Mundo

"Todo se desmorona"

El sistema de salud de Haití casi colapsa: hay pocos insumos, hospitales atacados...

23/04/2024 - 3:18 pm

Hace mucho que el sistema de salud de Haití era frágil, pero ahora se acerca al colapso total después de que las pandillas lanzaran ataques coordinados el 29 de febrero contra infraestructura crítica en la capital y otros lugares.

Por Dánica Coto

PUERTO PRÍNCIPE, Haití (AP).— En una mañana reciente, en un hospital en el corazón del territorio de pandillas en la capital de Haití, una mujer empezó a convulsionar y después se quedó inerte mientras un médico y dos enfermeras trataban de salvarla.

Denize Flerino limpia el sudor de la ceja de su hijo, que tiene fiebre alta, en la sala de urgencias del hospital de Médicos Sin Fronteras en el vecindario de Cite Soleil, Puerto Príncipe, Haití, el viernes 19 de abril de 2024.
Denize Flerino limpia el sudor de la ceja de su hijo, que tiene fiebre alta, en la sala de urgencias del hospital de Médicos Sin Fronteras en el vecindario de Cite Soleil, Puerto Príncipe, Haití, el viernes 19 de abril de 2024. Foto: Ramón Espinosa, AP.

Le colocaron electrodos en el pecho y pusieron en marcha una máquina de oxígeno, sin despegar la vista de una pantalla que mostraba un nivel peligrosamente bajo de oxígeno del 84 por ciento.

Nadie sabía qué le pasaba.

Un niño lava ropa en una escuela pública que sirve de refugio para personas desplazadas de sus hogares debido a los enfrentamientos entre pandillas en Puerto Príncipe, Haití, el lunes 22 de abril de 2024.
Un niño lava ropa en una escuela pública que sirve de refugio para personas desplazadas de sus hogares debido a los enfrentamientos entre pandillas en Puerto Príncipe, Haití, el lunes 22 de abril de 2024. Foto: Ramón Espinosa, AP.

Aún más preocupante, el hospital de Médicos Sin Fronteras en la barriada de Cite Soleil se estaba quedando sin un medicamento crucial para tratar las convulsiones.

“La medicación que necesita, apenas tenemos”, dijo la doctora Rachel Lavigne, médico del grupo humanitario.

La policía detiene un auto para inspeccionarlo en Puerto Príncipe, Haití, el lunes 22 de abril de 2024. Hace mucho que el sistema de salud de Haití era frágil, pero ahora se acerca al colapso total después de que las pandillas lanzaran ataques coordinados el 29 de febrero contra infraestructura crítica en la capital y otros lugares.
La policía detiene un auto para inspeccionarlo en Puerto Príncipe, Haití, el lunes 22 de abril de 2024. Hace mucho que el sistema de salud de Haití era frágil, pero ahora se acerca al colapso total después de que las pandillas lanzaran ataques coordinados el 29 de febrero contra infraestructura crítica en la capital y otros lugares. Foto: Ramón Espinosa, AP.

Es una escena habitual que se repite a diario en hospitales y clínicas de Puerto Príncipe, donde los medicamentos y el equipamiento que salvan vidas escasean o directamente faltan, mientras las brutales pandillas estrechan su control sobre la capital y más allá. Han bloqueado carreteras, forzado el cierre del principal aeropuerto internacional a principios de marzo, y paralizado las operaciones en el puerto marítimo más grande del país, donde los contenedores llenos de suministros cruciales siguen bloqueados.

“Todo se desmorona”, dijo Lavigne.

Una persona se lava en una escuela pública que sirve como refugio para personas desplazadas de sus hogares debido a enfrentamientos entre pandillas en Puerto Príncipe, Haití, el lunes 22 de abril de 2024.
Una persona se lava en una escuela pública que sirve como refugio para personas desplazadas de sus hogares debido a enfrentamientos entre pandillas en Puerto Príncipe, Haití, el lunes 22 de abril de 2024. Foto: Ramón Espinosa, AP.

Hace mucho que el sistema de salud de Haití es frágil, pero ahora se acerca al colapso total después de que las pandillas lanzaran ataques coordinados el 29 de febrero contra infraestructura crítica en la capital y otros lugares.

La violencia ha obligado a cerrar varios centros médicos y de diálisis, incluido el hospital público más grande del país. El Hospital de la Universidad Estatal de Haití, en el centro de Puerto Príncipe, iba a reabrir el 1 de abril cuando comenzó el ataque, pero las pandillas se han infiltrado en el lugar.

Un cuerpo tirado en medio de la calle mientras la gente pasa a su alrededor en el vecindario de Petion-Ville, Puerto Príncipe, Haití, el lunes 22 de abril de 2024.
Un cuerpo tirado en medio de la calle mientras la gente pasa a su alrededor en el vecindario de Petion-Ville, Puerto Príncipe, Haití, el lunes 22 de abril de 2024. Foto: Ramón Espinosa, AP.

Una de las pocas instituciones que siguen operativas es el Hospital Universidad Paz, situado al sur del aeropuerto clausurado. Entre el 29 de febrero y el 15 de abril, el hospital atendió a unos 200 pacientes con heridas de bala, y sigue sin tener camas libres.

“Necesitamos combustible urgentemente porque operamos con generadores. De lo contrario, corremos el riesgo de cerrar nuestras puertas”, dijo en un comunicado el director del hospital, el doctor Paul Junior.

Vecinos levantan una puerta de metal para colocarla como barricada contra las pandillas en el vecindario de Petion-Ville, en Puerto Príncipe, Haití, el sábado 20 de abril de 2024.
Vecinos levantan una puerta de metal para colocarla como barricada contra las pandillas en el vecindario de Petion-Ville, en Puerto Príncipe, Haití, el sábado 20 de abril de 2024. Foto: Ramón Espinosa, AP.

Más de dos mil 500 personas murieron o resultaron heridas en Haití entre enero y marzo, un incremento de más del 50 por ciento en comparación con el mismo periodo del año anterior, según un reporte reciente de Naciones Unidas.

Incluso si un hospital está abierto, a veces hay poco o ningún personal médico porque la violencia de las pandillas estalla a diario en la ciudad, lo que obliga a médicos y enfermeras a quedarse en casa o darse la vuelta si encuentran cortes de carretera manejados por hombres fuertemente armados.

Un niño malnutrido espera a ser atendido en la sala de urgencias del hospital de Médicos Sin Fronteras en el vecindario de Cite Soleil, Puerto Príncipe, el viernes 19 de abril de 2024.
Un niño malnutrido espera a ser atendido en la sala de urgencias del hospital de Médicos Sin Fronteras en el vecindario de Cite Soleil, Puerto Príncipe, el viernes 19 de abril de 2024. Foto: Ramón Espinosa, AP.

El caos ha dejado con pocas o ninguna opción a un creciente número de pacientes de cáncer, Sida u otras enfermedades graves. Los pandilleros también saquean y prenden fuego a farmacias en el centro de la capital.

La propia Médicos Sin Fronteras se ha quedado sin muchos medicamentos utilizados para tratar la diabetes y la hipertensión, y no hay inhaladores de asma para prevenir ataques letales en la capital, dijo Lavigne.

Gente pasa junto a neumáticos y un vehículo quemado utilizado para cortar una calle en la zona de Canapé Vert, Puerto Príncipe, Haití, el lunes 22 de abril de 2024.
Gente pasa junto a neumáticos y un vehículo quemado utilizado para cortar una calle en la zona de Canapé Vert, Puerto Príncipe, Haití, el lunes 22 de abril de 2024. Foto: Ramón Espinosa, AP.

En el hospital de MSF, el personal médico intentó hace poco salvar a un niño con un grave ataque de asma dándole oxígeno, explicó. Eso no funcionó, ni tampoco ninguna medicación. Finalmente, le inyectaron adrenalina, que se utiliza en emergencias para tratar el choque anafiláctico.

“Improvisamos y hacemos todo lo que podemos por la gente que hay aquí”, dijo Lavigne.

Un hombre levanta una cadena utilizada como barricada para que los vecinos pasen al vecindario, mientras preparan una puerta de metal para protegerse de las pandillas en el vecindario de Petion-Ville, Puerto Príncipe, el sábado 20 de abril de 2024.
Un hombre levanta una cadena utilizada como barricada para que los vecinos pasen al vecindario, mientras preparan una puerta de metal para protegerse de las pandillas en el vecindario de Petion-Ville, Puerto Príncipe, el sábado 20 de abril de 2024. Foto: Ramón Espinosa, AP.

La salud de la gente está empeorando porque la medicación que necesitan para sus problemas crónicos no está disponible, advirtió el coordinador de proyecto de MSF, Jacob Burns.

“Se vuelve grave y entonces se quedan sin opciones”, dijo. “Para algunas personas, ahora mismo hay muy, muy pocas opciones”.

Un jugador de dominó con pinzas en el brazo colocadas cada vez que pierde en una escuela pública que sirve de refugio a personas desplazadas de sus hogares por los enfrentamientos entre pandillas en Puerto Príncipe, Haití, el lunes 22 de abril de 2024.
Un jugador de dominó con pinzas en el brazo colocadas cada vez que pierde en una escuela pública que sirve de refugio a personas desplazadas de sus hogares por los enfrentamientos entre pandillas en Puerto Príncipe, Haití, el lunes 22 de abril de 2024. Foto: Ramón Espinosa, AP.

Pese a la urgente necesidad de atención médica, el hospital de Médicos Sin Fronteras en Cite Soleil se ha visto obligado a reducir el número de pacientes externos a los que atiende de 150 a 50 al día, dijo Burns, aunque se atienden todas las urgencias.

Decenas de personas hacen fila ante el hospital cada día y se arriesgan a ser baleadas por pandilleros que controlan la zona mientras esperan a recibir asistencia médica.

Marc Baptiste es atendido por una herida de bala en la sala de urgencias de un hospital de Médicos Sin Fronteras en el vecindario de Cite Soleil, en Puerto Príncipe, Haití, el viernes 19 de abril de 2024.
Marc Baptiste es atendido por una herida de bala en la sala de urgencias de un hospital de Médicos Sin Fronteras en el vecindario de Cite Soleil, en Puerto Príncipe, Haití, el viernes 19 de abril de 2024. Foto: Ramon Espinosa, AP.

Todo el mundo puede entrar en el complejo del hospital, pero el personal médico hace un triaje para determinar qué 50 personas serán atendidas. A los que tienen necesidades menos urgentes se les pide que regresen otro día, dijo Burns.

El viernes por la mañana, Jean Marc Baptiste, de 51 años, entró en la sala de urgencias con un vendaje ensangrentado en la mano derecha. Dijo que policías en un vehículo blindado le habían disparado el día anterior cuando recogía madera para vender como leña en una zona controlada por pandillas.

Marc Baptiste descansa en un banco tras ser atendido en una sala de urgencias de Médicos Sin Fronteras en el vecindario de Cite Soleil en Puerto Príncipe, el viernes 19 de abril de 2024.
Marc Baptiste descansa en un banco tras ser atendido en una sala de urgencias de Médicos Sin Fronteras en el vecindario de Cite Soleil en Puerto Príncipe, el viernes 19 de abril de 2024. Foto: Ramón Espinosa, AP.

Una vez dentro, las enfermeras retiraron el vendaje para mostrar una gran herida en su dedo pulgar mientras él lloraba de dolor. Lavigne le dijo que necesitaba un cirujano plástico, que el hospital no tiene, y pidió una radiografía para asegurar que no había fractura.

De media, por el hospital Cite Soleil pasan tres heridos al día, pero en ocasiones puede llegar a los 14, según el personal.

Un agente de la Policía Nacional de Haití vigila una intersección en Puerto Príncipe, Haití, el sábado 6 de abril de 2024.
Un agente de la Policía Nacional de Haití vigila una intersección en Puerto Príncipe, Haití, el sábado 6 de abril de 2024. Foto: Odelyn Joseph, AP

Hace poco llegaron cinco heridos de bala tras pasar la noche en un hospital público que no podía moverse por los intensos disparos, explicó Burns.

“Hace mucho que Cite Soleil era el epicentro de la violencia”, dijo. “Y ahora la violencia está tan extendida que se ha convertido en un problema para todos”.

en Sinembargo al Aire

Opinión

Opinión en video