Enrique «Quique» Rangel, bajista de Café Tacvba, habló son SinEmbargo sobre cómo nació su nuevo sencillo, un tema que reconoce la labor de los migrantes. «Es momento de considerar que hay la posibilidad de que nosotros seamos un país, o nuestras ciudades sean ciudades de inmigrantes, estar abiertos y no esperar a que el gobierno tome medidas», platicó.
Ciudad de México, 26 de mayo (SinEmbargo).- Después de siete años del lanzamiento del álbum «Jei Beibi» (2017), la agrupación mexicana Café Tacvba estrenó su nuevo sencillo inédito «La bas(e)», en el que reconoce el valor y el trabajo de los migrantes en otros países, sobre todo en Estados Unidos.
El lanzamiento de «La bas(e)» se da meses después de que la agrupación fuera reconocida con el Premio a la Herencia Hispana en una ceremonia que tuvo lugar en Washington D.C. y donde Rubén Albarrán, vocalista de Café Tacvba, recalcó que «Estados Unidos es grande gracias a los migrantes».
En entrevista para SinEmbargo, Enrique «Quique» Rangel, bajista de la agrupación, expuso que el tema surgió de la necesidad de su hermano, el guitarrista Joselo Rangel, de enaltecer el trabajo de los mexicanos que han «decidido o han tenido que tomar la decisión forzada de florecer en otro país».
«Desde hace algún tiempo Rubén [Albarrán] tiene estos reconocimientos sobre el escenario cuando estamos tocando en Estados Unidos, en donde reconoce el gesto de valor de la gente que ha decidido, o ha tenido que tomar la decisión forzada de florecer en otro país, incluso también hablarle a los hijos de esos que ya nacieron y crecieron allá», expresó el bajista.
«También es cierto que éramos escépticos respecto a este reconocimiento como que era ‘por qué nos lo dan a nosotros que no vivimos allá’, ‘en qué consiste este mes de la comunidad hispana’, es como darle atole con el dedo para ‘ah, sí, también le damos a la comunidad afroamericana, también a los asiáticos’ así como de mantenerlos tranquilitos y ya, pero ahí reconocimos que la aportación cultural de nuestros pueblos, México, Centroamérica, Sudamérica, a esa nación, que es una nación de inmigrantes, es muy importante, o sea, no es menor y no se reduce a la comida, o sea, es una fuerza de trabajo, como bien lo dijo Rubén, son los colores y los sabores que suman, es un país que se ha alimentado de eso y que ha sabido aprovecharlo», agregó Rangel.
La agencia de noticias estadounidense Associated Press informó el pasado mes de febrero que la migración irregular en México se disparó un 77 por ciento más durante 2023, en comparación con el año anterior, según cifras difundidas en febrero del año en curso por el Gobierno mexicano, que en los últimos meses ha redoblado los esfuerzos junto con Estados Unidos para contener la ola migratoria.
Los datos de la Unidad de Política Migratoria de la Secretaría de Gobernación indican que al cierre del año pasado se registraron un total de 782 mil 176 “eventos de personas en situación migratoria irregular”, lo que supera ampliamente los 441 mil 409 casos reportados en 2022.
El salto del flujo migratorio que enfrentó México a lo largo del 2023 ocasionó que sus fronteras se saturaran y en diciembre llegaron a reportarse diariamente 10 mil cruces irregulares hacia Estados Unidos, situación que terminó por encender las alarmas de ambas naciones.
Al ser cuestionado por la política migratoria en México, «Quique» Rangel señaló que, como nación, es importante «empezar a vernos en el espejo de los gringos».
«Decimos ‘es que ustedes tratan mal a los migrantes’, ¿y nosotros qué hacemos con los venezolanos, los argentinos, los centroamericanos, los haitianos?», cuestionó.
Y abundó, «hay algo muy mezquino que tenemos que reconocer, que cuando el otro lo hace está mal y cuando nosotros lo hacemos ‘es que nos van a quitar las fuentes de trabajo’, ‘es que son un peligro’, ‘es que son todos criminales’, ¿por qué estamos cayendo en la misma retórica del otro lado?»
Asimismo expuso que como sociedad «es momento de considerar que hay la posibilidad de que nosotros seamos un país, o nuestras ciudades sean ciudades de inmigrantes, estar abiertos y no esperar a que el gobierno tome medidas».
«La bas(e)», disponible en plataformas de streaming, salió a la luz a escasos días de que la banda salga de tour a Estados Unidos junto con sus connacionales Caifanes.
«LOS POLÍTICOS NO HACEN NINGÚN CAMBIO»
A unos cuantos días de que se lleve a cabo la elección más grande de la historia, en la que México podría estar próximo a tener a su primera Presidenta, Rubén Albarrán expresó en conferencia de prensa que no cree que «vaya a haber un cambio».
Al ser cuestionado por Billboard, durante la cita de medios que tuvo la banda con motivo del estreno de «La Bas(e)», sobre los comicios que se realizarán el próximo 2 de junio en el país, el músico de 57 años de edad apuntó que «los políticos sólo están ahí para hacernos creer ese cuento de la democracia, que no existe, o sea, ir a votar cada seis años, eso no es democracia».
«Desgraciadamente creo que a esos niveles, a esas cúpulas, creo que ya los géneros, creo que ya están muy confundidos, en realidad no creo que haya una verdadera energía femenina en la que podamos creer, apoyarnos, para pensar que, realmente, esa persona va a lograr hacer cambios, sea hombre o mujer, es el sistema lo que no funciona, entonces aún cuando hubiera las mejores intenciones, todo al rededor no le va a permitir hacer esos cambios».
Y agregó, «igualmente hay poderes más arriba que los delimitan, tal vez, nuestra geografía, que tanto dictan estatus, dictan la forma en que vamos a vivir, lo que vamos a consumir, mientras sigamos dormidos y sigamos pegados a nuestros teléfonos, y sigamos contentos con esta realidad que enfrentamos, como dicen, era tal vez como el gol que buscaban llegar una dictadura en la cual todos amemos esa dictadura, y la amamos porque estamos con nuestros teléfonos y nos encanta estar allí».
En tanto, estableció que «sería un pasito adelante, poder entender que ya no hay ni izquierda ni derecha, y en estos casos hombre o mujer es lo mismo».
Por su parte, al ser cuestionado en entrevista con este medio por su opinión respecto a la legislatura que está por terminal, Enrique Rangel no dudó en replicar que se siente decepcionado.
«Por lo menos en lo que a mí me interesaba que era la cultura, la investigación y la educación, me siento decepcionado, creo que hubo un desprecio por lo que para mí es uno de los grandes valores de nuestro país, el arte y la educación para mí son pilares, no sé, reducirlos a que son manifestaciones de la propiedad privada, o algo así, que no hay forma en que los programas también puedan llegar a la generación de arte, a los apoyos, a proyectos culturales, salvo algunas excepciones, pero sí es más de decepción», concluyó.