendo personajes de la alta alcurnia intelectual, cultural, periodística, y todo lo que permea hacia abajo”.

Calixto Albarrán compartió que escribir este libro le sirvió ver cómo funciona esta mente de los derechairos. “Si que requería algo terapéutico y este libro también tiene esa función, como de ser libro de autoayuda para derechairos en éxtasis, entonces, se ayuden a comprenderse a sí mismos, saber cómo son y también de alguna manera, transformar un poco esa forma de ser que los llevó a otra derrota electoral espeluznante”.

—¿La derecha se quedó sin discurso?

—Sí la derecha está atrapada en los 60s, se quedó allá atrapada en el macartismo, se quedó atrapada en el Echeverrismo, en el Diazordacismo, es decir, se quedó en esos ismos ya ni vintage, porque hasta dan penita, pero algunas mentes también, que están dispuestas a creer en lo que sea con tal de mantener su forma de pensamiento, les funcionó, tú veías en las marchas, en la marcha Rosa, mucha gente que decía ahí vienen los comunistas, nos van a comer, los niños, nos van a quitar nuestras cosas y de verdad, y, además, con mucha violencia verbal y con mucha violencia física, ‘no puede ser, maldito López’, era una cosa muy, muy curiosa, de veras era como película de los Hermanos Marx, curiosamente.

Sí, yo les decía, no mamárx, amigo, porque estaban ya en una condición muy muy lamentable, porque dijeras ‘bueno, hay gente ahí que sí acabó la primaria, que sí estudió más de tres libros, no son como mi licenciado Peña’, pero se estacionaron ahí, unos por convicción ideológica de derecha y otros por una conveniencia y un oportunismo político, por alguna extraña razón creyeron que sí iba a ganar Xóchitl, eso también es otro de los grandes engaños, ni Houdini hizo tan grandes engaños, ni Mandrake, y también tenían una convicción neoliberal, pero ya como una cosa fanática, y ahí está Dresser, Aguilar Camín, están una larga lista, y no se diga los políticos, Marko Cortés, Markititios Cortés, el propio Alitito Moreno, hoy el nuevo Porfirio Díaz del PRI, ya no sé si vale la pena mencionar a Zambrano, podre, creo que ya desapareció en la nada, en el Frente Cínico Nacional.

—¿Hay una cuestión ahí de disociación de personalidad en la derecha?

—Sí, es una cosa muy rara, por ejemplo, la propia Xóchitl, toda la campaña ‘yo soy apartidista’, pero estás con el PRIAN, ‘no, yo soy apartidista’, ya luego dos meses antes tuvo que recular ‘no, sí soy del PRIAN’, y es un poco ridículo o mucho ridículo, vimos al propio Marko Cortés cuestionando al Saco de pus, diciéndole ‘ustedes tenían a García Luna’ pero era panista, amigo, trabajo con un gobierno panista, tú estabas en ese, tú lo lavaste, tú lo boleaste, ‘sí, pero con eso nos dañaron’, te hubieras deslindado desde hace mucho tiempo de ese personaje y no, lo cobijaron, nunca salió a decir ‘maldito personaje, terrible, además, narco y todo’.

No hay un reconocimiento autocrítico de nada, de nada, aún en la derrota, está como la selección, igual el comunicado de la Selección Mexicana: ‘sí perdimos pero ganamos experiencia y aprendimos cosas’, no, perdiste, hermano, reconócelo. La primera, digamos que cualquier terapeuta te puede decir, lo primero que tienes que hacer para transformarte es reconocer tus propios errores, tus pifias, tus culpas y aquí no hay ni uno, nadie, ni Denise, ella: ‘todos están equivocados, todos están mal, ustedes no entendieron, bola de nacos, de chairos, nacos’, igual que todos, tú ves a todos nuestros pensadores, Rivapayaso, ninguno se equivocó pero ahí está la mejor encuesta posible es el resultado electoral y a mí me gusta, digamos, cómo funciona esta mente que no es capaz de reconocer ni reconocerse.

—Es un país de contradicciones en el que ellos viven, es una dictadura en la que pueden insultar al Presidente, en el que Alito y Marko son los grandes ganadores…

—Yo creo que es un ejercicio ya desatado, ya absolutamente delirante de humor involuntario lo que vemos ahí. Cómo voy a creer que los priistas por muy zombies que sean van a creer en un personaje que ha perdido todo, no ha ganado nada, nada, digamos, ya la terminología, digamos ya liberal, es un súper loser, es un perdedorsazo, que además todo su discurso se desmorona y todo, y lo único que ha logrado es que, hasta don Beltrone parezca demócrata lo cual parecía imposible, pero la ha conseguido, entonces, sí es una locura, ya es demencial, y para mí en muchos sentidos es divertido, porque yo siempre trato de ver la política como un espectáculo circense, entonces, a mí me divierte mucho, pero no me imagino que será para los priistas de hueso colorado, que los hay, como el papá de Xóchitl Gálvez, que era priista los viejos tiempos que dicen ‘¿qué está pasando?, porque podemos ver otros pistas acomodaticios como el Nuño Artillero, que ‘claro, tenemos que repensar la cosa’, no pensaste hace 6 años, tuviste seis años para pensar y apenas vas a empezar a entender lo que ocurre, todo este grupo Osorio Chong, la dinosauri, Beatriz Paredes, que tienen siglos ahí ya era para que lo hubieran pensado de otra manera.

Entonces, no se les da, ya no, ya su generación ya caminó y Alito lo que le queda es enterrar al PRI, pero no lo va a ser fácil, es decir, lo escuché en una entrevista, regañando a Azucena Uresti, y lo cual ya estaba complicado, regañándola, porque no los dejaba más que tres minutos hablar, porque antes lo alababa y ahora ya no, y dice ‘no, a lo mejor pierdes tu chamba’, ya está en el delirio del otoño del patriarca y yo creo que tanto botox le hace daño a la salud y esas cejas tampoco ayudan, entonces, todo mal ahí, pero finalmente se lo buscaron, así fue, así lo decidieron, no es de ayer, no es de antier.

Y lo de Marko Cortés es igual, siempre negando lo todo, ahí sí, para mí, son peores los panistas, son doble cara, por lo menos Moreno sabemos que es un truhán, que es un maleante, que es un vival y no duda en demostrarlo, sabemos qué es él, y los otros no, los panistas son doble cara, van a misa los domingos, invocan al Señor y, además, se tiene ese pensamiento como que quieren ser progres buena ondita y no les sale, pero al final lo que hemos visto con esta generación de panistas es la avidez de lana, de Business, de negocios y está el cártel inmobiliario del PAN para demostrarlo, que se llevó entre las patas a su propia fanaticada, a su feligresía, en la colonia del valle de la Ciudad de México, los votantes, el voto duro del PAN en la Ciudad de México está ahí y aún así se los llevaron al baile con negocios inmobiliarios, les aplicaron toda la caballada para echarlos de sus casas y donde hubiera 10 metros cuadrados ‘ahí hay que hacer una torre Chueca’, les quitaron el agua, todo y, eso sí, son súper zombies, porque aún así votaron por ellos.

Es una cosa muy demencial, pero yo creo que también son los extractores de la derrota, de lo que pasó, del caos, todos andan como pollo sin cabeza, corriendo para todos lados, no saben qué hacer, ya es la señora Xóchitl está gira artística, que nadie pela, ya a nadie le importa, ya cada vez es tan irrelevante, como todos los que la apoyaron, todos los intelectuales, periodistas, todos, este círculo rojo, todo ese mainstream cultural, intelectual, es tan irrelevante como todos los demás y su relevancia quedó muy clara estas elecciones, pueden decir misa, pero te vale gorro, yo voto por quien quiero”.

– Por último, también hay otra derecha que se ha sabido mover y se está empezando a infiltrar como vía parasitaria a la 4T ¿Crees que ahí será donde pueden generar ciertos nidos?

—Sí, yo creo que este fenómeno del chapulineo, además, encontraron las grietas por donde meterse, de toda la batalla por Sergio Mayer de estos días, tiene que ver un poco con eso, aunque personalmente digo es Sergio Mayer, por qué diantres vamos a debatir por Sergio Mayer, claramente es una mala decisión, todos los partidos toman malas decisiones, pero además esta es una decisión bastante, como diría Xóchitl Gálvez, muy corriente, pero no vale la pena este debate.

Por supuesto lo único que le ha quedado a la oposición, es generar estos ruidos, estas cizañas, para generar un debate interno, y al fin de cuentas lo que se ha demostrado, que lo más valioso de todo esto es que las fuerzas vivas de Morena claramente no estaban de acuerdo y claramente son capaces de señalar y cuestionar, ya no están, digamos, aceptando lo que decían los panistas, eran pejezombies, ya esos zombies están tomando por su cuenta las parrandas, ‘eso no me gusta y lo voy a cuestionar, no importa que me regañen, no importa que piense que…’, y creo que esa toma de conciencia, que al final de cuentas es la que ha pedido el Presidente, la revolución de las mentes, de las emociones, del pensamiento y de las ideas.

Eso es muy positivo, que la gente diga ‘esto no me late, no me late ese personaje’, porque dado sus antecedentes puede aplicar un quiquintillazo, ya si lo ves, su voto no tan relevantes, su voto, aunque fuera de mala fe, lo que sea, no podría decidir algo fundamental, pero sí sería muy característico de algo que está cuestionado y que no vale la pena, no vale la pena dar esas oportunidades, pero yo siempre he dicho que si alguien del PAN, del PRI, de MC, de la Coparmex o de lo que quieras, quiera pasarse a la 4T, primero tendría que pasar un examen, primero antes que nada ‘cántame la Internacional en el Zócalo tú solo’; dos, dime las cinco tesis de Mao; platícame de la Historia me absolverá de Fidel Castro, qué decía lo fundamental y así, yo sí yo creo que sí vale la pena ponérselos, porque incluso en una entrevista con el Noroñas y decían algo interesante que digamos nadie es puro totalmente y todos podemos en algún momento caer en la tentación, porque las tentaciones son muchas, porque ahí está el diablo, está en los detalles, porque sí te pueden comprar tu conciencia en algún momento, incluso dijo ‘yo mismo’, pero una de esas hasta que no te mueres no va a haber claridad de que fuiste congruente toda la vida, en algún momento puede pasar algo y que todos somos humanos y eso me parece sensato, pero sí creo que si llegan a aportar estos chapulines, a generar o a traer, está bien, pero sí tenerlos muy observados y que no apliquen el quiquintellazo o como Germán Martínez, que fue muy miserable.

Obed Rosas
Es licenciado en Comunicación y Periodismo por la FES Aragón de la UNAM. Estudió, además, Lengua y Literatura Hispánicas en la Facultad de Filosofía y Letras.
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