Alrededor de la 1 de la mañana, cuando Claudia Sheinbaum fue confirmada como la virtual ganadora, Xóchitl volvió a salir acompañada por los dirigentes de los tres partidos que por entonces lucían rostros largos. “¡Ánimo!”, les dijo Xóchitl a sus simpatizantes y reconoció que las tendencias no le favorecen y no hay información que eso pudiera cambiar en los cómputos distritales.
Ciudad de México, 3 de junio (SinEmbargo).- Al estilo de su campaña, impregnada de mentiras, la candidata de Fuerza y Corazón por México, Xóchitl Gálvez Ruiz, aseguró a las 19 horas que era “claro” que había ganado la votación presidencial. Una pantalla gigante rezaba: “Gracias México”, los dirigentes nacionales del PRI, PAN, PRD, su equipo de campaña, sus hijos y los “xochilovers” le gritaron “Presidenta” entre aplausos.
“Xóchitl, ¡aquí están tus xochitlovers!”, le gritó una simpatizante que encontró un coro animoso en otras personas que fueron a apoyarla al hotel Presidente Intercontinental en uno de los conocidos nidos de la derecha en la capital del país, Polanco.
Después de su breve mensaje, donde no alcanzó a llegar desde el WTC el otro autoproclamado “vencedor” en la CDMX, el panista Santiago Taboada, la aspirante se encerró a esperar los resultados preliminares de la autoridad electoral. Sus hijos, Diana y Juan Pablo, paseaban nerviosos entre los pisos del hotel.
Para las 20 horas la gran pantalla del templete cambió la leyenda a “Aguanta México” frente a sillas vacías, una gran mayoría de los “xochilovers” -personas blancas de clase media, unos vestidos de rosa- se retiraron del lujoso hotel en sus grandes camionetas Suburban blindadas; felices, creyentes de una fake más de su candidata, una mentira más de Santiago Creel, de Max Cortázar, de Alito Moreno, de Marko Cortés…
A Taboada, quien llegó más tarde, los simpatizantes también lo recibieron con júbilo en el lobby del hotel, como si en verdad fuera el claro ganador en CDMX. Muchos, sonrientes, le pidieron una selfie.
En entrevista, el Diputado panista Jorge Romero -cabeza de los Ocean señalados de liderar el cartel inmobiliario en la Alcaldía Benito Juárez- aseveró la victoria de su amigo absolutamente convencido de lo que declaraba:
“Podrán decir los demás lo que quieran, estamos absolutamente convencidos del triunfo”.
Los resultados del PREP iban a cuenta gotas mostrando un panorama distinto al de Polanco. Aún así, a las 21 horas salieron del war room a dar un segundo mensaje. Esta segunda ocasión ya no estuvo la candidata “ganadora” ni sus hijos, solo el jefe de campaña Santiago Creel y los dirigentes del PRI, PAN, PRD, quienes se aferraron a aparentar una victoria contrastante al PREP. Incluso regañaron a los medios por informar tendencias.
Creel, aún sonriente, argumentó que era alta la tasa de rechazo en las encuestas de salida; Marko Cortés citó “nuestras mediciones” a diferencia de “los otros datos”, y Alito incluso habló de “defender” el voto mientras terminaba el “cómputo”.
Luego vino una serie de tuits de Xóchitl contrastante a la que se autoproclamó victoriosa. “No permitamos que los escondan”, dijo sobre los votos. Su única prueba: los resultados de su casilla en la Alcaldía Miguel Hidalgo, donde durante la mañana esperó tres horas en fila.
Los datos preliminares dados a conocer pocos minutos antes de la medianoche por la consejera presidenta del INE Guadalupe Taddei cambiaron el ambiente cada vez menos festivo de los cada vez menos presentes seguidores de Xóchitl. La realidad los calló: unos 30 puntos por debajo de la candidata de Morena Claudia Sheinbaum.
“Ahora resulta”, rechazó una xochilover. “Me avergüenza que sea mi país”, dijo otra desvelada. “No hay forma”, se repetían a manera de negación mujeres vestidas de rosa, desencajadas. Incluso un hombre vestido de rosa mostró indignado a su acompañante un whats que decía que “había fraude”; mientras en el Zócalo de la Ciudad de México comenzaban a celebrar la virtual victoria de Claudia Sheinbaum.
Alrededor de la 1 de la mañana, cuando Claudia Sheinbaum fue confirmada como la virtual ganadora, Xóchitl volvió a salir acompañada por los dirigentes de los tres partidos que por entonces lucían rostros largos. “¡Ánimo!”, les dijo Xóchitl a sus simpatizantes y reconoció que las tendencias no le favorecen y no hay información que eso pudiera cambiar en los cómputos distritales.
En la llamada con Sheinbaum, le dijo que hay un México con dolor. “Mi reconocimiento viene con una exigencia del respeto a las instituciones democráticas. Saldremos a las calles las veces que tengamos que salir para defender a la República y a la democracia”, aseguró.
Llamó a pasar a una fase de reconciliación y reclamó la intervención “marcada” del Presidente López Obrador. Además remarcó la violencia electoral durante el proceso Finalmente, agradeció a los xochilovers y a los ciudadanos de la marea rosa, quienes le aplaudieron esta madrugada.
“Nos vemos en tres años o seis…”, culminó
