Un experto de la UNAM reflexiona sobre las capacidades de clonación que hemos alcanzado, por qué la duplicación de primates revelada este año es histórica y la necesidad de que la comunidad científica tenga una ética más profunda incluso que la legislación vigente para evitar "aberraciones".
Ciudad de México, 9 de febrero (SinEmbargo).– La última semana de enero, a través de un estudio publicado en la revista especializada Nature Communications, investigadores de varias universidades y centros de investigación en China revelaron que un mono rhesus, al que nombraron “Retro”, y fue clonado en julio de 2020, se ha mantenido vivo durante más de tres años y en buen estado físico, un éxito histórico en este departamento de la ciencia.
Y es que es la primera vez que un mono clonado de esta especie sobrevive hasta alcanzar la edad adulta, con lo cual los científicos consideran que ya se puede declarar el procedimiento una "clonación exitosa". Hay que recordar que este grupo de científicos chinos ya había conseguido clonar primates, por primera vez en la historia, en 2018. En otra ocasión, la clonación de un mono rhesus, del mismo tipo que “Retro” pudo nacer pero solamente sobrevivió 12 horas.
Los expertos chinos utilizaron una técnica estándar conocida como transferencia nuclear de células somáticas (SCNT, por sus siglas en inglés), que fue la misma que se usó para clonar a la famosa oveja Dolly en 1996 y luego a otros mamíferos, incluidos cerdos, vacas, caballos y perros.
Para hablar de ello, GALILEO, el programa de ciencia de Estudio B, tuvo como invitado especial al Doctor Diego Cortez Quezada, de la UNAM. "Lo que lograron los chinos es mejorar las técnicas de clonación. Venimos clonando animales desde 1963. Siempre ha estado además presente en la vida popular, en la ciencia ficción, la técnica que se inventó es la misma que se viene usando, primero con Dolly, y ahora con estos primates", señaló en el programa.
"La clonación siempre ha sido ‘baja’: no sabemos cuántos intentos se hicieron, más de 300 intentos, para lograr dos macacos, esto en 2018. Ahora en este nuevo protocolo, son 109 o 111 embriones, y tuvieron este mono, pero mejoraron todas las etapas del proceso, es la gra innovación, pero se tiene que seguir empezando con cientos para tener un caso de éxito", añadió el científico es parte del Centro de Ciencias Genómicas de la UNAM.
El experto también detalló que el trabajo con primates ha sido lento por las amplias restricciones que hay para experimentar en este tema. "En EU, en México, está muy restringido, hay una condición legal también. Esto es lo que nos presentan, estos son casos de éxito, pero los mismos científicos nos han dicho en entrevistas que se han realizado miles de procesos, miles de embriones, y lo que vemos publicado es el caso exitoso. Es una carga muy grande a nivel experimental, en muchos otros países habría conocimiento, habría tecnología, pero sólo se desarrolla allá por lo legal", indicó.
Para Cortez Quezada, además, la clonación exitosa no deja entrever claramente sus posibles utilidades médicas, como han presumido los autores del estudio en China. "No me queda muy claro para qué queremos hacer clonaciones. Básicamente lo que muestran es que ellos pueden clonar exitosamente. No le veo utilidad tampoco para clonación de humanos, pero ellos dicen que es para avances médicos, pero no se sabe muy bien para qué se aplicaría, porque tener ‘granjas de humanos’ suena completamente aberrante", explicó.
"Es un éxito científico, pero puede tener una vertiente muy interesante para el proceso de ‘desextinción’, que es traer a la vida a especies que nosotros mismos hemos contribuido a desaparecer. Podríamos buscar eso, hay proyectos famosos, como el del mamut, en Harvard, intentando modificar a elefantes africanos. Eso suena también muy exótico, como los libros de ‘Jurassic Park’, o el caso de la vaquita marina, que está a punto de desaparecer, quizá en el futuro cuando el mundo haya avanzado lo suficiente", añadió.
Con respecto a la parte ética, Cortez Quezada aseguró que los científicos "deben tener una ética más fuerte aún que la legislación", porque la legislación "viene retrasada conforme los avances científicos". "Los que usan esos avances deben tener un nivel moral para sus investigaciones, sobre todo con el tema humano, animal", dijo.
Por último, el experto también habló de la posibilidad de la clonación humana. "Si el laboratorio chino quisiera clonar humanos lo podrían hacer mañana, ahora que ya rompimos la barrera de los primates que se publica este año, ya no hay barrera científica, se tendría que partir de una gran cantidad de material, muchos óvulos y espermas. ¿Qué les impide? Yo creo que la comunidad internacional no aceptaría esto, por lo pronto se van a quedar con primates", concluyó.