Este mural de Jorge Flores Manjarrez podrá ser observado por todas las personas que pasen por la estación San Lázaro línea B. Entre los personajes que aparecen están Joaquín Pardavé, Germán Robles, Tongolele, Lorena Velázquez, Resortes, Fernando Soler y Sara Montiel, por mencionar algunos.
Ciudad de México, 3 de marzo (SinEmbargo).- En el Sistema de Transporte Colectivo Metro es posible encontrar espacios para el arte, uno de ellos es el mural que se encuentra en el metro Auditorio (antes de los torniquetes de salida dirección Barranca del Muerto) en el que se pueden observar a figuras del rock como Kurt Cobain, Jimi Hendrix y Slash, su autor es el artista plástico Jorge Flores Manjarrez. Ahora, inaugura un mural más en el Metro, esta vez es la estación San Lázaro, sin embargo, en esta ocasión el tema central es el cine mexicano.
«Época de Oro» rinde homenaje a las grandes figuras del séptimo arte mexicano por lo que incluye a El Santo, María Félix, Jorge Negrete y Dolores del Río, entre otros, figuras del cine mexicano, quienes forman parte ya de la cultura del país y tuvieron su esplendor aproximadamente de los años 30 hasta los 50, casi 60.
«Tenemos años ya viéndolos una y mil veces en la televisión, son parte de nosotros también, Pedro Infante, Dolores del Río, las películas del ‘Indio’ Fernández, la fotografía de Figueroa, las películas de Gavaldón, las películas de los cómicos como TinTan, el ‘Pachuco’, como Cantinflas que ahora ya se han vuelto como sketch para aquellos que hacen TikTok», señaló Jorge Flores Manjarrez en entrevista a SinEmbargo.
Para el artista, las nuevas generaciones conocen a varias de estas personalidades como Cantinflas, TinTan y Pedro Infante, ya que en las redes sociales se les presentan las historias de sus vidas y datos curiosos, por lo que para él el cine mexicano del siglo XXI no está abandonado y en este mural recrea a algunas figuras famosas con un estilo caricaturesco.
«Yo siempre he dicho que la caricatura en muy inconsciente, no inconsciente mal plan, si no en plano más psicológico, en el plano en el que cuando alguien conoce a una persona, lo primero que hace es hacer una caricatura, pero no significa ridiculizarla, si no que la mente te bosqueja los signos más importantes, como la personalidad de la persona, los ojos grandes bonitos, la nariz respingada, todos esos tipos de detalles te los acerca y te hace un close up el inconsciente, así es la caricatura pero es como el funámbulo, tienes que andar por la cuerda floja para que no se vaya, ni muy exagerado y caiga en el no parecido, ni muy fotografía para que caiga en el aburrimiento, si no que tiene que ser intermedio y de alto impacto, así es más o menos cómo manejo los personajes», destacó.
Este mural está hecho como el de la estación Auditorio y el de la estación Chabacano, sobre madera y sobre tela usando colores con acrílicos. «Los acrílicos son materiales que duran muchísimo, si tú ves mi paleta de colores, está llena de sedimentos que son piedras, es una piedra, la pintura de capa y capa se va haciendo como piedra entonces el acrílico es super efectivo para exteriores».
El apoyo es importante para un artista por lo que Jorge Flores destacó la labor de Converse, quien lo ha apoyado desde el primer mural en el metro Auditorio, del que dijo, la gente le reclamaba que faltaban personajes nacionales, por lo que hizo el del metro Chabacano, dedicado al rock nacional. «Ahora, después de 10 años hago un mural pero me quito la ropa de roquero y me pongo la topa de cine de oro y hago algo sobre la época de oro del cine mexicano», refirió.
Respecto a su obra, Flores Manjarrez contó que disfruta mucho tener un lienzo en blanco, se prepara con bocetos previos y con planos. «En un principio lo que más me emociona es el lienzo en blanco, el lienzo en blanco me emociona muchísimo es como un regalo como Santa Claus o los reyes magos que te levantas temprano y ves, abres y ves y dices estos son mis juguetes con los que voy a empezar a jugar, yo voy a empezar a pintar es muy lúdico para mí, claro, todo lo hago con una metodología y una disciplina importante porque si no, no se podría», dijo en entrevista el artista.
Jorge Flores Manjarrez compartió que su obra, en especial sus murales, han impactado a las personas de manera «terapéutica», ya que hay gente que le ha compartido que tras un día malo se acerca a su obra en el metro, aunque también le ha ocurrido que hay personas que lloran. «Una vez pinté un retrato de alguien que me pidió y lo vio y se puso a llorar» y agregó «ya no sé si bueno o malo».
«Yo creo que se transmite a la gente, el gozarlo, verlo ya montado que la gente lo pueda disfrutar y lo pueda hacer suyo y sobre todo que ha servido, el mural, por ejemplo, de Auditorio y Chabacano, me ha comentado gente que cuando tienen un día muy malo o les va muy mal, van al mural como si fueran al psicólogo o a ver a un buen amigo y ya cuando están frente al mural les cambia la perspectiva, se sienten bien y están contentos y regresan como nuevos, como si hubieran salido de viaje, eso me gusta mucho, yo nunca pensé que mis murales fueran a ser terapéuticos», acotó Jorge Flores Manjarrez.
