La presencia de los legisladores plurinominales enriqueció al Congreso durante los primeros años. Después, esas posiciones se convirtieron en botín de las camarillas que controlan los partidos políticos y en la actualidad ya no cumplen un propósito sano.
Ciudad de México, 22 de febrero (SinEmbargo).- La desaparición de los 200 diputados de representación proporcional y de 64 senadores, 32 de primera minoría y 32 plurinominales, es lo que propone la iniciativa de reforma constitucional que el Presidente Andrés Manuel López Obrador envió el pasado 5 de febrero al Congreso de la Unión.
De esta manera se plantea terminar el impúdico reparto de cargos políticos que las dirigencias de los partidos políticos llevan a cabo en favor de sus socios, cómplices, amigos o parientes. Quedarían por lo tanto sólo 300 diputados federales y 64 senadores, todos electos por el principio de Mayoría Relativa.
Se argumenta en la iniciativa presidencial: “La crisis de representación política es una de las principales características de las llamadas democracias contemporáneas. En México, desde hace décadas, se cuestiona la legitimidad de las personas legisladoras en general, pero marcadamente de las plurinominales”.
De origen, los diputados de partido fueron considerados para dar espacios en el Congreso a las fuerzas opositoras al gobierno, en particular a las de izquierda, que durante la década de los años 70 optaron por la vía armada para combatir a un régimen autoritario y antidemocrático.
La presencia de los legisladores plurinominales enriqueció al Congreso durante los primeros años. Después, esas posiciones se convirtieron en botín de las camarillas que controlan los partidos políticos y en la actualidad ya no cumplen un propósito sano.
LOS DIPUTADOS DE PARTIDO
En las elecciones del domingo 6 de julio de 1958, Adolfo López Mateos ganó la Presidencia de la República con el 89.81% de los votos.
Sumó 6 millones 767 mil 754 sufragios, con el respaldo del PRI, del Partido Nacionalista Mexicano (21 mil 393 votos), del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana (21 mil 548 votos) y del Partido Popular Socialista (5 mil 768 votos).
Su único rival, Luis Héctor Álvarez Álvarez, del PAN, obtuvo 9.42% de la votación total. Era México el País del partido político casi único, con un régimen político sin legitimidad.
Ante la presión de importantes movimientos sociales, como el del magisterio (entre 1956 y 1958), el de los ferrocarrileros (entre 1958 y 1959), y el impacto social y la efervescencia que generó en toda Latinoamérica el triunfo de la revolución cubana (consolidada en su fase armada con el derrocamiento de Fulgencio Batista el 1 de enero de 1959), el gobierno de Adolfo López Mateos (1958-1964) se vio presionado para impulsar reformas electorales que permitieran ampliar la participación de la oposición.
La reforma al artículo 54 constitucional, publicada en el Diario Oficial de la Federación el sábado 22 de junio de 1963, dispuso que todo partido político nacional que lograra el 2.5 por ciento de la votación total en el País, tendría derecho a que se le acreditaran 5 Diputados de Partido, y uno más, hasta 20 como máximo, por cada medio punto porcentual de votos adicional.
En los siguientes diez años, la oposición logró 100 diputados de partido, diez por año en promedio, pero a los partidos de oposición les costaba trabajo hacer el porcentaje mínimo de votación.
Ante esta situación, el presidente Luis Echeverría promovió las reformas constitucionales publicadas en el Diario Oficial de la Federación el lunes 14 de febrero de 1972 para disminuir el porcentaje de votación que se le exigía a los partidos de oposición como cuota mínima para poder acreditarse sus cinco primeros diputados de partido. El porcentaje bajó de 2.5%a 1.5%.
Al mismo tiempo se aumentaron las diputaciones de partido que podía obtener la oposición, al pasar de 20 a 25 curules.
LA REFORMA DE 1977
Los cauces de participación abiertos en 1963 y 1972 no fueron suficientes, pues entre 1970 y 1974 se desarrolló en la Sierra de Guerrero la guerrilla organizada inicialmente a través de la Asociación Cívica Guerrerense, con Genaro Vázquez Rojas al frente y el Partido de los Pobres, que tenía como líder a Lucio Cabañas Barrientos.
Fue en esa época también, el 29 de agosto de 1974, cuando se perpetró en Guadalajara el secuestro del exgobernador y refundador de la Universidad de Guadalajara, en 1925, José Guadalupe Zuno, por las Fuerzas Revolucionarias Armadas del Pueblo, que se identificaban con las siglas FRAP.
También, entre 1973 y 1977, operó en varias regiones del país la célebre Liga Comunista 23 de Septiembre. Se presume que un comando de esta organización guerrillera fue el que terminó con la vida del empresario regiomontano Eugenio Garza Sada el 17 de septiembre de 1973.
Todos estos acontecimientos condicionaron al gobierno para ampliar los cauces de partición democrática.
PRIMEROS 100 PLURINOMINALES
La presencia de los diputados federales plurinominales aumentó con la reforma al artículo 52 constitucional publicada el 6 de diciembre de 1977, siendo Presidente José López Portillo y Pacheco y Secretario de Gobernación Jesús Reyes Heroles.
A partir de entonces habría 300 diputados de mayoría relativa y 100 de representación proporcional.
AUMENTAN A 200 LOS PLURIS
Con la reforma del artículo 52 constitucional, del 15 de diciembre de 1986, siendo Presidente de la República Miguel de la Madrid Hurtado y secretario de Gobernación Manuel Bartlett Díaz (actual director de la Comisión Federal de Electricidad), se aumentó la Cámara de Diputados federal a 300 diputados de mayoría relativa y 200 de representación proporcional.
SENADORES PLURINOMINALES
El 3 de septiembre de 1993, durante el gobierno del priista Carlos Salinas de Gortari (1988-1994) se publicó en el Diario Oficial de la Federación el decreto que dio origen a los senadores de representación proporcional.
En los comicios del domingo 21 de agosto de 1994 fueron electos tres senadores de mayoría relativa y uno de la primera minoría por cada entidad federativa del país.
Esta norma no se había modificado desde el año de 1874, cuando fue instalado por primera vez el Senado de la República en nuestro país.
El jueves 22 de agosto de 1996 el Diario Oficial de la Federación publicó una nueva reforma al artículo 56 constitucional en el que se establecía una nueva conformación de la Cámara de Senadores, que estaría integrada por 128 legisladores, de los cuales, en cada Estado y en la Ciudad de México, dos serían elegidos según el principio de votación mayoritaria relativa y uno será asignado a la primera minoría. Para estos efectos, los partidos políticos tendrían que registrar una lista con dos fórmulas de candidatos.
Adicionalmente, los partidos políticos tendrían que presentar una lista de 32 aspirantes a Senadores de Representación Proporcional. Los 32 senadores plurinominales serían distribuidos entre los partidos políticos, con base en el porcentaje de votación que sumara cada uno de ellos en el país.